Capítulo 12

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-Harry, tengo algo muy importante de lo que hablarte -me dijo Ron con gravedad una mañana en la que desayunábamos en el Gran Comedor. Yo le miré con atención, y por cómo se comportaba Hermione, intuía que ella ya sabía qué iba a decirme. -No puedo aguantar más las ganas de saber quién te gusta.

Empezó a reír pero yo puse los ojos en blanco. Hermione se esforzó por no reírse también y enseguida intervino:

-Es que estás muy raro, Harry. Desapareces siempre a la hora de comer y ya no vas a la biblioteca, y no sabemos dónde te metes.

-Y apareces sonrojadito como un bebé -dijo Ron guiñando un ojo. Hermione lo fulminó con la mirada y continuó:

-Si realmente no te gusta nadie, queremos saber qué te pasa.

Dejé que transcurriera un instante en silencio, reflexionando sobre qué hacer. Miré alrededor. Por suerte por las mañanas no había mucha gente, y en aquella parte de la mesa nos encontrábamos solos. Quizá había llegado el momento de que lo supieran. Quizá había llegado el momento de que yo mismo lo supiera.

-¿Queréis saberlo realmente? -pregunté, entrecerrando los ojos. Ambos asintieron como si les fuera a revelar el origen del universo, y entonces añadí: -Tenéis que prometerme que no vais a juzgarme.

-¡Tío! -exclamó Ron. -¿Acaso te hemos juzgado alguna vez...? -Hermione y yo nos quedamos en silencio. -¿... y no nos hemos disculpado dos minutos después por ello? Vamos, lo único por lo que te juzgaría es si me dijeras que te gusta Malfoy... -comenzó a reír, pero yo dejé el tenedor sobre la mesa incómodo, sintiendo de repente ganas de vomitar. Ron y Hermione parecieron entender mi reacción, porque se pusieron pálidos y abrieron la boca como si realmente les hubiera explicado el origen del universo. -¿¡Malfoy!? -exclamó. -¿¡De todas las personas que había!?

-¿¡Quieres bajar la voz, Ron!? -dije avergonzado.

-Malfoy... -repitió, esta vez haciendo aquello que él llamaba susurrar.

-He de reconocer que yo también estoy sorprendida -admitió Hermione en voz baja. -¿Es con él con quien estás cuando desapareces?

Ella parecía más receptiva de primeras, así que asentí mirándola a ella. Sentía que las mejillas me ardían como si estuviera enfermo: ya era oficial. Me gustaba Malfoy.

Ron, que parecía haberse recompuesto un poco del shock inicial, puso una expresión que yo entendía como "ahora me estoy esforzando por entenderte" y comenzó a hablar:

-Entonces... ¿eres gay?

Por un momento agradecí la falta de sutileza de mi amigo; compartí una mirada cómplice con Hermione y ella se rio suavemente.

-¿Cómo va a ser gay, Ronald? ¿Ya se te ha olvidado lo mucho que nos lloriqueaba por Cho?

-Bueno, no sé -dijo él encogiéndose de hombros -, quizá estaba descubriendo su sexualidad.

-Por si no lo sabes, existen las personas bisexuales -dijo ella elevando el mentón. Él pareció molesto y replicó:

-¡Ya sé que existen las personas bisexuales!

-Entonces ¿cómo puedes decir que Harry es gay si claramente ha sentido atracción hacia las chicas?

-¡Eh! -dije, un poco cansado. -¿Habéis terminado ya de debatir mi sexualidad?

Ellos me miraron con cara de disculpa, y entonces Ron añadió:

-Vale, entonces eres bisexual, ¿no?

Suspiré. No entendía por qué aquello era importante en algún sentido.

-¿Qué más da? Lo que importa es lo que siento ahora.

So close (Drarry)Where stories live. Discover now