capítulo 3: ¡eres un idiota!

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Pasado 2 días del resfriado de los erizos, ambos se recuperaron rápidamente y podían salir libres de su "prisión" llamada "cama".

El pequeño Sonic se estiraba mientras miraba curioso el taller de tails, era muy amplio y con muchas cosas extrañas, en su tiempo ni casa tenían, vivían donde querían y dormían es sacos de dormir, no les era preocupante pero entendía que con el tiempo debía buscar la manera de tener un propio hogar, tal como sus yo del futuro.

Dejó de explorar los inventos de su mejor amigo y se acercó junto a él en la computadora.

Tails estaba tan concentrado que poco lo notó, su estrés aumentaba al ver que no llegaba a nada, pensó toda la noche una forma de contactar con su yo del pasado, usó el poder de una esmeralda que poseía pero no funcionó, usó códigos y una pequeña computadora que le quitaron a Eggman... Sin resultado alguno... Su última opción era pedirle ayuda a rookie, aunque poseía el último prototipo del rubí fantasma no sabía aún como usarlo... ¡De seguro esa era la clave!.

Una pequeña nariz negra asomándose por su escritorio le llamó la atención, con algo de vergüenza recordó que no estaba solo, tan concentrado estaba que se olvidó de su invitado.

-lo siento Sonic, me olvidé de todo- se disculpó mientras lo tomaba en sus brazos y lo sentaba en sus piernas para que el menor vea lo que hacia en el computador.

Sonic solo negaba con su cabeza mientras curioso señalaba algunos códigos en la pantalla.

-lamento no ser de gran ayuda, estoy viendo la manera de contactar con tails del pasado pero aún no hallo una forma- admitió frustrado, anoche no sólo pensaba en cómo regresarlo, también se planteó la idea de que Sonic debe extrañar su tiempo, a sus amigos, sus aventuras.

El menor se llevó pensativo una mano al mentón, tails al ver esa expresión le recordó mucho al Sonic actual, siempre que "piensa" hace eso.

Se asustó al sentir que brincaba sobre sus piernas, curioso observó cómo el menor agarraba la esmeralda entre sus manos y señalaba la foto que descansaba cerca de la computadora.

El doble colas agarró el portaretratos viendo la foto que se tomó con la resistencia cuando ganaron la guerra.

Sus ojos se toparon con alguien en especial... El causante de aquella guerra que ahora vivía junto a rookie.

-infinite... No... Zero... Lo entiendo, ¿Cómo no se me ocurrió antes? ¡Eres un genio Sonic!- alagó al menor.

Sin poder evitarlo lo abrazó con fuerza... Ahora todo estaba más claro, su pequeña visita pronto regresaría a casa.

-¿Que está pasando aquí?-

Ambos miraron sorprendidos al cobalto mayor apoyado tranquilo en el marco de la puerta, su semblante aunque era relajado se le notaba un poco de molestia.

-hola Sonic, sólo estábamos indagando- respondió guiñándole un ojo al menor que aún seguía sentado en sus piernas.

El Sonic del pasado se rió y también le guiñó un ojo pero con mirada ¿Sexy? O eso es lo que le pareció al cobalto mayor.

-y... ¿Llegaste a algo? Yo creo que ya es hora de que vuelva a su época- respondió seco.

Aquello dicho le molestó al erizo menor, su yo futuro era un verdadero dolor de cabeza... Si le provocaba... Se atenderá a las consecuencias.

El zorro iba a responderle, de mala manera al oír aquello, pero no contó con un abrazo casi asfixiante de parte se su pequeña visita, Sonic ahora de pie sobre sus piernas acariciaba las orejas del zorro sonriéndole.

Una pequeña visitaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora