CAPITULO 17

1.6K 38 0
                                    

NARRA EVA
Pasaban y pasaban las horas y nadie nos decía nada. Me iba a volver loca en esa sala de espera de hospital. Salían y entraban médicos apurados de donde se supone que estaba Hugo, pero nadie se paraba a decirnos nada. Seguíamos todos allí, nadie quería irse, y en parte lo agradecía. Mi cabeza no paraba de darle vueltas a todo lo que había pasado, pero sobre todo no paraba de pensar en mi rubio con tatuajes que ahora mismo estaba en una sala y yo no sabia si estaba bien o no. Necesitaba saber de él ya, que me digan que esta bien y nos vayamos a su casa, que hagamos el amor 30 veces y durmamos juntos, que al día siguiente me despierte y lo vea conmigo. No se, no aguantaba esta situación, que habrá pasado en ese baño y quién coño era ese tío. No podía parar de pensar y pensar. También mi cabeza barajaba la idea de que me estaba enamorando, si Eva, te estás enamorando de ese rubio que se ha instalado en tu corazón y ojalá no salga nunca.
Cuando a mi cabeza no le cabía ya nada más, la puerta se abrió, saliendo un doctor tras ella
Doctor: acompañantes de Hugo Cobo? -nos levantamos todos, pero delante quedamos Sam y yo
Sam: qué ha pasado doctor, cómo está -dijo mi amiga desesperada, normal, es su hermano. Yo agarraba su mano y atendía lo que el doctor nos iba a decir
Doctor: vale, relajaos. Ahora mismo está mas o menos estable -como que mas o menos por dios- ha perdido muchísima sangre, le hemos puesto medicación. Al parecer le han clavado una navaja en sus dos costados, y varias veces. Él ha intentado hacer fuerza después de eso seguramente porque está dañado por dentro. Hemos limpiado por dentro y le hemos cosido las rajas que tiene. Ahora mismo lo tenemos medio estable, está dormido aun por los efectos de la anestesia. Hemos tenido que poner otra dosis porque se ha despertado en mitad de la operación, estaba teniendo una pesadilla, ha nombrado repetidas veces el nombre de Eva, acompañado de llanto y de la palabra NO, no se que habrá pasado, pero puede que tenga que ver con esa pesadilla -oh dios Hugo, que ha pasado en ese baño…- vale ahora lo que tengo que deciros es que hay dos opciones. La primera es que a ver como reacciona a la medicación, eso corre el riesgo de que puede que vaya bien o que entre en estado critico, le falta mucha sangre en el cuerpo. Y la segunda opción es que un donante de sangre, compatible con él, le done un par de bolsas para que su sangre vaya regenerándose y salga del estado crítico y pueda estar completamente estable
Sam: yo soy su hermana, siempre han dicho que tenemos la misma sangre y el mismo grupo sanguíneo, yo puedo donarle
Eva: y yo soy donante universal, también puedo ayudar
Doctor: está bien, eso es genial. Enseguida os sacaremos sangre y se la pondremos, a ver que tal la va captando su cuerpo y si todo va bien podréis entrar a verlo
Sam y Eva: mil millones de gracias doctor
Volvimos con los chicos y les explicamos todos, ellos se pusieron algo mas contentos y veían las cosas de otra manera, al igual que yo. Estaba deseando de ver a Hugo, verlo bien y estar con él. Lo necesitaba. También quería saber que había pasado ahí dentro para que todo esto sucediera.
Llegaron unos médicos y nos sacaron 2 bolsas de sangre a cada una, bebimos una coca cola después para no marearnos ni nada y nos dijeron que en poco nos comentarían como iba todo. Mi ilusión por verlo y porque todo estuviera bien, crecía. Con lo de la pesadilla me he acordado que Hugo no ha tomado la pastilla esta noche, quizá también tenga que ver con eso. En mi bolso llevaba todas sus cosas, incluidas las pastillas. Luego se lo diré al doctor.
Seguíamos esperando cuando el móvil de Hugo empezó a sonar, descolgué extrañada
Eva: si?
X: Hugo Cobo?
Eva: em no, soy su novia, quién es
X: llamo de comisaria, hemos encontrado al hombre que le ha hecho eso. Se dejó el arma blanca que usó en el baño del bar, la hemos analizado y hemos dado con el hombre. Al parecer tiene una denuncia puesta por parte de Hugo desde hace unas semanas, por un golpe con el coche. Ahora mismo esta en el calabozo. Puedo hablar con Hugo?
Eva: verá señor agente, Hugo está ingresado en el hospital aun, están intentando estabilizarlo
Agente: oh perdón, soy un inconsciente. Vale pues en ese caso se lo digo a usted. Este hombre dormirá en el calabozo de comisaria hasta que Hugo esté bien y declare los actos. Mañana iremos a verlo y que nos cuente si está estable lo que pasó. Pero este delincuente no se va a librar de unos años de cárcel, lo único es que para ampliar su condena y poner su denuncia, necesitamos a Hugo, él tiene que ponerla
Eva: entendido agente. Gracias y mañana nos veremos
Agente: hasta mañana señorita, suerte -y colgó. Le conté a Sam lo que me dijo y seguimos esperando. Al cabo de media hora el doctor salió otra vez y volvimos a acercarnos a él.
Doctor: chichas, gracias. La sangre está adaptándose a su cuerpo correctamente y su respiración es mas tranquila. Le hemos dado la pastilla que tiene que tomar -sonreí y le agradecí con la mirada- así que venid conmigo y lo veis. Esta dormido aun, no esta muy consciente, pero escucha todo. Seguramente en unas horas irá despertando y ya podrá hablar. Suerte -le dimos las gracias al doctor y Sam y yo entramos a la habitación. Nada mas entrar mi corazón se partió en mil pedazos. Hugo estaba sin camiseta, con una venda que rodeaba su cuerpo. Estaba conectado a una maquina que media su ritmo cardiaco y tenia dos vías puestas donde en una estaba la sangre que iba entrando en su cuerpo y otra la medicación. Se me partía el alma verlo así. Sam y yo nos acercamos y nos pusimos cada una a un lado de la cama, le cogimos la mano y no articulábamos palabra, solo lo mirábamos y por dentro rezábamos porque todo estuviera bien. Yo quería hablarle, ya que si me escuchaba.
Sam: Evi os dejo solos, se que quieres hablarle, y él te escucha, así que ahora mas tarde entramos los demás -asentí y ella dejó un beso en la cabeza de su hermano y luego otro en la mía. Salió de la habitación y yo seguía ahí, cogiéndole la mano al niño que me había robado todo, que estaba dentro de mi haciéndome sentir cosas que nunca pensé que volvería a sentir y haciéndome la mas feliz del mundo. Después de mirarlo durante un rato largo, decidí decirle algo
Eva: Hola amor, soy Eva. El doctor nos ha dicho que escuchas pero que aun estas flojito para hablarme y abrir esos ojos verdes donde estoy perdida. Pero no te preocupes, ya queda menos. Estoy deseando que despiertes ya y me mires con tu sonrisa en la cara, solo con eso, ya estoy más que feliz. No se que ha pasado en ese baño, pero ese tio va a pagar por lo que ha hecho, tenlo por seguro. Te estoy echando mucho de menos, aunque ahora esté aquí contigo, te echo de menos. Necesito tus besos, tus caricias, tus abrazos. Te necesito a ti, entero. Vamos a salir de esto juntos. Así que por fa Huguito, no tardes en despertar y regalarme esa sonrisa que me tiene loca, tenemos que seguir jugando, juntos. Te quiero. -dejé un beso suave en sus labios y me fui de la habitación para que pudieran entrar a verlo. Me mataba verlo así. No hacia mucho tiempo que estamos juntos, pero para nosotros parecía que habían pasado años. Este niño me importaba de verdad.
NARRA HUGO
Llevo horas dormido, se que estoy en el hospital porque huele a eso. He escuchado a gente, supongo que han sido los médicos. Puedo notar que me han operado, me duele el cuerpo, pero no soy capaz de hablar ni de abrir los ojos, quiero hacerlo ya. Lo ultimo que recuerdo es tener una pesadilla en la que hacían daño a Eva. Necesitaba verla ya y ver que está bien. Cuando salga de esta, porque espero salir, voy a mover cielo y tierra para que ese mal nacido no vea la luz del sol en su vida. No me importa que me haya hecho esto, me importa que le pudiera hacer algo a Eva.
Llevo un rato sin escuchar nada, supongo que estaré solo en la habitación. Escucho gente entrar y salir, supongo que serán los médicos. Llevo un rato queriendo abrir los ojos pero me es imposible ahora mismo, me noto super débil. De repente vuelvo a escuchar la puerta y se que es Eva una de las personas que ha entrado, huele a ella. Creo que va con Sam, también puedo reconocer su perfume. Me han cogido las manos, las puedo notar. Quiero abrir los ojos con ansia pero no puedo, no me lo permite mi flojera. Escucho como Sam le dice a Eva que va a salir. Eva me está hablando, está realmente preocupada, lo noto en su voz, ojala poder hablar y decirle que estoy bien, solo si ella esta conmigo. Me enamora cada palabra que suelta por su boca y quiero decirle que siento lo mismo, puta flojera que no me deja reaccionar. Ha terminado de hablar, noto como ha rozado mis labios suavemente y ha salido de la habitación. La separación de su mano con la mia me ha provocado que me de frio. Quiero que vuelva aquí conmigo.
Eva me lo ha pedido, quiere que despierte y no sabe las ganas que tengo yo de hacerlo y poder abrazarla. La necesito. Necesito su piel en contacto con la mía, necesito verla y sentirla. Vuelvo a estar solo, y sigo haciendo el intento de despertar.
Alguien acaba de entrar a la habitación, me han inyectado algo, supongo que será medicación. Espero que me haga efecto ya y me ayude a abrir los ojos y a poder hablar. Noto como me estoy durmiendo, será debido a lo que me han metido. Al cabo de un rato noto como me estoy despertando, pero a diferencia de antes, ahora estoy abriendo un poco los ojos, puedo notar la claridad de la habitación, noto que la voz quiere salir ya de mi cuerpo, pero no hay nadie aquí a quien le pueda decir que estoy despierto y que quiero ver a Eva ya. Como por arte de magia, unos enfermeros entran por la puerta
Enfermero: Hugo como te encuentras?
Hugo: pues un poco atontado, me duele todo -entra otro señor a la habitación. Supongo que es el doctor, y efectivamente
Doctor: te hemos operado Hugo, tiene los dos costados cosidos ahora mismo, no puedes hacer mucho esfuerzo ahora mismo, así que si quieres algo, pulsa este botón -me señaló un botón que había colgado de la cama donde yo me encontraba- ahora mismo acabas de despertar. Tu situación actual es muy buena. Teníamos miedo de que no salieras del estado crítico, pero tu hermana y tu novia te han donado sangre, la necesitabas para estabilizarse, has perdido mucha -sonreí al pensar que dos de las mujeres de mi vida me habían ayudado a sobrevivir- ahora tranquilo y vamos a ver como vas pasando el día, con suerte mañana te puedes ir a casa. Por cierto, la policía vendrá hoy a lo largo del día, a hacerte unas preguntas sobre lo que pasó, te lo digo para que no te asustes
Hugo: entendido, muchas gracias por todo doctor, por cierto, puedo ver a Eva? -este sonrió
Doctor: estás enamorado hasta las trancas eh chaval -asentí- no te preocupes, ahora les comento todo y les digo que pueden entrar. Vendrán de dos en dos, no es bueno que de primeras entre mucha gente, luego si pueden entrar todos
Hugo: perfecto, gracias otra vez
Al rato la puerta se abrió y ahí estaban las 3 mujeres de mi vida.
--------------------------
Que os está pareciendo??
Ha dado un giro drástico, pero se vienen cosas chulas, o por lo menos para mí lo son. Seguimos leyendo! 💘

Intenta Olvidarme Where stories live. Discover now