SCAR. Capítulo XXII

465 68 1
                                    

La doctora esperó a que Vante se serenara un poco.

- De verdad quiero que esto funcione y yo me esfuerzo... pero...

- Tienes miedo.

- ¡No sé cómo no tener miedo!- exclamó, destrozado. Las palabras de JungKook le habían dolido.

- Tu miedo está matando tu relación. JungKook es un chico paciente, pero en una relación son dos los que tienen que poner de su parte para que funcione. JungKook sabe que tienes miedos, sabe que no puedes tener sexo, sabe que tienes un pasado tormentoso... lo sabe y ha aceptado emprender este camino porque siente algo hacia ti.

- ¡Son tantas cosas! ¡No quiero perderle!

- Cuando JungKook se ha ido de aquí, yo lo que he tenido en mente ha sido sólo una cosa: JungKook se siente enfadado porque tus miedos se traducen en que dudas de sus sentimientos.

El chico se quedó en silencio y se secó las lágrimas, aunque éstas volvieron a salir.

- Usted puede mirarle a simple vista y puede darse cuenta de que es guapo, sexy... pero también es cariñoso, atento, entregado. No tiene sentido que se complique tanto la vida por mí.

- Él quiere complicarse la vida por ti, porque cree que mereces la pena, porque quiere llevar una relación contigo y...

- A menudo me siento como un trapo sucio y usado- dijo Vante, apretando los dientes- no puedo entender que JungKook... ¡JungKook, entre todas las personas! Pueda fijarse en mí. Es absurdo. Cada vez que veo como me mira... me hace sentir tan bien y, al mismo tiempo, me hace sentir... que no sé qué hace conmigo. No quiero perderle, pero tampoco quiero sufrir más.

- ¿Te arriesgarías por él? ¿Piensas que JungKook como novio merece la pena?

Vante pensó en todo lo que había pasado con JungKook desde que le conoció: como el chico se quedó a su lado tras saber que le habían violado, como respetó sus tiempos, como podía controlar sus crisis, pensó en la noche de ayer, la nota de hoy.

- JungKook merece demasiado la pena. Pero...

- Entonces es el momento de dejar atrás tus demonios, Vante- dijo la doctora- si tú no te haces cargo de tus demonios, de tus fantasmas, ellos se harán cargo de ti. Y de tu relación. De hecho, estos pequeños roces y discusiones que has tenido con JungKook son fruto de esos demonios y fantasmas.

- ¿Cómo los elimino?- preguntó Vante.

La doctora sonrió.

- Debo hablar antes con JungKook.

Vante salió y en la puerta se tropezó con JungKook.

- Eh...- dijo JungKook y le tomó de la mano, el chico le miró- lo lamento, no pienso que pongas excusas para terminar lo nuestro, sé que te esfuerzas, es sólo que a veces a mí también me cuesta. Lo siento- añadió y Vante le abrazó.

- La culpa es mía.

- No te tortures más.

- La doctora quiere verte.

- Bien, si necesitas algo, avísame- le dio un beso en la frente y entró en consulta.

Una vez entró, se hizo el silencio y se sentó.

- Eres un chico que perdona fácilmente y asume sus actos, eso es algo que a Vante le hace falta en su vida. Pero no debes consentirle tanto- dijo la doctora.

ScarOù les histoires vivent. Découvrez maintenant