Un pequeño reto del mes de Octubre sobre este hermoso ship UwU
Te dejo información del reto aquí adentro por si quieres participar
¡Y disfruta el contenido! 🧡💚
-Portada y separadores hechos por mi
-Los personajes usados no son de mi propiedad, cré...
Hace unos días Mitsuki e Inko habían planeado llevar a sus respectivos hijos a acampar fuera de la ciudad como premio por sus buenas calificaciones. Ese mismo día llegaron y armaron las tiendas, y fueron preparando la comida. Una vez con sus pancitas llenas, Katsuki e Izuku pidieron permiso para ir a explorar cerca de allí; el problema era que eso había sido hace unas horas, había comenzado a llover y los niños no aparecían.
–¡Inko! ¡¿Los encontraste?!–.
–¡N-no! ¿Y-y si algo les pasó? No sé si sabrán volver o estarán heridos o-–.
–Hey, tranquila. Respira hondo y cálmate. Katsuki sabe más o menos cuidarse solo y estoy segura que cuidará de Izuku hasta que regresen– <Solo espero que el mocoso no haya matado al pequeño Izuku-kun>.
Mientras tanto, en una pequeña cueva algo alejada de la zona, se encontraban dos pequeños de 6 años refugiándose de la lluvia.
–T-tengo miedo Kacchan– decía el pequeño Izuku abrazando sus piernas contra su pecho.
–Cállate, TÚ nos metiste en esto. Todo por andar persiguiendo un lobo según tú–.
–¡Es verdad! Se parecía mucho a ti, era muy bonito. Pero... t-tienes razón... ¡Esto es mi culpa!– dijo Izuku comenzando a llorar. Extrañaba a su mamá, tenía miedo y frío.
Katsuki lo miró con algo de superioridad, la cual se desvaneció cuando el pecoso se hizo bolita en el suelo, tratando de calmar su llanto.
Sentía su pecho contraerse al verlo así, no sabía por qué. El llanto cesó, y el pequeño Izuku se acomodó nuevamente de espaldas a la pared, abrazando sus piernitas y temblando levemente de frío.
Katsuki se le quedó viendo un rato más sin que el pecoso se diera cuenta. Se le acercó y se sentó a un lado de él. Se quitó su chamarra y se la colocó a Izuku.
–K-kacchan... ¿Qué-–.
–Te veías con frío... Y no debí ser tan duro contigo. Ya está, lo dije y no volveré a repetirlo–.
–Jeje... Gracias, Kacchan... –dijo Izuku abrazando al mencionado.
–S-sí sí como sea–.
Se quedaron así durante un rato, quedándose profundamente dormido; Izuku apoyado en el hombro de Katsuki, y este apoyado sobre la cabeza del pecoso, con su brazo alrededor de sus hombros.
A la mañana siguiente, Katsuki fue el primero en despertar. No supo cómo pasó, pero Izuku estaba usando sus piernas de almohada. Quería levantarse, pero no quería quitarlo por alguna razón, no quería despertarlo.
Pasaron unos minutos más y escuchó un ruido extraño proveniente de afuera. Despertó de inmediato al pecoso.
–Deku, Deku tienes que despertar–.
–Nng... Ka... Kacchan... ¿Qué sucede?–.
–Hay ruidos extraños, vienen de afuera–.
Izuku se alarmó. Se colocó detrás de Katsuki, quien sostenía un piedra que había encontrado por ahí para defenderse. Fueron acercándose poco a poco a la entrada de la cueva. Salieron, y lo que vieron les sorprendió.
–¡El lobo! ¡Es el lobo de ayer Kacchan!– decía Izuku emocionado.
Era un lobo de un extraño pelaje rubio ceniza y ojos profundos color carmín, pero no reflejaban miedo, sino protección. Se les acercó a los pequeños; los olfateo, dándoles cosquillas a ambos, y parecía querer guiarlos a cierto lugar.
–Creo que... quiere que lo sigamos– dijo Katsuki con algo de duda.
Comenzaron a seguir al lobo. Katsuki por una razón desconocida tomó la mano de Izuku, según él porque el pecoso era un tonto y podría perderse.
–¡Kacchan! ¡Ahí están las tiendas! ¡El lobo nos trajo de vuelta! ¡Gracias señor lo-! Ya no está...–.
–Tal vez regresó con su manada–.
–Bueno... ¡Vamos!–.
Ambos infantes corrieron al campamento, viendo a sus madres fuera de las tiendas. Estas al verlos salieron corriendo a abrazarlos.
–¡Nos tenían muy preocupadas! No vuelvan a alejarse tanto por favor– decía Inko en lágrimas, abrazando a su pequeño hijo.
–¡No te vuelvas a ir de esa manera mocoso!– dijo Mitsuki dándole un zape a Katsuki.
–¡No me pegues vieja bruja!–.
–¡¿A quién llamas vieja bruja mocoso?!–.
Izuku y su madre reían por lo bajo, era ya algo normal ver a los dos rubios pelear así.
Años después
–Oye Kacchan–.
–¿Qué?–.
–¿Tú recuerdas qué pasó con el lobo que vimos de pequeños?–.
–¿Qué lobo?–.
–¡El que nos ayudó cuando nos perdimos en el bosque! ¡¿No lo recuerdas?! ¡Se parecía a ti!–.
<¡¿Por qué todo lo relaciona con que me estoy burlando de él?!> –¿Lo recuerdas sí o no?–.
–¡Sí lo recuerdo nerd! ¡Y no sé y ni me interesa saberlo!–.
Y volvieron a comenzar otra de sus típicas peleas. ¿Desde cuándo comenzaron? Ni siquiera ellos lo recuerdan, solo saben que ha pasado mucho tiempo.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
¡Segundo día cumplido! :D
Esto se me ocurrió por una historia que había leído hace un tiempito (también KatsuDeku) pero no recuerdo el nombre, así que si alguien reconoce más o menos la historia déjeme el nombre en los comentarios y créditos a esa personita uwu
Tengo ya en mente unas ideas para el tema de mañana, así que... ¡AGÁRRENSE PORQUE SE VIENE FUERTE! 7u7 (bueno no estoy segura aún, pero agárrense aún así XD)
Y pos, nos vemos mañana con el siguiente tema que... solo les diré... Deku es semeeeeee 7u7
