Capítulo 2: Recuerdos

319 37 11
                                    

El sol ya se había ocultado entre las montañas, dando comienzo al baile más esperado por todos los habitantes de Cysgod

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

El sol ya se había ocultado entre las montañas, dando comienzo al baile más esperado por todos los habitantes de Cysgod.

Al llegar la familia real del reino de Inferno en su carruaje, los invitados no pudieron evitar voltear a mirar como el rey y la reina bajaban de este. Era de esperarse, después de todo, eran dueños del reino más grande, además de poseer uno de los ejércitos más fuertes y ser uno de los linajes con mayor fuerza mágica.

Charlie sabia de esto a la perfección, por eso no le gustaba mucho ir a los bailes. Las personas a su alrededor murmuraban mientras la veían. En su mente ya se estaba imaginando lo que decían, “mira, ahí va esa princesa torpe”, “Siempre se mete en problemas, no tiene lo suficiente para ser reina”, “es un milagro que la hayan invitado”. Ese tipo de comentarios eran el pan de cada día para Charlie. Con el tiempo dejaron de afectarle, pero parte de ella no podia evitar creer que tenían razón. Al darse cuenta de la dirección que estaban tomando sus pensamientos, movió su cabeza de un lado a otro para borrar aquello y poner una sonrisa en su rostro, rogando que esa noche acabara.

Bajo del carruaje acompañada por Vaggie para empezar a caminar en dirección a la puerta principal junto con sus padres.

—Charlie, no olvides comportarte esta noche—dijo Vaggie en un susurro mientras caminaba—. Se que no te gustan este tipo de celebraciones, créeme a mí tampoco, pero la reina últimamente ha estado algo exigente con mi manera de trabajar

—Tranquila, hoy están contentos, dudo mucho que su buen humor decaiga. Si te sirve de algo, te prometo que hoy me voy a comportar. No tengo ánimos para nada

Vaggie se sintió mal al ver los ojos apagados de su amiga. Últimamente las cosas no salían como ella quería, en especial con su interés amoroso Seviathan, del cual no había tenido noticias. A pesar de no ser de su agrado, el hacía feliz a Charlie por lo que se tragaba sus opiniones al respecto.

—Lamento sonar como maniática del control. Se que has estado mal estos días y lo último que quisieras es estar en un baile. Si lo deseas puedo decirles a tus padres que te sientes indispuesta, así podríamos irnos de nuevo a la mansión —Charlie le dedico una pequeña sonrisa en agradecimiento. Le alegraba saber que podía contar con su amiga

—Gracias Vaggie, pero no te preocupes, estaré bien. No quiero arruinar esta noche. Mira lo felices que estan mis padres—dijo mientras los señalaba con la cabeza, quienes iban mas adelante que ellas

—¿Segura?

—Muy segura

—Muy segura

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
La belleza de la oscuridad (Charlastor).Donde viven las historias. Descúbrelo ahora