5: En Llamas.

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Pov hugo

Observé detenidamente como ella volvía a vestirse. La magia había terminado, su espalda todavía desnuda era todo lo que ahora Anaju me dejaba ver. Yo me había cubierto solamente con mis calzoncillos y había regresado al sofá para poder admirarla . Sabía que en cuando terminara y sus ojos se encontraran con los míos de nuevo estos ya no serían llamas. Era el momento en el que ella diría que lo ocurrido había sido un error.

-    ¿No vas a vestirte? – preguntó cuando terminó.

-    Lo haré cuando te vallas. – confesé sabiendo que planeaba marcharse.

-    Hugo... - susurró clavando su mirada en el suelo.

-    Está bien. – me acerqué a ella cogiendo su mentón para obligarla a mirarme a los ojos. – no hace falta que digas nada. Lo entiendo.

Anaju sonrió melancólica agradeciéndome sin palabras que no la obligara a decir que lo ocurrido había sido un error y no iba a volver a repetirse.

-    Buenas noches. – su mano buscó la mía para alejarla de su rostro y así marcharse. No pude evitar apretar los dedos antes de qué se alejara.

-    Buenas noches. No pienses demasiado en lo ocurrido, tu misma dijiste que era inevitable. – hablé de nuevo acercando su cuerpo para besar su frente.

-    Sé que era inevitable, el problema es no saber si ha sido suficiente.

-    ¿Quieres saber mi opinión? – pregunté antes de decir cualquier cosa que pudiera empeorar las cosas. Ella asintió. – para mi no ha sido suficiente porque quiero repetirlo millones de veces.

Mi respuesta provocó que ella besara mi mejilla y se fuera sin dejarme saber si estaba de acuerdo con mis palabras.

***

Pov Anaju

A pesar de ser mi día libre, no pude evitar terminar yendo a la academia. Sentía que las cuatros paredes de mi habitación iban a terminar consumiéndome, mis demonios habían decidido despertar y no dejaban de atormentarme. Necesitaba escapar y la academia era el único lugar donde quería ir.

Pablo, el productor del programa se sorprendió al verme llegar.

-    Hugo y tu os estáis tomando demasiado en serio este proyecto. – su voz detuvo mis pasos que iban directos a la cafetera. Oír su nombre junto al mío siempre me paralizaba.

-    ¿Cómo? – pregunté sin entender.

-    Es vuestro día libre y aún así los dos estáis aquí.

-    ¿Hugo está aquí? – pregunté confundida. No había tenido noticias suyas desde que me marché anoche.

-    Si y al parecer a madrugado, ya estaba aquí cuando llegué.

Sin esperar más explicaciones rellené la taza con café y un chorrito de leche para posteriormente ir en busca de Hugo. No fue hasta que le encontré, esta vez en la sala del piano, que recordé que realmente no tenía nada que decir. Ninguna excusa para explicar porqué le estaba buscando.

Su mirada abandonó el ordenador cuando notó la presencia de alguien más en la sala. Sonrió mostrando todos sus dientes al verme.

-    Buenos días. – saludó cerrando el ordenador. – pensaba que hoy no vendrías.

-    Yo pensaba lo mismo. – confesé acercándome a él, terminando por sentarme en uno de los taburetes que rodeaban el piano. - ¿Qué haces?

-    Para ser sincero ni siquiera me he marchado. – confesó rascándose la cabeza, fue entonces cuando note que llevaba la misma ropa que ayer.

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⏰ Última actualización: Oct 06, 2020 ⏰

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Tus miedos y mis ganas || AnahugDonde viven las historias. Descúbrelo ahora