Capítulo 34

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Elena

Un suave roce en mis labios me despiertan y unos hermosos ojos azules me miran con mucho amor.

-Buenos días preciosa, ya casi es mediodía no quise despertarte antes porque se que no descansaste bien.

-Buenos días Christian, perdón por despertarte durante la noche. Ahora me siento mejor estando entre tus brazos.

-Tu sonrisa me demuestra que estas bien. Pero para que te sientas mejor no me quieres contar tu sueño.

Le hago un resumen de las pesadillas y que las tengo desde que mis padres me recriminaron por estar en pareja con él. Me escucha con mucha atención y siento que comprende porque me sentí tan mal este último tiempo.

-Elena quiero que entiendas algo muy importante. No me importa si tus padres no están de acuerdo porque yo te voy a amar siempre. Nadie lograra separarme de vos.

-Ellos siempre me manejaron e hicieron de mi vida lo que quisieron por eso sentí mucho temor cuando me dijeron que no me iban a permitir ser feliz.

-Ahora ya no estas sola, yo voy a estar contigo y no les voy a permitir que te hagan daño. El amor que nos une será más fuerte y así podremos hacerle frente juntos.

Christian

En un instante atrapa mi cuerpo con el suyo y me besa tan apasionadamente como nunca lo había hecho hasta ahora.

-Christian gracias a vos conocí que el amor es real, por eso voy a amarte por y para siempre.

Quiero amar cada parte de su cuerpo, deslizo los breteles de su camisón y dibujo un camino de besos de un hombro al otro, lentamente voy dejando su cuerpo al desnudo, lo recorro con mis manos mientras ella se incorpora quedando a horcajadas mío. La sorprendo cuando me levanto y nuestros cuerpos quedan juntos. La vuelvo a besar y desciendo por su cuello hasta sus pechos, ella inclina su cuerpo hacia atrás apoyando sus manos en mis piernas, eso me permite rozar con mis pulgares sus pezones, cuando introduzco uno en mi boca y lo chupo, ella gime. Deslizo una de mis manos por su vientre y rozo su sexo por encima de su braga, se mueve presionando sobre mi mano. Sin dejar de adorar sus pechos meto la mano en su braga, trazo círculos con el pulgar sobre su clítoris mientras con el índice entro y salgo de ella. Su respiración es entrecortada y su cuerpo se tensa hasta llegar al orgasmo con su cabeza hacia atrás. La ayudo a recostarse en la cama y me coloco un condón, le saco la braga y me sitúo sobre ella.

-Te amo Elena, voy a ir despacio porque quiero disfrutar de este gran momento.

Extiende su mano para tomar mi pene e introducirlo en su vagina, me empiezo a mover lentamente, entro y salgo deleitándome de su terso interior. Nuestros cuerpos se unen en una danza sensual, tanto que siento como si fuéramos uno solo. Elena se aferra a mis brazos para que yo acelere mis movimientos, lo hago y sin darme cuenta los dos llegamos al orgasmo. Salgo de ella, me saco el condón, la acerco a mí para rodearla con mis brazos, acaricio su espalda mientras nos vamos relajando. Nos quedamos tranquilos un largo rato.

-Amor que te parece si nos levantamos para almorzar, se que no te estuviste alimentando bien y eso no me gusta.

-Lo se Christian, me sentía tan mal que no tenia ganas de comer. Pero hoy estoy hambrienta, si quieres puedes ducharte mientras le pido a Elsa que nos prepare la comida.

-Me alegra que te sientas mejor. Dale porque yo también tengo hambre.

Elena

Beso sus labios, me cambio y voy en busca de Elsa para pedirle que prepare la comida. Hoy me siento mucho mejor y se que junto a Christian nadie me va a lastimar.

-Buenos días Elsa, podría prepararnos el almuerzo y servirlo en el parque el día esta lindo.

-Buenos días señora, ya lo preparo.

Christian ya se ducho y nos sentamos a comer cuando Elsa sirve la mesa. Charlamos de todo y nos divertimos mucho, pero estoy pensando también quién pudo haber puesto a esa mujer en la oficina de Christian.

-Christian estaba pensando que tendríamos que averiguar quien llevo a esa mujer a la oficina.

-Mañana cuando volvamos voy a empezar a investigar. Desde que llegue nunca la había visto dentro de la empresa.

-Sabes temo que mis padres estén detrás de todo esto.

-Los crees capaces de hacer algo tan desagradable.

-Son más que capaces de hacer cualquier cosa que los beneficie. Piensan que si estoy con alguien ellos no seguirán recibiendo su dinero para mantener su estilo de vida.

-Pronto sabremos quién estuvo detrás de todo. Ahora no pensemos en eso y disfrutemos de este hermoso día.

Elena pudo contarle sobre sus temores y Christian le prometió cuidarla. ¿Podrán averiguar quién fue él o los responsables de lo sucedido? ¿Festejarán el cumpleaños de Christian sin problemas?

Dos corazones cambiando su destinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora