11.Chocolate

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Sakura Card Captor no me pertenece, es propiedad de las Reinas del Hiatus y el sufrimiento ajeno alias las CLAMP, yo solo tomo prestado a los personajes para fines de esta historia.

Fictober 2020

11. Chocolate.

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El mundo es un fastidio constante lleno de personas insensatas en su interacción con la existencia. Al menos ese es el pensamiento de Li Syaoran en los días en los que la suerte no le sonríe, específicamente cuando los días malos se llenan de nubes grises gracias a asuntos familiares sin resolver que lo involucran directamente a él.

Después de otra discusión telefónica con su madre un par de horas atrás, se siente prácticamente invisible deambulando por las calles de la ciudad rumbo al lugar fijo que se ha convertido en su pequeño refugio durante su estadía en Tokio. A pesar del gentío que viene y va, nadie es capaz de reparar en los conflictos internos con los que carga, ni una sola persona entiende su visión del mundo.

A pesar de no haber visto el rostro de su madre tras el teléfono, puede darse una idea de su expresión inflexible por el tono de voz gélido y determinante con el que le ha dejado en claro su postura sobre los asuntos tratados. A Yelan Li la precede su fama como líder de su clan, el mismo al que Syaoran pertenece por derecho de nacimiento.

Fijando la etérea expresión de su madre en mente, Syaoran apresura el paso hacia su lugar seguro a un par de cuadras de su no tan modesta oficina. Quizá su secretaria ignore el hecho de que no se encuentra revisando los nuevos contratos para los proyectos del mes próximo.

Recorre una manzana tras otra sin detenerse al cruzar las calles, dejando un leve estallido de cláxones de autos y un par de palabras altisonantes de personas que estuvieron a nada de atropellarlo en su carrera.

Syaoran no reduce la velocidad a pesar de eso, al menos no lo hace hasta que llega a su destino. Se detiene justo en la pintoresca entrada del lugar y se agacha para tomar aire con los ojos escocidos por el sudor. Permanece así durante un par de minutos, eliminando su agitación y llenándose de valor para hacer lo que tiene en mente.

"Tienes que hacerlo Syaoran" piensa mientras enfoca la mirada a la entrada de la pequeña cafetería, y con la decisión tomada se incorpora con renovada actitud para ingresar al local.

— ¡Bienvenido a Cherry Sweet! —Sakura recibe a Syaoran con entusiasmo pensando que se trata de un comensal, pero se da cuenta después de unos segundos que se trata de él—. ¿Syaoran? —Se extraña evidentemente al verlo en el local a esa hora en particular, sabiendo que no es hasta el final de su turno cuando Li va por ella para acompañarla a casa.

A diferencia de cualquier otro día, Sakura nota algo diferente en Syaoran tanto en su semblante como en su postura y esto le advierte que algo está ocurriendo. Una pequeña alarma se enciende en la mente de la chica y sabe que ese día es uno de "esos días", por suerte ella mejor que nadie tiene idea de cómo lidiar con esta situación.

—Por favor, siéntate por aquí —Ella lo guía tomándolo del brazo para halarlo hacia una de las mesas vacías, Sakura agradece internamente la ausencia de clientela en el café—. ¿Estás bien?

Syaoran la mira a través de los mechones que cubren su rostro y nota los ojos dulces de Sakura descansando sobre él con preocupación.

—Hablé con mi madre hoy. —dice Li, quien parece como si su mente estuviera a miles de kilómetros de distancia.

FICTOBER 2020Donde viven las historias. Descúbrelo ahora