4: again.

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jisung se sentía molesto, jaemin lo había evitado toda la noche (de hecho siempre lo hacía) pero esta vez era diferente, jisung sentía que era como si le estuviera ocultándole algo. Estaba en casa con donghyuck pues los demás se habían ido a comprar la cena, el moreno estaba tan concentrado en terminar esa montaña de cartas que no se dió cuenta cuando jisung entró a la habitación de su hermano y revisando en los cajones logró ver un pequeño gorrito de papel que tenía el nombre de renjun escrito y un corazón al lado. soltó el objeto como si
este quemará y retrocedió con demasiadas preguntas en la cabeza.

el sonido de las llaves y las pisadas lo alertaron, quiso moverse pero había quedado estático.
jaemin lo había hecho otra vez,
había hecho lo que siempre hacía cuando
jisung encontraba algo que le gustara.

—oh, jisung, ¿qué haces en mi habitación?
—ese tono burlón habló detrás de él, jisung no
podía verlo pero sabía que estaba riéndose de él, podía sentir esa sonrisa cínica.

el menor volteó en sus talones y con los puños cerrados por la furia, le tiró el gorro de papel
al pecho totalmente enfurecido. era ridículo pero para jaemin y jisung cualquier cosa podía ser letal en esa relación de odio-amor que tenían.

—¡te odio, siempre robas todo de mi!
¡si-siempre eres tú! —lo empujó haciéndolo chocar contra la puerta por la cual recién había entrado su hermano, jaemin lo empujó devuelta haciendo que jisung golpeara su hombro contra la puerta.

era estupido que pelearán por esto pero a este punto
¿por qué no habían peleado jaemin y jisung ya?

el castaño salió de esta y corrió al patio ignorando los gritos de donghyuck exigiéndole que venga a casa. sorbe su nariz y siente varias lagrimas caer.
todo el mundo estaba en su contra, no tenía amigos
y los que tenia eran gracias a su hermano; se sentía...inútil e incapaz de hacer algo.

sentía que no podría hacer nada por sus
propios méritos, sentía que jaemin siempre
le quitaría las ganas de hacer algo por su cuenta
pues su hermano era bueno en todo aunque hiciera algo por primera vez; todo le salía perfecto y todos lo amaban.

¿por qué? ¿por qué tenía que ser siempre jaemin?
¿por qué no podía ser jisung así? ¿por qué nunca obtenía lo que quería? ¿por qué nunca podría ser la mitad de lo que era jaemin? ¿por qué? justo cuando sentía que había ganado algo jaemin siempre llegaba a su vida a arrebatarle cruelmente todo lo que obtenía.

sabia que siempre huía de casa pero dentro de si
sentía que no tenía a donde ir, sentía que no pertenecía.

—jisung, no estes triste, el cielo se pondrá triste también. —la vocecita de renjun lo asustó pero lo alivió a la vez, cuando lo divisó entre el bosque corrió a atraparlo entre sus brazos y lo apretó fuerte contra su cuerpo y escondió su cabeza en el hueco de su cuello.

—re-renjun..

el más bajito acarició su espalda y
besó su cabeza sintiendo la ira e impotencia desaparecer por completo del más alto.

—por favor quédate conmigo, no quiero tener que buscarte como loco por todas partes, po-por favor
quédate en mi casa. ¡pu-puedes dormir conmigo!
hay mucho espacio pero por favor no te vayas.

jisung estuvo a un segundo de arrodillarse frente
al chico de cabellos rosas, pero este no lo dejó, lo tomó de las manos y hizo que se enderezara.
llevó una mano a su mejilla, el menor llevó su propia
mano a la de renjun y la tocó avergonzado.

—Iré contigo, jisung, pero tienes
que prometerme algo.

Los ojos de jisung brillaron con esperanza
y emoción, asintió cuidadosamente y espero
a que renjun hablara.

renjun acercó su rostro peligrosamente
al suyo que sus ojos se entrecerraron sin querer,
se llevó una gran decepción cuando lo vió tomar rumbo a su oreja pero aún así trató de prestarle atención al ser frente a él.

lo que renjun le susurró lo desconcertó y asustó
pero aún así todavía faltaba mucho tiempo para eso así que aceptó y le prometió que lo esperaría con la ventana abierta.

renjun río bajito ante eso y besó su mejilla
mirándolo con adoración.

–eres el humano más adorable que he conocido, algún día todos verán lo que yo he visto en ti, jisung.
—susurró con un hilo de voz, llevó su dedo al pecho de jisung picándole suavemente el corazón haciéndolo brillar.

renjun se despidió de él ya que se estaba haciendo tarde y le pidió por favor que se cuidara en el camino a casa. jisung asintió dejando a su cabello castaño rebotar, cosa que hizo reír nuevamente a renjun quien estaba despidiéndolo con una mano al aire mientras lo veía irse lejos.

—estos adolescentes de hoy en día, ¿qué tienen todos por huir de casa? —pregunta mark limpiando la mesa, jeno se queja pues está ocupando la computadora donde el canadiense quiere limpiar
—muévete jeno o la limpias tú.

jeno rodó los ojos pero desconectó la computadora
y camino lejos de mark, lanzándose al mueble donde se sentaba cómodamente hyuck con el aparato en su regazo.—ahora entiendo por qué jisung huye, eres un grano en el culo.

haechan se comenzó a reír dejando su teléfono
de lado, golpeó el hombro de jeno mientras reía
y jeno le dio esa típica eye smile.

mark iba a contestar pero vio a jisung entrar con una sonrisa, le dedicó una mirada intrigada pero después suspiró, encogió los hombros y siguió limpiando la mesa. jisung camino hasta la cocina, abrió el refrigerador y tomó el jugo de manzana que estaba ahí; se detuvo a tomarlo tranquilamente hasta que volteó y vio tres cabezas observándolo fijamente.

—¿qué?—habló con un tono fastidiado, jeno silbó regresando su vista al computador y haechan sonrió burlón.

—suerte lidiando con eso mark.

mark le dedico una mirada tan fuerte que hyuck sintió que estaba por quemar la coronilla de su cabeza.

—verás jisung, yo-

jaemin caminó hacia la cocina con un aura tan pesada que cualquiera podría sentirse pequeño parado a su lado, jisung volteó su rostro no queriendo darle la cara a su hermano y siguió tomando su jugo. jaemin abrió el refrigerador, tomó una manzana y cuando iba a regresar a su habitación golpeó el hombro de jisung "accidentalmente".

—ten más cuidado.—jisung murmuró, dirigiendo su mirada al piso dejando su enorme flequillo caer en su frente.

—no te vi.—jaemin hablo fuerte pero sin gritar, le dio una mordida algo ruda a su manzana y entró a su cuarto cerrándola detrás de si.

los tres quedaron en silencio mirando a jisung, el menor se encogió de hombros y entró también a su cuarto compartido con chenle.

—Mierda, están volviendo a pelear.—murmuró mark pasando sus manos por su frente cansado, jeno sintió un poco de pena por mark pues cada problema en esta casa también le afectaba a él.

—bueno, eso te pasa por ser un grano en el culo.

—¡oh come on! ya no da gracia.






ahhh, perdón si da algo de cringe esto.😞
¡disfruten de los mama!💚💚

mystic : renjun haremDonde viven las historias. Descúbrelo ahora