Capitulo 30. Solo tú y yo

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Advertencia: lemon ( ya les había dicho el el capitulo pasado pero aún así pongo la advertencia)

Ambos se dirigieron a la habitación que solía ser la de tu ahora esposo, la cual a partir de hoy sería la de ambos, una vez entraron no perdieron tiempo y comenzaron con su tan ansiosa noche de bodas Kyōjuro te llenaba de besos mientras te quitaba el shiromoku,claro que tú no te que dabas atrás ya que al igual que el le empezaste a quitar su vestimenta (perdón no se cómo se llama la vestimenta tradicional de las bodas que usan los hombres)  una vez que los dos se encontraban solo en ropa interior Kyōjuro comenzó a recorrer tu cuerpo con sus dedos desde tus piernas hasta tu pecho, el simple tacto de el te hacía estremecer mientras tú acariciaba su bien formado y trabajado abdomen deteniéndose donde tenía la cicatriz de su pelea dónde casi lo pierdes, de ahí pasaste a la que tenía en su ojo la cual acariciabas con mucho cariño, el se percató de lo que probablemente estabas pensando así que tomo tú mano y deposito un beso en ella para luego darte uno muy dulce y apasionado en los labios el cual no dudaste en corresponder una vez se separaron el hablo para intentar tranquilizarte.

Kyōjuro: no deberías de pensar en cosas del pasado no me gusta verte triste.

T/n: es que aún no puedo creer que estemos así hoy ya que casi te pierdo aquella noche en el tren.

Kyōjuro: pero no fue así y todo gracias a ti y Chuuya.

T/n: yo no hice gran cosa.

Kyōjuro: en eso te equivocas hiciste más que yo y por tu esfuerzo y el de los demás es que estamos aquí hoy los dos juntos.

T/n: tienes razón....te amo Kyōjuro.

Kyōjuro: y yo a ti T/n.

Dicho eso se volvieron a besar un beso lleno de amor y pasión, Kyōjuro bajo los besos a tu cuello dejando una que otra mordida a lo cual tu soltavas jadeos que hacían editar más al joven de mechas rojas, así que con cuidado retiró tu sostén dejandote solo con tus bragas él comenzó a masajear tus pechos a lo cual comenzaste a soltar pequeños gemidos con cuidado Kyōjuro comenzó a bajar una de sus manos hasta llegar a tu zona íntima y comenzó a masajear sobre la tela tu al sentir su tacto en aquella dona no pudiste reprimir un fuerte gemido el cual le gustó mucho a tu pareja.

Kyōjuro: veo que estás impaciente, pero tenemos toda la noche para nosotros así que solo disfruta.

T/n: ya me las pagarás.

Cuando dijiste eso último Kyōjuro retiró tus bragas y levanto una de tus piernas y empezó a repartir besos en esta mientras se iba acercando a tu intimidad claro que mordió tu muslo dejando una marca por lo cual tu soltaste un gemido de dolor pero de inmediato fue remplazado por un suspiro al sentir la lengua de tu esposo entrar en tu intimidad, el al escuchar tus suspiros y gemidos siguió con su trabajo mientras tú solo podías tomar y jalar levemente su cabello pero de repente se detuvo a lo que soltaste un gemido de reproche, eso no paso desapercibido por él.

Kyōjuro: no me veas así ya viene lo mejor — sonrió —

T/n: pero no es justo que solo tú te diviertas sabes.

Kyōjuro: que quie...

No lo dejaste terminar ya que le diste un beso y te pusiste sobre él y bajaste una de tus manos hasta donde se encontraba su erección, Kyōjuro al sentir tu tacto en su entrepierna soltó un gruñido, así que rápidamente le retiraste su ropa interior y comensaste a masturbar su gran miembro mientras el solo podía soltar gruñidos, grande fue la sorpresa de tu esposo cuando te agachaste y comensaste a lamer su miembro para después introducir lo en tu boca comenzando a  hacerle un oral él cegado por la lujuria te tomo del cabello para embestir tu boca,paso un tiempo así asta que Kyōjuro se corrió en tu boca tu trataste de tragar lo más que podías su semen pero aún así un poco de este escurría por la comisura de tu boca, el al ver eso se disculpo y limpio tu cara.

kyōjuro Rengoku x tuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora