Tu Propiedad

Capitulo 9: Scheiß

Mierda

Shit

Scheiß

Merde

Merda

¿Recuerdan cuando dije que tenía — o quería— mantenerme alejada de este boxead
Puedo decir con amplia sinceridad que soy una mujer sin palabra, la verdad es que no había podido hacer lo prometido como yo había querido, si, aun que definitivamente me había mantenido fuera de idas a restaurantes, ni tampoco habíamos compartido tiempo juntos a solas, pero si habíamos estado juntos en muchas ocasiones, junto con todo el equipo, pero lo había visto muchas veces los últimos días y el se había encargado se enviarme mensajes todos los días

Y como yo no era una grosera, mis padres no me criaron de esa forma, no pude dejar en visto sus mensajes y tuve que responderme, contando eso, podría decir que hablamos todos los días, cada tanta tenía un mensaje de el

Había descubierto que era muy juguetón con su usual sucia forma de hablar, a veces me avergonzaba en medio de una reunión por decirme cosas indecentes

Dedo he de confesar que me deje llevar, de nuevo

Pero es era tan lindo conmigo, me hacia sentir muy especial, me respetaba, sin contar sus comentarios pervertidos, se preocupaba por mí, me enviaba comida o flores

Perooooooooo...

Por otro lado, no quería estar cerca de este hombre y dejar que mis emociones siguieran controlando mi juicio, había pasado por mucho, me había esforzado para mantener una solida salud emocional, pero parece que no puedo controlar lo que comienzo a sentir por él, el boxeador, el sexy gatito: Ares Voltov

Que me caiga un rayo si el maldito no es condenadamente sexy, al momento que lo conocí sentí una especie de energía traerme hacia él, pero yo sabía que solo nos conocíamos por trabajo

No podía ser una mujer sin profesionalismo, menos para una empresa que pertenece a mi familia, si hago algo mal no van solo a despedirme, harán que arregle toda la mierda que resulte

Un patrocinio, aquí o en China, es cosa seria para una multinacional y yo era plenamente consciente de ello

Pero a pesar de que todas las alarmas en mi cabeza que gritaban:

¡PELIGRO!

ALEJATE!

¡CORRE ESTUPIDA!

Mi cuerpo solo quería quedarse al lado del boxeador a esperar a que me diera una mirada, una caricia, tal vez una sonrisa, un...beso

Arggh!

Todo era culpa del boxeador

¿Por qué tenia que tratarme así? No soy una niña para no notarlo, o solo eran mis estúpidos sentimientos los que me hacían ver cosas

Pero el siempre era un tempano de hielo, nunca mostraba nada, pero cuando me miraba, me hacía sentir como que yo era la poseedora de una llave mágica que abría sus sentimientos

Era tan atento conmigo, incluso podía llegar a verse dulce, cosa que nunca había visto que el haga con otras personas

Y eso es, precisamente, lo que me hace pensar que tal vez el pueda sentir algo también, pero, honestamente no estoy segura si quiero averiguarlo

Nunca había mezclado el trabajo con los sentimientos, eso es lo opuesto a ser una persona profesional y me gustaba pensar que soy una persona muy profesional

Pero viéndolo ahora, embobada desde las bancas mientras Ares entrenada, era...

Simplemente fantástico, quería tomarle fotos para tener el recuerdo de su cuerpo moviéndose, dando golpes a diestra y siniestra, su musculo trapecio y los dorsales moviéndose te hacían darte una idea de la fuerza de sus golpeas

Era impresionante ver a una persona estar en su zona de especialización, mas cuando puede ser un espectáculo tan visual como el boxeo, el era muy rápido, sus golpes se veían con mucha precisión

Douglas, el doctor del boxeador estaba sentado a mi lado, había llegado unos días atrás y era muy serio, parece que era un amigo cercano a Ares, ya que lo había visto muchas veces hablar con él mientras mantenía una postura relajada, el se había integrado a la gira hace unos 3 días

Junto a el llego Nathaniel, el fisioterapeuta

— Es impresionante, ¿no? El próximo campeón de peso mediano — La voz de Riley me saco de mis pensamientos

Su cuerpo se sentó a mi lado, ahora me encontraba entre Douglas y el, el medico anotaba algunas cosas en una tabla y junto a sus lentes examinaba al boxeador a cada minuto

Por otro lado, yo estaba mirándolo, apuntando descripciones que el formato me pedía, en cambio Riley lucia una sonrisa relajada

Se veía bastante relajado mirando al Boxeador, ya que estábamos en una sala privada gigantesca del Gimnasio solo nos encontrábamos el equipo de Ares y unas cuantas personas del mío, todos tenían su atención en Ares

Estudiándolo, hoy era su primera pelea de entrenamiento de la temporada, aquí todos veríamos como venia el lindo gatito para esta nueva liga, para el y esta nueva temporada

Esta competencia era competencia internacional muy importante que se realizaba todos los años, su duración era de aproximadamente 6 meses, pero al parecer el boxeador había comenzado a entrenar desde...siempre

— ¿No crees, A? — Insistió Riley

Había tomado el atrevimiento de decirme A, pero no le había dicho nada ya que el era bastante agradable y hacia que mi trabajo fuera más fácil cuando el podía

— Es bastante impresionante verlo en su elemento — Reconocí sin dejar de mirar al espécimen frente a mi

— Creo que Stavropoulos lo está haciendo bien, se ve mas rápido que de costumbre — Murmuro Douglas a nuestro lado

Mi cabeza se giró con asombrosa rapidez hacia el doc., Riley solo rio por lo bajo al ver mi cara de desconcierto

— ¿Qué? ¿Qué es eso?

— ¿Qué cosa? ¿Stavropoulos? — Me dio una mirada rápida, su mueca divertida solo me desconcertó mas

— Si

— Es su apellido, ¿Qué no leíste su expediente? — La ceja del doc. se alzó con chulería

— Si, pero solo aparecía Voltov como su apellido

— Ya veo — Murmuro dejando de mirarme

Alce una ceja al ver que el no me daría más información, bueno, pensándolo bien, Voltov no me parecía muy griego tampoco

Pero entonces ¿Voltov era solo su nombre artístico o algo así?

Qué raro

Decidí no darle vueltas al asunto que no me concernían, me preparé para seguir tomando nota del boxeador, pero mi teléfono comenzó a sonar llamando la atención de todos los presentes

— ¡Apaguen ese puto teléfono!

El grito del entrenador me sobresalto, el giro la cabeza mirando al responsable del sonido y al toparse conmigo, dándose cuanta que yo era la causante su semblante dejo esa mascara de enojo y palideció un poco

Si, la persona que puede darte un contrato millonario es la causante del ruido, Entrenador

— Oh, Señorita Woods, disculpe

— Fue mi culpa, lo siento

Le dije mientras me paraba y salía por la puerta para poder contestar la bendita llamada, al parecer todo volvió a la normalidad allá adentro antes de que incluso saliera

Mire mi teléfono para ver quien estaba llamándome: Sunset, alias Ankel

— ¿Qué? — Conteste

— Hermanita, ¿Es así como saludas a tu compañero de útero que tanto te extraña?

Una risa salió de mi sin poder evitarlo

— Hola hermanito, yo también te extraño

— ¿Qué estas haciendo? Yo acabo de salir de la oficina, voy de camino a una comida que Alaric me organizo con una compañía de seguros

— ¿Asurex?

— Si, esa misma

— Si, la recuerdo, Alaric me presento con la representante en una cena coctel que tuvimos hace un año

— ¿Representante? ¿Es un ella? Interesante

— No empieces, y respondiendo tu pregunta estoy en el entrenamiento del boxeador, traje a un pequeño equipo para hacer las primeras pruebas

— ¿Y como lo ves? ¿Tiene potencial?

— Pues sabes que no soy una profesional en la materia, pero parece ser una persona bastante centrada en lo suyo, tiene gente trabajando para el por todas partes, personal para todo, se cuida mucho y entrena como un toro, creo que todo va bien hasta ahora

— Me alegra escuchar eso, estoy planeando una escapada para verte en unas semanas

— ¿En serio? ¡Eso sería genial! Te extraño mucho, odio estar lejos de todos ustedes

— Nosotros también te extrañamos, vamos a turnarnos para ir a verte o tal vez te secuestre y te traiga a casa por unas horas

Seguí hablando con mi hermano por unos minutos mas

Hasta que escuche ruidos a mis espaldas, al girarme Ares venia con sus gigantescos audífonos negros puestos mirando sus manos, mismas a las que les estaba quitando unas vendas

— Enana, escúchame, ten mucho cuidado allá, se que tienes seguridad, pero no estamos para protegerte, se cuidadosa, haz rápido ese trabajo y regresa a casa, ¿Oíste?

Rodé los ojos al escuchar el tono demandante de i querido hermano mayor por 37 minutos

— Si, ya te dije que si

— Tengo que irme, acabo de llegar al restaurante en el que me encontrare tendré la reunión

— ¿Fuiste a Six Seven? — Mencione el restaurante en Alaskan Way que tenía mi nombre como propietaria

— SIP, te amo, cuídate

— Adiós, cariño

Me despedí imaginando a Ankel entrando en el restáurate como si fuera el propietario, aun que bien sabe el personal que mi familia debe ser tratada aun mejor que se trata a las personas normalmente

Al colgar y encontrarme con una foto de mis hermanos junto a mi en la piscina de la casa, yo me encontraba en el centro en los hombros de Adam mientras todos reíamos y nos lanzábamos agua

Sonreí sin poder evitarlo al recordar ese grandioso día en familia

— ¿Con quién mierda hablas, Bunny?

El aliento caliente del boxeador golpeo mi oreja izquierda y parte de mi cuello poniéndome la piel de gallina, gire un poco mi cabeza para poder verlo con el ceño fruncido mirando la pantalla de mi teléfono

Al instante lo bloquee para que no viera nada y sus ojos se movieron por todo mi rostro hasta que nuestras miradas hicieron contacto

— ¿Ya terminaste, boxeador?

Dije dándome cuenta de que aún era temprano, el suspiro sin dejarme ver seguía inspeccionado todas mis facciones con su usual cara seria

— No, voy a por unas malditas cosas que deje en la camioneta, tengo mi protector bucal y el casco allá

— ¡Ah! Ya veo, vale

— Vamos

Sin previo aviso tomo mi mano y mi jalo junto a el hacia la salida del gimnasio y por el estacionamiento hacia su camioneta

Quito los seguros y comenzó a buscar en una gran maleta negra que tenía en los asientos trasero, me recargue en la puerta mirando de reojo su trasero

Y que trasero

Hecho un vistazo a los vidrios polarizados hacia los asientos delanteros y una tela conocida llamo mi atención

No, no puede ser

Fruncí el ceño antes de acercarme para poder ver mejor si eso era lo que yo estaba pensando que era

Me acerque al vidrio y junta mis manos alrededor de mis ojos para poder ver mejor y, efectivamente, era la chaqueta que había utilizado el día que salimos

Hace ya más de una semana

Y el nunca había mencionado que lo había olvidado

¿Sera que lo estoy confundiendo?

¿Eso quiere decir que subió a su camioneta a otra mujer?

¿El esta viendo a otras mujeres?

— Ares...

Murmure sin quitarle la vista a la chaqueta, estoy segura de que yo tenía una parecida a esa

— ¿Qué pasa, sladkaya?

Otra vez ese apodo, me irrita que me diga así y toda había comenzado por un mensaje que envió hace unos días donde comenzó a llamarme así, el problema era que fue un audio y no he podido traducir que significa

— ¿Esa es mi chaqueta?

Ignore por esta vez su tonto apodo y señale la ventana frente a mi mirándolo mal, Ares alzo las cejas acercándose

Su mejilla quedo a unos centímetros de mis labios, su perfume almizclado y varonil inundo mis fosas nasales

Ares me dio una mirada después de que vio a lo que me refería, se alejó agarrando por lo que habíamos ido y cerró la puerta con la mano que tenia libre

— Supongo

Se encogió de hombros girándose hacia el gimnasio, mis labios se abrieron en indignación

— ¿Adonde vas? — Le dije mirando su espalda alejarse unos pasos

— A darles un pequeño espectáculo a tu equipo, vamos Bunny, mueve tu lindo trasero hacia aquí

Rodé los ojos cruzando mis brazos y plantándome en el mismo lugar en el que estaba parada

— Devuélveme mi suéter, Cleptómano

Ares me regalo una perezosa sonrisa de lado, eso solo hacia ver desinteresado y divertido

— No, hasta que vayamos a comer de nuevo

— Ya te dije que no puedo, estoy muy ocupada

— Cuando tengas tiempo iremos, soy un hombre paciente, al igual que tu linda chaqueta

— Eres tan inmaduro — Lo fulmine con la mirad admirando como se acercaba dando lentas y largas zancadas

— Vamos Bunny, no hagamos esperar al publico — Tomo mi mano, al igual de como llegamos y me arrastro por el estacionamiento y el gimnasio hasta llegar a la puerta de la sala donde todo el mundo se encontraba

Ares se notaba bastante emocionado por mostrar sus habilidades en esta pelea de calentamiento, parece que al ser la primera es la que marcaba la pauta para esta nueva liga

Nos hizo parar frente a la puerta y sin soltar mi mano me acerco a el mirándome fijamente a los ojos

— Deséame suerte, Bunny

— No la necesitas Ares, eres bastante bueno en esto — Le dije soltándolo y girándome para entrar de una ve a la sala, pero la mano del boxeador intercepto mi camino hasta el pomo de la puerta, lo sentí acercarse a mi espalda y colocar ambas manos a mis lados, me tenia rodeada

— Por favor, sladkaya, deséame suerte

Su tono era muy bajo, como un acaricia hecha a mi oído, cerré los ojos al sentirlo tan cerca, sentí una cálida sensación en mi pecho y una palpitante en mis bragas

Supure mirando hacia la puerta, temiendo que alguien nos encontrara en tan comprometedora posición

— Suerte, Ares

— Gracias, ahora vamos a patear el jodido trasero de ese sujeto

Abrí la puerta sintiendo que el se alejaba de mí, busqué un lugar para sentarme y encontré una banca cerca del ring

Fui hacia allá, una persona del pequeño equipo que he había traído me acerco las cosas que había dejado al contestar el teléfono, encendí la Tablet para comenzar con un nuevo formulario

Sentí a un gran cuerpo sentarse a mi lado, al mirar de reojo me encontré con la cara malhumorada del entrenador, me había dado cuenta de que el no era una mala persona, pero si era bastante exigente con el boxeador

— Solemos decir que el golpe comienza en el pie y termina en el nudillo, esa fue la primera lección que le enseñe a griego

Su voz me tomo por sorpresa, no pensé que el seria d ellos que quisieran hablar conmigo, parecía que yo no le agradaba mucho o eso había notado estos días

— Parece que le enseño bien, en ese caso

— Me gusta creer eso

Minutos después, el silencio reino en nosotros, entonces la pelea comenzó y me sorprendió mucho ver en tan buena forma al boxeador

Como había dicho antes, simplemente impresionante

¿Que voy hacer contigo, boxeador?