Se reencuentran después de casi noventa años, en medio de un campo de guerra.
Una Vulturi, un Hale, y un Cullen, ¿Qué pasará cuando estos tres se vean?
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—Alice, ya deja de torturar al padre de Bella— exclamó Nat.
—Me alegra que al menos a alguien le preocupe— secundó Charly.
—Todo va perfecto con los preparativos, y no voy a arriesgarme a qué algo desentone solo porque Charly quiere ir con mezclilla— la duende fingió estremecerse ante la idea.
—Gracias por decirlo, tal vez considere llevar mezclilla para mí vestimenta de dama— bromeó la pelirroja a la par que seguía su turno en el juego de cartas que estaba teniendo con Bella y Edward.
—No te atreverías— amenazó Alice entornando los ojos.
—¿Quieres apostar?— le reto la Vulturi mientras le dirigía una mirada divertida a la pixie.
Edward interrumpió antes de que su hermana pudiera si quiera responder a la oferta.
—No— habló Edward mirando a Alice— Te lo aseguro esta es una que no ganarás— advirtió el cobrizo.
—¿Ustedes apuestan seguido?— cuestionó el jefe de policía mirando a los Cullen.
—Es habitual, sobre todo entre Emmett y Jasper— respondió Bella.
—Edward yo jamás he perdido una de sus apuestas y estoy segura de que está no es la excepción— contradijo Alice con su armoniosa voz.
—Oh, créeme esta será la excepción— anticipó Edward conociendo perfectamente la extravagancia e impulsividad de Nataly.
—Vamos Alice, no dejes que este tonto te espante— provocó Nat.
—Hecho— aceptó la vidente con su triunfal sonrisa.
—Yo te lo advertí— habló Edward alzando los brazos— No hay forma de que puedas sorprender a este mounstrito, es la mejor en lo que hace—
—Awwww que ternura— se burló Nat— Que bueno que tomé nota desde que dijiste que era la excepción— comentó Nat alzando su teléfono, que se encontraba grabando— Lo usaré como mi tono de notificaciones.
—No lo harás— exclamó Edward.
—Pruebame— se mofó Nat mientras se incorporaba.
Los dos pelirrojos comenzaron a corretearse por toda la habitación, pues Edward se esforzaba por quitarle el teléfono a la pelirroja.
—Nunca los había visto así— habló Charlie viendo cómo su futuro yerno y la Vulturi jugaban.
—Nat une a la familia más de lo normal— respondió Alice.
—¿Por qué ella no vive con ustedes?— cuestionó el mayor de los Swan.
—Estoy en un programa de aprendizaje acelerado— explicó Nat rápidamente.
—Nat fue la primera de nosotros, ella está más familiarizada con Alaska y nuestras primas— dijo Alice sabiendo que la explicación funcionaría con Charly.
