Capítulo 29

128 10 2
                                    

- Ella no me odiaba... - Las lagrimas se deslizaban por mis mejillas hasta caer al suelo. - Me esta protegiendo todo este tiempo... - Deposité la carta que tenía en manos en mi regazo mientras mis sollozos llenaban la casa vacía.

Encontré el papel doblado entre las cosas que Sasuke había guardado en una caja debajo de la cama, no entiendo como pudo ocultarme algo así, mi madre me había dejado un legado y Sasuke me lo quitó.

"Cassy, lamento mucho haberte dejado, me arrepentí el instante después de haber visto como mi madre te llevaba con ella, sin embargo tu padre no me permitió volver por ti amenazando constantemente con romper tu sello dejándote morir. 

Tuve que ganar la confianza de Hiruki, una vez nuestra conexión se acabó al yo transformarme una persona de ese mundo, él dejó de ser quien había sido conmigo, lo sentía distante, frío, amenazante y debo admitir que muchas veces le tuve miedo por la ira que podía sentir en su corazón. Al mismo tiempo, lo que yo creí que era amor por él, se desvaneció como si nunca hubiese existido, no podía siquiera recordar como se sentía quererlo. 

Me uní al grupo junto a Hiruki cuando escuché lo de Sasuke y que había llegado justo hasta a ti, me sorprendió ver que tú podías crear una conexión siendo alguien que no pertenece a ningún mundo en concreto, sabía que Hiruki no dudaría en matarte si eso era lo que le pedían, peor yo no lo iba a permitir.

El plan no salió como lo imaginé, pero al menos estas viva, y pasaste al otro mundo aunque sin mi, sé que eres fuerte Cassy y podrás luchar contra tu poder, no dejes que te venza y gana."

- La encontraste... - La voz de Sasuke llamó mi atención sacándome de mis pensamientos.

- ¿Cómo pudiste ocultarme algo así? - Las lagrimas seguían cayendo por mis mejillas, no podía comprender como la persona que más amo en el mundo podía mentir con tanta facilidad.

- Creí que era lo mejor. - Soltó frío.

- No era tu decisión. - Contra ataque, se mantuvo en silencio sin despegar la mirada de mi.

- No me sorprende... - Soltó. Lo interrogué con la mirada. - Nunca dices gracias cuando te protejo. - ¿Es en serio?

- ¿Debo darte las gracias por ocultarme algo tan importante? - Pregunté sarcástica.

- ¡No lo entiendes! - Gritó de pronto. - Y tampoco necesito que lo entiendas solo acéptalo y ya. - Sus ojos oscuros se posaron en los míos, mas no me dejé vencer sostuve su mirada firme.

- ¿Aceptarlo? ¡Lo que deberíamos aceptar es que la conexión está rota! - Grité de pronto sin pensar en las palabras que decía.

- ¿Crees que no lo sé? - Preguntó molesto. - Ya no escucho tus pensamientos y definitivamente ya no hacemos tan buen equipo como antes. - 

- ¿Y eso era todo lo que teníamos? ¿Una conexión que perdimos? - Sentí mi corazón romperse en miles de pedazos al pensar que nada de lo que habíamos sentido era amor.

- ¡No lo sé Cassy! - Gritó. - No querías que veas la carta por esto, sabía que te cuestionarías si lo que sentimos era amor. - Avanzó por la habitación.

- ¿Y es amor? Porque tu dejaste de ser el chico que me cuidaba entre sus brazos del frío. - Entré en cuenta de lo mucho que extrañaba al Sasuke que había conocido en mi mundo.

- No dejé de serlo... - Comenzó.

- Claro que sí Sasuke, ahora eres frío, distante, a penas si te acercas a mí y pareciera que prefieres pasarte todo el día solo afuera que aquí conmigo. - Sollocé.

- Yo siempre fui así, solo fingía que no. - Soltó seco.

- ¿Fingías? - Una punzada de dolor se hizo presente en mi abdomen haciéndome llevar mis brazos a este encontrándome con las heridas que Sasuke había hecho en mi cuerpo al atacarme. Sus ojos fueron hasta las heridas frunciendo el ceño.

- ¿Después de haberte hecho eso aún crees que soy bueno? - Preguntó sombrío para luego salir de la casa dejándome sola, como todos los días de mi vida hace ya mucho tiempo.

Sasuke

Avanzaba rápidamente entre los árboles que yacían en el lugar ¿Qué clase de monstruo puedo ser para hacerle tanto daño a la mujer que amo con cada parte de mi alma? Aún la amo profundamente pero es diferente aquí, me siento más fuerte físicamente pero más débil al momento de controlar mis impulsos llegando a hacerle daño a la única persona que no deja de creer en mí, por esto he estado intentando alejarme para protegerla.

- ¿Vas a algún lado en concreto? - La voz de mi antiguo sensei me detuvo en seco, ya hace un par de semanas que me había encontrado y lo agradezco porque finalmente pude hablar sobre todo lo que había pasado, con la promesa de que  él no dijera nada sobre donde me encontraba o todo lo que viví.

- Sigo huyendo como todo un estúpido. - Dejé caer mi peso en el tronco de un árbol enterrando mi rostro entre mis manos.

- Sasuke no puedes huir de tus sentimientos. - Lo fulminé con la mirada recordándole que no es la mejor persona para aconsejar eso. - Bien, puedes pero no deberías, a la larga solo te harás daño a ti y a ella. -

- No lo entiendes... - Gruñí.

- Es lo que siempre dices y créeme que no hay persona que pueda entenderte mejor que yo. -

- Si la hay... - Susurré, nadie nunca me había entendido como Cassy.

- ¿Entonces que esperas? Si te dejé ir y seguir tu vida lejos de la aldea, además de guardar silencio con tus amigos que diariamente se preocupan por ti, no fue para que huyas de lo que amas... - Bajé la mirada ante las palabras de Kakashi. - Sino para que puedas vivir la vida que querías, con amor, con una familia... -

- Ella es lo más cercano que tuve de una familia. - Admití.

- ¿Entonces que haces aquí? - Preguntó.

- Le hago daño. - Grité. - La ataqué y la herí fuertemente, hay veces que no logró controlar mis impulsos atacándola sin pensarlo, no soporto que me contradiga o que corra riesgos cuando puede estar segura. -

- Esa no es tu decisión, ella es libre de tomar sus propias decisiones Sasuke y debes aceptarlo y amarla así. - Era cierto.

- ¿Y si le hago daño? - Pregunté.

- Cuando estés por hacérselo solo recuerda como te sientes ahora y te aseguró que no querrás hacerle daño. -  Asentí ante sus palabras. - Además, eres el único que puede ayudarla a vencer su propio poder, tú sabes lo que es luchar contra algo que esta en ti. - Recordé a mi yo niño luchando contra la marca de maldición.

- Gracias. - Solté.

- Ahora vete, seguramente ella quiere estar contigo... - Dio media vuelta para irse. - Algún día quisiera conocer a la mujer que conquistó al gran Sasuke Uchiha, deber ser una gran guerrera. - Sonrió para luego salir del lugar.

Emprendí mi camino hacia mi casa al paso más apresurado que pude, llegué a la puerta de esta con un par de flores que había recogido en el camino.

- Cassy. - La llamé al entrar mas no respondió, debe seguir molesta conmigo, avancé hacia la habitación con las flores en la mano. - Hola mi amor. - Saludé al entrar y verla recostada, sonrió ligeramente al ver el pequeño ramo en mis manos.

- ¡Aah! - Gritó después de retorcerse de dolor. Un brillo enceguecedor salió de su pecho acompañado de los gritos de dolor de Cassy. 

- Cassy no. - Avancé hacia ella intentando detener el poder que salía lastimándola de su cuerpo.



Un Shinobi fuera de la aldeaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora