Harry Potter el retorno del Rey

Cambios.

Los exámenes de fin de año vinieron y se fueron, pero por primera vez en tres años si se realizaron, para gran decepción de algunos, especialmente los más flojos que esperaban una vez mas no tener que tenerlos y de esa manera conseguir el pase de año automáticamente.

Por supuesto eso no se podía hacer, especialmente considerando que algunas de las mejores alumnas eran novias... esposas del dueño de la escuela.

Hermione, principalmente, pero también Penny y Padma e incluso Daphne, estaban completamente indignadas por no tener los exámenes, y contrario a lo que podrían pensar no era porque les gustara tener exámenes, simplemente estaban pensando a futuro, sin esas calificaciones sus hojas de vida no eran tan... extensas o tan completas como les gustaría.

Por su puesto eso no fue lo único que ocurrió en esos días, no sabían concretamente si Ronald y Ginevra tenían algo que ver con la poción de amor, aun así, tenían sus sospechas y el intento de violación por parte de Percival había sido la gota que derramo el vaso.

Los instintos de Harry pedían una retribución mucho más... letal, pero estaba de acuerdo en que eso sería contraproducente.

Por lo tanto, las que se vengaron fueron las chicas, lastima para los Weasley que la venganza de una mujer podía ser mil veces peor que la de un hombre. Como no estaban seguros de Ginny y Ron, solamente les hicieron unas cuantas bromas de muy mal gusto.

De seguro no les gusto andar por allí con la cara llena de granos que reventaban dolorosa y apestosamente, así mismo terminaron con un problema... estomacal en los peores y más vergonzosos momentos posible.

Percy por otro lado, no solo recibió el mismo trato que los dos menores, sino que también termino siendo hechizado con un par de hechizos que proporciono la premiada Reina de Hielo de Slytherin, el Weasley había sido sorprendido desnudo corriendo por el Gran Salón con toda la ropa interior de McGonagall en los brazos.

Nunca habían visto a su profesora de Trasfiguraciones tan molesta en su vida, si eran sinceros quizá esa no había sido una buena idea, Minerva McGonagall no era una leona era una Quimera cuando estaba furiosa.

Percival terminó perdiendo sus placas de Prefecto y Premio Anual, al mismo tiempo había conseguido una enorme y catastrófica mancha en su propia hoja de vida.

Por su puesto no fueron los únicos que recibieron severos castigos, Ravenclaw podía ser considerada la casa de los inteligentes, pero ciertamente no todos en ella lo eran, algunos Séptimos y Sextos años olvidaron completamente que Harry le ordeno a Hogwarts proteger a Luna.

Y cuando intentaron... intimidarla una vez más fueron... tratados con el debido procedimiento, una McGonagall nada compasiva después de lo que sucedió con Percy y un Filius que ya había estado atentó a este tipo de cosas procedieron a dejarlos en peores condiciones, sin haberlos topado de ningún modo por supuesto.

La baja de punto para Gryffindor y Ravenclaw fue de leyenda ese término de año, más la perdida de punto que sufrió Slytherin sin los regalos constantes por parte de Snape, por primera vez en más de una década Hufflepuff estaba al frente por la copa de la casa, algo por lo que Susan, Hannah y otros de la única casa que parecía, en su mayoría, honrara a su fundadora, estaban festejando a gritos.

Por su puesto con los exámenes terminados era imposible que se agregaran más puntos, pero hasta que no se les haya entregado la copa no podía confiarse, después de todo Gryffindor ya había recibido varios puntos de último minuto en los anteriores años.

Por lo demás todo estuvo bastante tranquilo, después de la humillación y perdidas por parte de Gryffindor y Ravenclaw nadie se atrevió a hacer algo mal.