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Lucia Castillo

—¡Lucia, date prisa! —escucho la voz de Luca desde el piso de abajo.

Pongo los ojos en blanco, y después de terminar de embadurnar mi cuerpo de cremas, me pongo un vestido blanco y ato una cinta negra gruesa a mi cintura para darle un poco de forma. Hoy es un día muy importante y me emociono demasiado que nos hubiesen invitado.

Hoy Abraham Hamilton sera revelado al publico.

Leah y su familia habían estado como locos en todo el proceso, desde el momento en el que Leah me confeso los planes de su familia sabia que todo el asunto la tenia de los nervios, sobre todo porque aun faltan al menos cuatro meses para que Abraham alcance su primer año, la edad en la que tenían planeado presentarlo.

Leah y Clare saben que es solo una tonta tradición que solo se llevo a cabo un par de veces en la familia de su madre y me lo han repetido muchas veces, pero mientras las veía organizar cada detalle junto a Jaime, la hora de los vuelos del su familia que iba a asistir y la comida y bebida de todo el evento, más notaba que todo el asunto era mucho más importante de lo que admitían.

Bajo al primer piso donde Mateo y Luca me esperan, el primero mira su reflejo con ansiedad en un espejo de la sala y el segundo golpetea con su pie en el piso. Me sorprendo al verlos, ambos vestidos de manera tan formal y elegante que me hacen sentir fuera de lugar, antes de decidir que me da igual y que luego Leah me prestara uno de sus vestidos.

Mi madre se reúne con nosotros, vistiendo un hermoso vestido blanco que se ajusta a su cuerpo hasta la cintura, desde donde cae con una falda circular. Tiene un cinturón fino con pequeños cristales por todos lados en su cintura y unos altos zapatos blancos.

—¿Que rayos llevas puesto? —inquiere Luca al verme, horrorizado.

—Un vestido —respondo con simpleza, tomando mi abrigo del perchero.

—No vas a ir con eso puesto —interviene mi hermano mayor, señalando mi atuendo—. Esto es un evento formal muy importante, Lucia, no vas a destacar de una buena manera.

Me encojo de hombros: —Leah me prestara algo, ahora no hay tiempo para cambiarme aquí, así que vayámonos de aquí.

Luca se sube al asiento del conductor y somos conducidos a la mansión Hamilton, para luego partir junto a la familia al salón del Lord of Black and White, donde se realizara el evento. Al principio hasta las hermanas Hamilton pensaban que se realizaría en la mansión, pero su padre se opuso porque no quería a nadie en su casa y mucho menos en una celebración. A veces me costaba recordar que los Hamilton, aunque lo lleven de una manera distinta, están de luto por la muerte de Clarissa y este tipo de eventos no hacen más que recordarles a todos lo que ella no va a ver.

Cuando llegamos pasamos de inmediato para encontrarnos con un pequeño caos. Veo a Clare correr en dirección a la cocina, antes de vernos y cambiar su rumbo a donde nos encontramos.

—¡Hola! —saluda cuando llegamos—. Lucia, Leah esta en su habitación y seguro te necesita. Esta en una especie de crisis porque no quiere usar nada, ni salir de la cama.

—¿De nuevo? —inquiero, recordando el día del funeral de su madre.

—Si, aunque creo que esta es mucho más leve. Estaría más tranquila si Ana estuviese aquí, pero no lo esta y estoy intentando mover todo lo mejor posible.

—¿Donde esta Jaime? —pregunto al no ver a la hermana de Lucian por el lugar.

—Salio con Lucian a recibir a su padre y a Anastasia —responde—. Aun no sabe si podrá asistir, no sabíamos que Anastasia se volvería loca y nos presionaría para presentar a Abe, y ahora ella no encuentra vuelos.

RP2: Cruda Verdad ·EN EDICIÓN·Where stories live. Discover now