todo cambia | trueno

043

ᵣₒₘₐ

Mauro
en línea

Donde estas

Seguro estas con el

Te voy a hacer mierda
hija de puta

Venis ya a mi habitación
no te quedo claro que
soy yo el que te manda
ahora?
16:47✓✓

Suspire y apague mi celular.

Mire al frente y estaba Mateo con los auriculares mientras miraba a la computadora, había estado grabando algo recién.

Supongo que un nuevo tema.

No me dí cuenta que lo estuve mirando por mucho tiempo, lo deje de mirar cuando conecto su mirada con la mía.

Se saco los auriculares y me sonrió.

- Ya se que soy lindo, pero me acosas- dijo y puse los ojos en blanco, me baje del escritorio y meti mi celular al bolsillo.

- Que egocéntrico que sos- dije y mire hacia la puerta, Valentín todavía no había vuelto.

Sentí como desde atrás me agarró de la cintura y empezó a dejar besos en mi cuello.

Largué un suspiro pesado, los besos en el cuello eran mi debilidad y creo que ya lo dije.

- No puedo hacer esto, Mateo- dije en un susurró.

- No vamos a hacer nada que vos quieras- dijo y empezó a acariciar mi brazo con la llema de sus dedos.

Suspiré y lo pensé.

"Tenes la oportunidad de despedirte de el, hacelo bien".

Ojalá que realmente aca no haya cámaras.

Me di vuelta quedando frente a frente con el, no lo dude ni dos segundos y uní nuestros labios.

El tardo unos segundos en reaccionar, pero lo hizo.

El beso era desesperado y cuando le di pasó a su lengua se volvió algo intenso.

Me alzó haciendo que rodeé mis piernas en sus caderas y que con mis manos rodeé su cuello.

Me sento en el escritorio en el cual estaba sentada anteriormente y me apretó contra el haciendo que sienta su bulto completamente duro.

Empezó dejando besos en el cuello y me saco la remera con un poco de mi ayuda.

- Espera, espera- dije y el frenó- ¿y si viene Valen?- pregunté.

- No va a venir, esta preparando las cosas para ir a comprar- dijo y asenti- si no estas segura y no lo queres hacer, paramos aca no quiero que te sientas obligada- negué y mordí mi labio inferior, ¿por que te dejé?.

"Porque sos una pelotuda".

Si, eso también.

Uní nuestros labios como respuesta y empecé a sacarle su remera.

Sentimos una llave en la puerta, rápidamente nos separamos y el me pasó mí remera.

- Escondete, es Mauro- dije mientras me ponía mí remera, el asintió y me dejó un corto beso en los labios.

Sonreí.

Lo vi meterse por una puerta, supongo que debe ser un baño.

Me baje rápido del escritorio y me puse los auriculares, me sente en la silla y me hacía la que veía algo en la computadora.