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Había faltado a mis dos últimas clases ese día.

Con la excusa de que teníamos entrenamientos de béisbol.

Los chicos estaban totalmente cansados.

Vía raditz acercando hacia mí.

Me lanzó una botella de energizante.

Logré atraparla antes de que chocará conmigo.

—Vegeta ,deberías darles un descanso llevan dos horas corriendo.—dijo el tratando de respirar.

—Raditz , no quiero repetirtelo la final está muy cerca y yo no pienso perder—dije.

—Si no paras ahora ,llegarás con todo el equipo muerto a la final—dijo él.

No pude evitar burlarme, el tal vez tenía razón.

Pero teníamos algunos integrantes qué necesitaban esa clase de entrenamiento.

Llevé mi vista hacia los jugadores algunos ya estaban en el suelo y otros como Nappa no se rendían.

El demostraba qué significaba ser un verdadero jugador.

Le regresé la botella a Raditz mientras me acercaba a ellos.

Les pedí que se reunieran.

Ellos se acercaban cansado hacia mí.

—Chicos es suficiente para el calentamiento tendrán un descanso de 10 minutos para empezar, si alguno quiere rendirse ahora ,lo aceptaré porque sólo pienso llegar con los mejores a la final . Llevamos esforzándonos todo el año para obtener esa copa y por ninguna razón los insectos del otro equipo no los van a quitar.—Dije seriamente.

Pude haber algunos de ellos cansados, mirándome fijamente.

Uno de ellos levantó la mano, realmente no lo conocía. Era un chico pelíverde se había mantenido corriendo hasta el final justo detrás de Nappa.

Le dije que hablará.

—Mi nombre es Piccolo y es un gusto pertenecer a su equipo, voy a dar lo mejor de mí ahora y en él partido final—
dijo muy seguro de sí mismo.

Reí.

—Eso espero Piccolo—dije lanzándole una de las botellas de agua que teníamos.

No espere ni un minuto más y les dije que tomará sus posiciones .

Empezaría con este entrenamiento.

Unas horas después.

Había tomado una ducha en el gimnasio justo después del entrenamiento algunos de los chicos no habían podido salir caminando de la cancha.

Caminaba por los pasillos mientras revisaba mi teléfono.

Tenía mensajes de mi hermano Tarble.

Estaba por leer uno de ellos cuando sentí un pequeño impacto.

Con gran esfuerzo pude quedarme de pie.

Pero no podía decir lo mismo de la otra persona había caído al piso.

Esto era lo único que me faltaba.

Estaba apunto de insultar a la otra persona.

Cuando vi esos ojos celestes y el cabello del mismo color.

—Peliazul—dije sin poder evitarlo.

Quise ayudarla pero ella se había puesto de pie casi al instante.

Vi su mochila y sus cosas en el suelo.

Traté de levantar alguna de ellas.

Pero ella me lo negó casi de inmediato me quitó una de las hojas que tenía en la mano.

Sentí un pequeño ardor.

Mientras veía uno de mis dedos llenarse de sangre.

Era una pequeña cosa sin importancia.

Pero pude ver en sus ojos algo de preocupación.

No pude evitar chillar.

Esperando que ella no se diera cuenta que estaba fingiendo.

Llevó sus manos hacia su mochila buscando algo.

La vi sacar una curita.

Pensé que me la lanzaría o algo así.

Pero ella la abrió mientras jalaba de mi brazo haciendo que yo abriera mi mano automáticamente.

Puso la curita sobre mi dedo, marchándose.

Estaba sorprendido.

Si fuera otra persona no hubiera permitido ni que me tocará.

Miré la curita unos instantes.

Era mucho para una herida insignificante ,pero por alguna razón no quería quitármela.

Quédate Conmigo [AU][Vegebul]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora