|707| Descubriendo la sorpresa.

26.4K 869 1.6K
                                    

¡Al fin iba a mudarme con Saeyoung! Hacía más de medio año que empezamos una relación formal, y hace un par de días me invitó a vivir a su casa, así que ahí me encontraba yo, con dos maletas cargadas de ropa y mis pocas pertenecias, yendo a la casa/bunquer de mi novio que es un hacker y espia secreto mundial... A lo mejor no sonaba tan bien...
Dentro de toda la peligrosidad de su oficio, él siempre ha resultado ser bastante divertido. Tiene un humor tan desconcertante que no sabes nunca por donde va a salir una de sus bromas. Tiene unos ojos dorados, que me quitan la respiración cada vez que me miran. Su pelo es rojo como el fuego y su sonrisa... ¡Dios! No hay broma o chiste que no valga la pena por ver su sonrisa... Todo de él para mi es perfecto.

Al fin llegué a su casa, y al sonar el timbre empezó a hablarme su puerta.

- Bienvenido, ingrese contraseña en árabe. - Una voz robotica y un idioma me dividían de mi amor.

No era la primera vez que venía a su casa, pero su puerta nunca dejaba de sorprenderme.
De repente, la puerta empezó a abrirse, y como una boba, sonreí esperando ver a mi amor, pero para mi sorpresa me abrió la puerta un hombre castaño, de pelo largo y liso, y vestía bastante galán.

- Debes ser la novia de Saeyoug... Pasa. - El hombre se apartó dejándome pasar, y lo hice algo confundida.

- Disculpe, ¿quién es usted, y donde está  Saeyoung? -

- Soy Mary Vanderwood, guardaespaldas y agente secreto de ese patán que tienes como novio, y él ahora está trabajando en su habitación con temas confidenciales, así que no puede recibirte. - Su tono de voz me daba miedo y respeto a partes iguales.

Con el tono que me había respondido me quitó las ganas de hacerle más preguntas, cómo... "¿Por qué se llama Mary?" Saeyoung me había hablado de él, pero con ese nombre pensé que era ella... Ahora entiendo por que temía de vez en cuando a esa tal Mary.
Dejé mis maletas a un lado y me senté en el sofá. Una hora, dos horas, tres... De vez en cuando miraba a Vanderwood el cual no se separaba de su teléfono, ya sea escribiendo o en llamadas. Decidí abrir una de mis maletas, buscando algo de ropa y la cerré antes de ir al baño, me aburría, y una ducha me quitaría la pesadez. Y así fue, la ducha me sentó como si hubiese vuelto a nacer, me enrolle en la toalla y pude escuchar la voz de mi novio.

-¿Y estas maletas...? ¿¡Ya ha llegado!?- Su tono de alegría hacía que se me llenara el pecho de amor.

-Hace unas horas, pero como estabas trabajando no quisimos molestarte. - La voz de Vanderwood era inconfundible.

-¿¡Qué!? La he dejado esperando... ¿Dónde está? -De verdad me moría de ternura con su voz.

-En el baño... -Podía notar la indiferencia de la voz de Vanderwood desde donde yo estaba, el baño.

¡Espera! No me he vestido aún, y Saeyoung viene frenético hasta aquí. Rápidamente me agarré con fuerza a la toalla que me rodeaba cuando él abrió la puerta.

-¡Mc! - Se abalanzó alegre a abrazarme, sin importarle lo empapado que estaba mi pelo.

No podía negar que estaba igual de ilusionada que él de verle.

-Disculpa si te hice esperar... Me concentré tanto en mi trabajo que ni me enteré de que llegaste... -Sonreía mientras rodeaba mi rostro sonrojado con sus manos.

- No pasa nada cariño... -Sonreí algo incómoda. - ¿Podemos hablar cuando salga del baño...? -

Ahí Saeyoung se dió cuenta de la situación. Y se puso del tono de su pelo. Me pidió disculpas antes de salir y dejarme vestirme.
¿Alguien sigue creyéndose que este hombre es peligroso? Es un ser que da amor~

Mystic Messenger ONE SHOTSWhere stories live. Discover now