We are what we are

Parte 14 Deep

Seria, con los ojos rojos, como cada noche que bajaba a cenar después dejarlo con el amor de su vida. Por mucho que intentaba olvidarse, no podía, era inútil, parecía tener el efecto contrario y hasta soñaba con ella. Siempre la veía alejarse y ella le gritaba desesperada mientras la sujetaba para intentar retenerla a su lado, pero Clarke siempre se iba y ella terminaba despertándose de golpe, sudando y con un nudo en la garganta. Porque era real, Clarke ya no estaba y la decisión había sido suya, no había sido una decisión voluntaria pero la había tomado. ¿Qué hacía la gente en esos casos para superarlo? Tenía que encontrar una forma porque aquello era bastante insoportable. La sensación no desaparecía y la echaba demasiado de menos.

La rompió romperla a ella y la mataba saber que jamás volvería a besar sus labios, tocar su piel, entrelazar sus dedos, sentir el amor por todas partes, recibir aquellas miradas de afecto incondicional y que Clarke pudiera ver lo mismo en sus ojos, el amor se veía a través de ellos y la sensación de felicidad y de haber encontrado su lugar en el mundo, ahora era angustia y algo de desesperación. Ya no le importaba nada.

En dos semanas son las elecciones, Lexa cariño, estas semanas me siento muy orgullosa de ti.

Miró a su madre, con desidia, estaba demasiado cansada emocionalmente como para reprocharle algo, así que simplemente siguió comiendo sin más.

¿Cuándo vas a volver a ver a Adam? Sería importante que estas semanas que quedan se os viera juntos.

Apretó la mandíbula, le había dicho a aquel chico que acababa de salir de una relación y no estaba preparada para salir con nadie, no era mentira, pero dejó abierta la posibilidad de que entendiera que tal vez en un futuro tendría la oportunidad de estar con ella. Pero cuando acabara todo y su madre ganara las elecciones, le daría carpetazo definitivamente. Solo quería que la dejaran en paz durante ese tiempo, no necesitaba añadir más presión ni carga emocional a la que ya tenía y no sabía gestionar. Si mantenía las apariencias viviría un poco más tranquila.

Está un poco liado, pero hablaré con él

¿Ves cómo no está siendo nada tan difícil? Eres lista Lexa, se que lo entiendes

¿Puedo irme ya? He quedado con Raven y mis amigos de la facultad - Prefirió decir aquello a montar un numerito y expresar lo que de verdad sentía, porque no iba a servir para nada-

Claro, pásatelo bien y no tengas prisa por volver a casa. Cuando nos haces sentir orgullosos todos salimos ganando. Espero que no se te olvide que te quiero y siempre querré lo mejor para ti.

Claro mamá - Se levantó de la mesa, cogió sus cosas y salió de allí -

x

Tirada en el césped de aquel parque, después de su cuarta copa, después de haberse dejado "animar" por sus amigos, deseaba que lo pudieran conseguir y tenía que reconocer que algo de alivio sentía cuando conseguían distraerla aunque fuera por unas horas. Pero siempre volvía Clarke a su mente, de una forma u otra siempre estaba ahí. Por eso estaba tumbada, mirando las estrellas y sintiendo el calor de las lágrimas recorriendo sus mejillas. Notó como alguien se tumbaba a su lado.

¿Se acabó el respiro?

Nunca lo ha habido

Venga Lex, tienes que dejarlo atrás de una vez, mírate, te pasas el día llorando y torturándote con lo mismo.

A veces pienso que no hice lo correcto, tendrías que haberle visto la cara, le jodí la vida y al parecer yo no puedo estar sin ella, no se que me hizo pensar que si que podría.