¿D o M? M.Y.G (TERMINADA)

40

Este capítulo trata en mayor parte, el pasado de Sook.

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Nunca pensó que estar sola sería tan complicado. Las primeras horas casi no lo pudo notar por estar haciendo trabajos de la universidad que se le habían acumulado. Se dio cuenta de lo difícil que es, en la noche entre las cálidas cobijas que suele compartir con YoonGi. No podía dormir, viendo hacia la nada, dónde sólo habitaba la terrible oscuridad.

Tuvo miedo, ese miedo que sentía cuando estaba en la casa de sus padres. Lo sentía al saber que nadie la podría proteger ahora, cuando estaba en el departamento de YoonGi, estaba YoonGi y cuando estaba en la departamento de Tae, estaban Tae y Kookie. Ahora no había alguien más que ella. Eso esperaba.

Porqué no sabía que había más allá de la oscuridad.

Sintió asfixiarse cuando su mente le jugó una mala pasada imaginándose a ese monstruo al fondo, a ese que la atormentó tantas noches sin parar.

-no eres real, no lo eres- se dijo a sí misma tapándose completamente con la cobija- YoonGi, YoonGi, sálvame- sollozó más quedito sin poder dejar de llorar y aferrarse a las cobijas como si fueran su escudo, sin querer ver más allá.

"Ese vestido se pega tan bien a tu cuerpo"

Recordó.

Sentía ser otra vez esa niña de 12 años. Esa noche había sido la peor de toda su vida porque le desencadenó más desgracias.

"Vamos a jugar"

"Este tipo de juego sólo lo podemos hacer tú y yo, y nadie debe de saber, porque si lo saben, te mataré, mataré a tus padres y publicaré fotos de tu tierno y bello cuerpo"

Quiso vomitar, al recordar el escozor de su "partecita" como ella llamaba en esa época.

Recuerda que esa noche había llorado tanto, aferrándose a sus propias piernas y en medio de éstas ese río de sangre. La había usado y desgarrado. Pensó que tal vez, sólo sería ese día y ya no más.

Que tal vez el juego verdaderamente si era así. Que tal vez él se habría dado cuenta de cuánto daño le ocasionó. Que tal vez él recapacitaría.

"Mi esposa ya no es tan estrecha como tú"

Pero cada noche se volvía a repetir.

Cada noche lloraba en silencio, protegiendo vidas que no la amaban, sacrificándose por almas que la aborrecían desde su nacimiento. Aunque ella lo haya intentado ocultar, aunque ella haya intentado justificar sus acciones que ocurrieron antes de ese año tormentoso. "Es porque te amamos" o "Es por tu bien" creyó en todas y cada una de esas deshonestas palabras, se hundió y mintió con ellas, metiéndose a su mundo de fantasía en el cual podía aparentar ser feliz.

"Ya no lloras, parece que ya lo disfrutas tanto como yo"

Simplemente ya no quería sentir y pensaba que el dejar de llorar apagaría sus emociones. Siempre le dolía, siempre lloraba, siempre intentaba gritar y pedir auxilio.

Nunca sirvió de nada.

Nadie la ayudó.

Nadie la salvó.

"Estás más gorda, así ya no me gustas tanto"

¿Entonces porqué seguía "jugando" con ella?

¿Por qué seguía dañándola?

¿Qué le había hecho para merecer un año de dolor?

"Eres una maldita zorra"

"Siempre vestiste muy provocativa, te lo buscaste a pulso"