CAPÍTULO 4

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Cheryl vio películas con Jason, si hermano menor, hasta que este se quedó dormido, lo cual sucedió muy tarde para desgracia de Cheryl, quien deseaba con urgencia hablar con la chica de la ventana.

Luego de llevar a Jason a su cama Cheryl volvió a su habitación, esperando que la misteriosa chica que vivía frente a su casa estuviera aún despierta. 

Para si mala suerte la chica de la ventana ya estaba dormida.

Cheryl gruño. Estaba frustrada. Quería conocer su nombre, pero cada vez que lo intentaba alguien las interrumpía. Primero la madre de la chica de la ventana, luego Jason...

¿Ahora que? ¿Un cerdo volador en tanga?

Entonces sonrió al ver que había un papel pegado torpemente en aquella ventana vecina, esa donde aquella chica apoyaba su mano derecha y la miraba con esos ojos que Cheryl nunca lograba ver más de un par de milisegundo.

"Buenas noches, chica de la ventana"

Cheryl jamás había sonreído como lo hizo aquella vez.

•••

Como siempre, las cosas buenas en la vida de Cheryl venían acompañadas de algo mucho peor.

Se levantó temprano y se alistó para ir a la escuela. Intento hablar con la chica de la ventana antes de irse, pero estaba recostada sobre su cama, dormida, lo cual era raro pues al despertar Cheryl habría jurado que la chica de la ventana ya no estaba en su cama... Ademas, habían quitado el papel de su ventana.

Frustrada por no poder hablar con la chica de ojos escurridizos, Cheryl tomó una hoja, escribió en ella "Buen día chica de la ventana", la colocó sobre el vidrio y se fue.

Al llegar Lauren y Camila la recibieron como siempre.

Camila: ¿Como estas, Cheryl? -pregunto mientras sacaba algunos libros de su casillero.

Cheryl: Bastante bien, en realidad -contestó sonriendo.

Cheryl no podía recordar lo sucedido con Archie y Jughead el día anterior. Lo único que ocupaba su mente era la chica de la ventana.

Lauren: Cheryl, estás... extraña. Jamás he había visto sonreír tanto. ¡Ni siquiera cuando Camila te regalo dos tres canastas llenas de cerezas!

Cheryl: ¡ESTOY FELIZ, CUBANA! ¡ESTOY FELIZ!

Lauren: ¡Fiesta en la casa de Cheryl! -dijo no muy alto, burlándose de la felicidad de su amiga.

Camila: ¡Yo llevó las bebidas!

Cheryl: ¡Camila!

Camila: Vale, entonces llevó al stripper... será guapo, lo prometo. -respondió poniendo los ojos en blanco.

Cheryl: ¡CAMILA!

Lauren: Oh... has olvidado que a Cheryl no le gustan los chicos... tenemos que solucionar esto, Cheryl.

Camila: Yo era stripper en una de mis vidas pasadas, Cheryl -sonrió tentadoramente a Cheryl, y luego la abrazo y le beso la mejilla- Tu dime lo que quieras y yo lo haré, bebé -y seductoramente le guiño el ojo.

Cheryl se sonrojo de inmediato y se cubrió la cara con ambas manos, riendo. Camila siempre hacía bromas como aquella, y Cheryl siempre se sonrojaba.

Cheryl: Ustedes son insoportables...

Lauren: Yo soy insoportable. Camila es una caliente stripper frustrada que baila sobre una mesa esta noche... en tu casa.

La Chica De La Ventana |CHONI|Waar verhalen tot leven komen. Ontdek het nu