19. Aquello

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Frankie estaba durmiendo, algo extraño de él era que siempre estaba durmiendo.

No quise levantarlo y tuve que esperar para servirle el almuerzo, cuando estaba apagando todo Gerard llegó.

Parecía feliz, traía una sonrisa gigante, como cuando se casó con Frank...

—Gerard, ven, necesito hablar contigo– dijo en un tono serio.

—No tengo tiempo para hablar, estoy cansado– miró desganado a Mikey.

—¿Qué le hiciste a Frank?– tomó a Gerard del brazo para que este no pudiera irse corriendo a su habitación.

—Nada, él... Él rompió todo, solo porque le grité na-nada más, sueltame– dijo algo nervioso.

—¿Y las marcas en sus brazos? ¿En sus piernas?

—No sé, de seguro se cayó, no sé, dejame– dijo tratando se soltarse del agarre de su hermano.

—Gerard, por favor dime que no le hiciste eso– lo soltó.

—¿Hacer qué?– se quedaron un momento callados– Yo no le hice nada, él tiene la culpa de todo– dicho esto se subió rápidamente.

—Gerard– las lágrimas comenzaron a caer– Solo dime que no lo lastimaste, solo dime eso, dime que no pasó nada de... Eso– trató de sonar tranquilo pero no podía.

—Oh, ¿Mikey quiere saber qué pasó?– estaba riéndose– Bueno, dejame contarte– sonrió y Mikey estaba aterrado.

+

Gerard estaba cambiándose para salir, no pensaba cuidar a Frank, realmente no le importa que le pudiese pasar. La toalla estaba amarrada a su cintura estaba peinandose hasta que escucho a Frank reír.

Se dirigió al cuarto de este y Frank se asustó pero solo sonrió.

—¡Gee! ¿Jugamos?– mostró sus dientes blancos formados en una sonrisa.

—No, juega solo o haz algo, no me interesa realmente– dijo retirándose.

—Por favor, juega conmigo, Mikey no está– hizo una cara de puchero.

Gerard lo pensó ¿Podia ser bueno con el pequeño Frank?

—¿Quiéres que juegue contigo?— sonrió maliciosamente— Si quieres jugar conmigo pues... Hazlo como jugábamos antes.

—¿Cómo jugábamos antes Gee?— rió.

Gerard ya no contestó pues solo levantó su mano formando un puño y golpeando fuerte a Frank.

Este cayó al piso y solo se asustó, miró a Gerard con terror y notó que de su labio salía algo color rojizo, era sangre.

—¡Yo no quiero jugar así!– levantó su peluche y su libro– ¡No quiero!

—Oh Frankie, eso no es todo.

Volvió a golpearlo y esta vez con más fuerza, Frank solo soltaba pequeños sollozos y comenzaba a ver borroso.

Gerard aprovechó en buscar cualquier objeto para amarrarlo a aquella cama, encontró una camiseta y lo amarró con eso.

—¡Yo no quiero jugar Gee!– lloraba y las lágrimas solo... Salían– ¡No quiero!

—¿No quiéres?– rió tomando el libro de Frank– Pues mira como destrozo tu libro– dicho esto abrió el libro y arrancó algunas hojas y las destrozó.

—¡No!– gritó– ¡Mikey me compró eso, es mío!

Otro golpe más y la nariz de Frank ya estaba sangrando, solo veía poco y la vista se le nublaba

Frank vió como Gerard comenzaba a quitarle parte del pantalón y no podía patear, pues Gerard no le permitía además de que estaba débil.

Sintió como algo extraño se movía dentro de él, le dolía y solo, solo veía a Gerard con una cara extraña.

Frank gritaba y lloraba, no pataleaba porque no tenía fuerzas, era solo un pequeño.

Sintió como lo desató, después de haber tenido "aquello" Dentro de él como por una eternidad.

Frank reunión todas sus fuerzas y escapó de Gerard, quería a Frank, no quería a Gerard, no ahora.

—¡Ven aquí!– escuchó decir a Gerard.

Este corrió hacia la puerta pero antes de abrirla escuchó como un vidrio se rompía.

Volteó para encontrarse con su pecera rota y sus pequeños peces ahogadose con el aire. Irónico, los peces se abogaban con el aire y los humanos con el agua.

Frank corrió a sus peces y comenzó a llorar más fuerte.

Gerard solo rió y se fue a su habitación, Frank llorando se fue a la bañera y se llevó consigo a sus peces, pero estos ya estaban muertos.

Llenó la bañera, como lo solía hacer Mikey, metió a sus peces pero estos ya no nadaban, se metió con ellos, deseaba ser un pez, para ser libre por el mar y no tener que sufrir, deseaba ser un pez y que Mikey lo cuidase para siempre, que lo abrace y le diga que todo estaría bien, porque justo ahora no estaba nada bien.

Escuchó unos pasos cerca y trató se taparse el rostro con sus manos.

—Y tú, pequeño engendro, le dices algo de esto a Mikey y nunca más lo vuelves a ver, nunca más, estarás muerto– dijo Gerard y se retiró.

+

Entonces noté recién que Frank tenía moretones también en la cara, había pasado por alto ese detalle.

La cama estaba desordenada y Frank estaba con sus peces en la bañera, recién, recién lo estaba notando y Gerard solo me veía con una cara sin expresiones, me contó todo y yo ya no quería verlo, él sabía cómo estaba Frank y lo hacía todo peor, todo.

Gerard me sonrió y se fue.

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Este ha sido uno de los capítulos más largos que he hecho a lo largo del fic, suelo hacer como 500 o 400 palabras, se que están odiando a Gee pero es que aaAAAAH está de odioso.

Quiero agradecerles el apoyo que le están brindando al fic, gracias por todo, encerio, besitos para todxs.

Lxs etiquetaria pero quizá me olvide de alguien y no quiero hacer eso, pero ustedes saben quienes son, lxs quiero mucho. ♡

Pregunta, preguntaAAAAa–––(/

—¿Creen que tenga final triste? (Aunque Mikey ya dijo algo peroOoO)

—¿Les gusta el fic? 😳👉🏻👈🏻

///Si tienes dudas de algo, comentarlo aquí///

No suelo hacer notas, y esta parece muy larga, mejor me voy, es la única que haré (creo)

Besitos. ʕ*ノᴥノʔ♡

Dulce Pez «FRERARD»Where stories live. Discover now