𝗰𝗮𝗽𝗶𝘁𝘂𝗹𝗼 díez

12.4K 1.8K 266
                                    

𝗽𝗼𝘃 𝗼𝗺𝗻𝗶𝘀𝗰𝗶𝗲𝗻𝘁𝗲

Koda se quedo unos instantes sumergido en sus pensamientos mientras mantenía la mirada en el frente, observando cómo el agua desbordaba del tejado del kiosco, si todo lo que _____ le conto era verdad, entonces debía avisar a las autoridades o cuando menos ir con su familia.

"¿No quieres ver a tu papá?" la pregunta salió de golpe y Koda no supo que hacer cuando el felino entre sus brazos se movió con brusquedad entre la manta.

" ( No lo se ) " murmuro, esperando encontrar alguna posición que le hiciera sentirse seguro o al menos lo suficiente tranquilo.

Era verdad que apenas conoció a Koda, pero aquel chico le transmitía una tranquilidad que le hacía estar a punto de regar la sopa hasta mancharse las patas.

" ( No estoy seguro, estoy bien como estoy ) "  guardo silencio, meditando en sus propias palabras, desde hace un tiempo que aquella idea no dejaba de rondar su cabeza.

¿De verdad quería volver? 

" ( Me tratan muy bien en casa, me divierto con ellos, se han vuelto como mi familia ) " el felino levanto la cabeza para poder mirar con atención a quien le escuchaba.

Koda no entendía del todo y no podía esperar a hacerlo, si su nuevo amigo se encontraba mejor entre aquella familia, entonces no habría de que preocuparse, después de todo el no podía obligarlo a hacer algo que no quería y aun que su sentido de responsabilidad le decía que necesitaba avisarle al padre, el estudiante tenía todas de perder, porque... No puedes llegar a casa de un hombre que busca a su hijo y decirle 'Señor, este gato es su hijo'

" ( Puede parecerte una locura, por que ahorita estoy todo mojado, en el frio y nadie viene a buscarme ) " soltó una pequeña risa mientras recordaba aquellos momentos que había pasado junto a Kurogiri, Tomura y de vez en cuando Sariki " ( Pero ellos son las personas más amables que he conocido ) "

Cuando Koji sintió unas patitas recargándose en su pecho, bajo la mirada al felino de ojos agua, reconociendo al instante aquella mirada que desbordaba de alegría, cariño y agradecimiento hacia aquellas personas que le habían adoptado.

Aquel felino había creado una conexión con sus salvadores que podía jurar, lucharía por mantener hasta su último aliento.

Koda lo sabia mejor que nadie, porque cuando el ayudaba a rescatar animales de la calle y mientras su recuperación avanzaba, era la misma mirada con la que los animalitos observaban a aquellas personas que les ayudaban.

"Si quieres quedarte con ellos, entonces está bien" aquella felicidad que le transmitía era contagiosa, porque antes de darse cuenta ya estaba sonriendo, deseándole lo mejor a su nuevo a migo.

"Si quieres quedarte con ellos, entonces está bien" aquella felicidad que le transmitía era contagiosa, porque antes de darse cuenta ya estaba sonriendo, deseándole lo mejor a su nuevo a migo

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
𝗨𝗻 𝗴𝗮𝘁𝗼 𝗽𝗮𝗿𝗮 𝗧𝗼𝗺𝘂𝗿𝗮  ▎Tomura ShigarakiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora