⚡28. Un nuevo comienzo⚡

3.1K 333 369
                                    

—______, ¿podemos hablar?— Kaminari se sentó frente a mi.

Alce una ceja y me crucé de brazos al verlo frente a mi, sus manos estaban sobre la mesa adoptando una actitud casi despreocupada.

—La biblioteca es un pésimo lugar para hablar.

—Venga, Tigre— dijo levantándose para tomar mi mochila. —Necesito hablar urgentemente contigo.

Deje salir un largo suspiro antes de ponerme de pie y comenzar a caminar hacia la salida, todos nuestros encuentros después de la ruptura habían sido tensos y a la defensiva, evadirlo por siempre no serviría de nada  así que lo mejor sería mostrar bandera blanca.

El aire fresco me revolvió el cabello. Kaminari se recargo en la primera pared que vio libre y fijo sus iris amarillos en mi.

—Bien, de que querías hablar— dije secamente.

—De nuevo te pido perdón, se que fui un idota y que lo heche a perder— empezó a hablar pasándose las manos por el rostro. Asenti ante sus palabras.

Si algo había aprendido en mis clases con tantos temas que se tocaban sobre el amor, fue que no estaba enamorada de Kaminari, claro que lo quería y me encantaba sentir ese éxtasis de emociones intensas que me provocaba cada vez que estábamos juntos, ese nerviosismo y la sensación de flotar eran placenteros, pero el no tenía la calma que siempre buscaba. Guardaría todos los recuerdos que tuve con el y los atesoraria en mi corazón, tanto buenos como malos me habían permitido tener experiencia dentro de un campo completamente desconocido para mi y siempre le estaría agradecida por ello.

—Mira Denki— dije tomándolo de las manos. —Si, eres un idiota, pero supiste abrirte camino entre mis defensas. No me enamore de ti pero te quise mucho..

—Me duele escuchar que me quisiste— dijo dejando escapar un jadeo. —Fui egoísta al exigirte algo que te tomaba tiempo, pero espero y podamos recuperar parte de nuestra amistad.

—Idiota— sonreí divertida sintiendo como un peso invisible se desvanecía de mi espalda haciéndome sentir ligera.

—Dime como quieras, al final por un breve tiempo fui tuyo— me dio esa característica sonrisa coqueta a la vez que me pasaba un brazo por los hombros.

La tensión entre nosotros se había disipado y ambos habíamos cerrado el ciclo de manera sana y civilizada. Kaminari estaba hablando sobre un evento de música y en algún punto perdí el hilo de la conversación en el cual solo asentía de vez en cuando para dar la impresión de que estaba escuchando. En el camino nos encontramos a Shinso que al vernos alzo al cejas para después teclear algo en su teléfono.

Para cuando caí en cuenta de nuestro destino Mina y Tsuyu estaban esperando en la puerta, apenas nos vieron acercarnos y una pelirosa se caerco furiosa seguido de la peliverde quien estaba a una distancia considerable de una Mina muy intensa.

—¡_______! ¡Eres tonta o que!— chillo plantandome la cara llamando la atención de las personas de los alrededores. —¡Cuando te engañan tienes que partirle la cara! ¡No regresar con el!

—No he regresado con el Mina— dije safandome del abrazo.

—Entonces...— aventuro Tsuyu.

—Quedamos como amigos— concluyó Kaminari.

Las chicas me miraron y soltaron un suspiro dando paso a una sonrisa. Mina abrazo a Tsuyu y a mi por los hombros para adentrarse al edificio dejando atrás a Kaminari y encontrándonos con Bakugo quien al parecer iba de salida.

Con pesar nos dejamos caer en los sofás escuchando la discusión que tenían Kirishima y Sero sobre que tipo de lucha era mejor, rei divertida al ver como Mina entraba en la conversación y me recargue en el hombro de Tsuyu quien daba ligeras palmadas a mi pierna.

—¡Tigre!— el grito de Kaminari dejo en silencio a la sala. —¡Ya se quien es el chico de las flores!

En cuanto pronunció esas palabras todos nos giramos para mirarlo.

—¿Quien es?— pregunte.

—No te puedo decir— dijo con una sonrisa burlona.

—Apuesto a que se lo a inventado— acusó Sero levantando una ceja.

El rubio negó enérgicamente con la cabeza y se llevó la mano derecha al corazón a modo de juramento.

—Promesa de boy scout.

—Ni siquiera fuiste boy scout— dijo Mina como si fuera lo más obvio.

Sero choco las palmas con Mina a modo de festejo entre risas, Kaminari quien no se veía muy contento por ser el centro de las burlas los miro con ojos  acusadores y les dio por completo la espalda a sus amigos para centrarse en mi.

—No puedo decirte quién es, pero pronto lo sabrás, aún queda una flor— se apoyo en sus cuclillas para quedar a mi altura. —No hagas planes para San Valentín, que ya tienes una cita con tu admirador.

Me guiño un ojo antes de salir con una sonrisa triunfal en los labios, Tsuyu lo siguió con la mirada hasta que lo perdió de vista y después posó sus ojos en mi con las cejas alzadas, sabia lo mismo que ella así que me encogi de hombros a modo de respuesta. Si bien todos los acontecimientos del di habían sido extraños, que Kaminari supiera la identidad de aque chico y que estuviera feliz por que lo conocería y su discurso de hace un rato parecía tan irreal, pero viniendo de él, todo podía pasar.

—Pensé que ustedes dos habían vuelto— dijo Kirishima rompiendo el silencio que había dejado la ausencia de Kaminari.

—Solo somos amigos, supongo— dije no muy convencida de mis palabras.

—Que pasada— susurró Tsuyu con un dedo en los labios.

El grito de emoción de Mina nos hizo girar a verla con rapidez, sonreía de manera boba y tenía su cabeza apoyada en sus manos, dejó salir un largo suspiro que pareció que en cualquier momento se desinflaria.

—Quien lo diría, ______— dijo entre suspiros. —Que tendrías una historia de amor tan emocionante, como si fuera una película o novela romántica.

Comenzo a aplaudir efusivamente con un brillo en los ojos, Tsuyu y yo reímos al ver a Mina perderse en sus pensamientos.

—Solo dices tonterías Mina, ¿a que si Tsuyu?— dije poniéndome de pie.

—En esta guerra soy imparcial— Tsuyu se libró del pequeño conflicto encogiéndose de hombros al mirarnos a ambas.

Le mostré la lengua de manera infantil antes de encaminarme para salir a dar un paseo. Mi cabeza daba vueltas con los últimos acontecimientos. La tarde había comenzado a caer pintando el cielo de colores rojizos contrastando con algunas nubes grises que marcaban el invierno, inhale suficiente aire cerrando mis ojos dejando que mis pulmones se hincharan por un momento antes de dejar salir una sonora exhalación.

No podía evitar pensar en la cita que Kaminari aseguró que tendría en san Valentín, ¿cómo era posible que el conociera al chico de las flores antes que yo? De alguna manera me resultaba un tanto extraño que diera con el ya que Kaminari no es reconocido por su inteligencia para desenmarañar asuntos indirectos.

En unos cuantos días tanto misterio llegaría a su fin.

El Miedo De Escogerte (Denki Y Tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora