Una mate para el Alpha ©

Parte 39

Llegamos a la casa, Joan baja del auto le doy las llaves de la casa para que entre, abre la puerta y me regresa las llaves, se despide de nosotros entrando a la casa, Edwin pone en marcha el auto.

Nikki - ¿a dónde vamos a cenar?

Edwin - tu dime a dónde quieres ir

Nikki - no quiero un restaurante fino.

Edwin - ¿en donde entonces?

Nikki - quiero hamburguesa

Edwin - okey

Pongo mi mano en su pierna y él sobre mi mano pone la suya, me sonríe al igual que yo.

Edwin - amor después de la presentación nos iremos a vivir a nuestra casa

Nikki - okey, mañana a media noche mi padre y yo saldremos de casa ya que será el aniversario de mi madre.

Edwin - okey amor, se puede saber a ¿dónde van?

Nikki - aún no sé, pero en México íbamos al cementerio para llevarle Flores, pero esta vez quiero algo diferente

Edwin - ¿Cómo qué?

Nikki - linterna voladora

Edwin - suena bastante bien amor

Nikki - pero yo la quiero hacer

Edwin - me parece bonito detalle para tu madre

Nikki - gracias amor, pero no sé si a mi padre le guste la idea - mi padre en esos días se pone triste, hay en ocasiones que lo escucho llorar por las noches.

Edwin - yo sé que sí, es una manera muy bonita de demostrar tu cariño hacia la persona.

Nikki - solo espero que mi padre no se deprima, siempre que se acerca esta fecha o cuando regresamos del cementerio en las noches llora.

Edwin - para nosotros los lobos perder a nuestra mate es muy difícil hasta doloroso, es como una muerte silenciosa.

Nikki - oh vaya sí que es fuerte.

Edwin - amor si no les molesta me gustaría acompañarlos

Nikki - no creo que a mi padre le incomode, me parece bien amor - él asintió.

Al llegar al lugar estaciona el auto apaga el motor y baja del auto lo más rápido posible, antes de que yo abra la puerta él la abrió primero, me extiende la mano para ayudarme a salir del coche.

Estando afuera siento la brisa del aire en mi rostro, cierro la puerta del auto atrás de mí, Edwin y yo entre lazamos las manos mientras caminamos entre los coches.

Yo lo sigo porque no sé a dónde me trajo, solo sé que es un estacionamiento porque hay muchos autos, mientras más avanzamos puedo ver hacia dónde vamos.

Hasta que estoy más cerca puedo ver el lugar de comida rápida con un letrero que dice "Burger King", son muy pocas veces que como en este lugar, cuando mi madre me llevaba en México.

Al llegar al lugar Edwin abre la puerta y yo entro, miro el lugar hay algo de gente, algunas mesas están ocupada por familia, parejas y amigos.

Salgo de mi pequeño transe cuando Edwin me agarra de la mano.

Edwin - vamos amor para que veas que quieres - yo asentí.

Vamos a una barra donde la gente hace cola para hacer su pedido y le entregan su orden, Edwin y yo nos ponemos adelante de dos chicas que al vernos más bien a Edwin se lo comían con la mirada.