Ella es del Alpha [Hermanos Miller] TERMINADA

Capitulo 27_New Versión (FIN)

* * * * * * * * Capitulo 27 * * * * * * * *

CLAUDIA

Desperté del trance cuando nos encontramos a las afueras con Jack, Tania y Eduard. Cambiamos de carro y nos dirigimos al hotel del gran Alpha.

Escuche que mi transmisión había puesto al mundo de cabeza, miles de protestas en todo el mundo habían sido organizadas en las pocas horas. El gobierno principal se encargó del arresto de los miles de políticos metidos en tal tráfico, y pronto destruyeron el DCI. El gobierno mundial tuvo una reunión de emergencia donde participarían los lideres más importantes de cada especie.

Zack tubo que partir rápidamente al igual que el gran Alpha. Pronto estaríamos volviendo a la República para descansar.

Eduard se comunicó con Blake y sus allegados, para decirme donde estaba mi madre, pasaríamos por ella esta tarde.

—Tienes que enfocar tu energía, y concentrarla para sanar tus heridas— Farfulló Tania muy molesta — Creo que eres la peor estudiante que tuve

—Soy la única—Recalque y respiré profundo.

Era su manera de quererme o al menos eso quería creer. Tenía que curar todas mis heridas antes de ver a mi mamá o si no se desmayaría.

Luego de practicar toda la mañana bajamos a comer. Escogí un vestido floreado después de ver que no tenía ninguna cicatriz y partí junto con Eduard hacia la frontera de la República con el Capitolio.

Al llegar mi madre se encontraba haciendo artesanías junto al grupo de exploradores, Blake no estaba puesto a que también era un líder de su organización.

Mi madre se despidió de las amigas que había hecho y Eduard le devolvió los recuerdos y borró los recuerdos alterados. Junto con ella volvimos a la República.

Supe que el detective Hamson había sido arrestado al igual que el fiscal, y el comandante de la policía.

Con mamá ordenamos l acasa y limpiamos el lugar, Emily había dicho que volverá en unos días puesto a que había encontrado a su pareja dentro de los de la manada del Capitolio.

Reemplazamos las cortinas y sacamos el polvo de todas las habitaciones. Mamá se disculpó por su obsesión al trabajo después de la muerte de papá, tema que siempre había evitado mencionar.

Todo estuvo tranquilo hasta que un invitado inesperado llegó a la puerta de la casa.

—Yo abro — Mencione saliendo de la cocina y dirigiéndome a la puerta

Ya era muy noche, Zack y los chicos no vendrían hasta mañana. ¿Quién podría ser?

Abro la puerta y enseguida retrocedo al ver el rostro. Mis pies tambalean un poco por el susto

—T-tú... ¿Cómo escapaste?— Mi frase apenas y acabó

—¿Así se saluda a la persona que cuidó de ti en ese lugar?—Cuestionó con una sonrisa mientras sostenía una pistola en su mano.

—¿Claudia, de quién se trata?—Dijo mi madre desde la cocina

—Una amiga, nada importante— Mencioné tratando de sonar natural. —¿Qué es lo que quieres? —Me dirigí hacia ella.

Jesse estaba parada en mi puerta, traía la pistola doble que solía llevar al patrullar el pasillo. Aquella que le vi disparar una vez. Demasiado rápido para esquivar.

—Luces tan pálida, querida — Musitó mientras se adentraba a mi sala— Para alguien que no perdió nada esta noche. Yo por otro lado lo perdí todo.

La observé con detenimiento, quizás podría aprovechar un descuido.

—Me educaron desde pequeña para dirigir la organización, entrené mucho y leí un sin fin de libros; jamás tuve una relación sentimental ni siquiera con los que me criaron —

—No deberías justificar tu odio — Dije acercándomela, pero rápidamente ella se puso en guardia.

—Tienes razón, solo vine aquí a conversar y quizás a despedirme. Por primera vez y única vez en la vida me gustaría elegir.—

Salió de mi casa tan pronto como entro, no sé si era preocupación o lástima; pero no podía dejar de pensar que estaría haciendo, o a qué se referían sus palabras.

Pero comprendía por qué no simpatizaba con nadie, porque a ella le habían hecho pasar lo mismo haciéndole creer que era natural tales acciones.

Me quede a dormir en la sala, aunque no hubo rato en el que pestañee largo tiempo, el sueño se había ido; y tan pronto como la luz del sol entro en el salón encendí la televisión.

No pasó hasta medio día que hallaron el cuerpo de Jesse, se había suicidado aventándose del edificio; en su carta decía que al fin ella había cumplido su sueño de volar y elegir. Pero la gente seguía haciendo otras suposiciones, diciendo que la policía le estaba encubriendo o que había fingido su muerte.

—¿Te vas a quedar en el sofá tirada?— Dijo Zack a quien no había escuchado entrar

—Le abrí yo, parecías muy metida en tus pensamientos—Dijo mi madre

—Mi manada organizaron una fiesta de bienvenida. ¿Vamos?— Mencionó con una sonrisa mientras mi madre ya estaba toda lista cerca de la puerta

—Déjame cambiarme, no puedo ir así— Rechine subiendo rápidamente a mi habitación.

Subí y busque algo cómodo para caminar en el bosque, junto a una casaca semi abrigadora.

—¿Terminaste?—Interrumpió Zack de nuevo

—¿Cómo diablos abriste la puerta?—Grite muy histérica viéndolo tan tranquilo

—Al parecer se salió la perilla —Dijo sin ningún arrepentimiento de haber hecho eso.

—¿Qué? Destrozaste la perilla—Exclamé al ver la consecuencia de sus actos —No deberías hacer eso — Reprendí

—Pero se salió, lo remplazaré mañana— Mencionó al fin y bajamos

Mi madre se adelantó junto con Jack; ya que al poco tiempo Jack le había agarrado cariño, también desearía que la mama de Zack, Jack y hasta de Issac siguieran en este mundo. La vida se pasaba más rápido que el aleteo de una mariposa.

—¿En qué piensas?—

Sujetó Zack mi mano entrelazando nuestras manos

—En la vida que tengo; a partir de ahora quiero gozar de estar viva, para no tener ningún arrepentimiento...

FIN