-¿Qué sucede, _____? La morena cerró la puerta después de que el azabache entrara al aula, se sentó en el escritorio cruzando las piernas lo más sensual que pudo y con un movimiento del dedo índice hizo que esos ojos verdes esmeraldas se acercaran unos cuantos pasos a ella. -Dime ya, de qué quieres hablar conmigo -¿En serio no lo has notado? -¿Qué no he notado? - preguntó, empezando a ponerse nervioso - Lo acercó a ella, jalándolo por su corbata escarlata y dorada, dejando solo unos centímetros de distancia entre ambos, y con sus labios casi juntos, ella le susurró. -Que te deseo, Harry.