Todo lo que soy

Treinta y cuatro

La historia de la revelación del tenis español

Anoche pudimos ver a la jovencísima navarra, Natalia Lacunza, abriéndose para todo el país. La reciente ganadora de la Fed Cup y también ganadora de Grand Slam, era una gran desconocida para todos los aficionados a este deporte. Más allá de su demostrada rivalidad con nuestra número uno, Alba Reche, con la que, recordamos, inició un conflicto personal tras Wimbledon. Poco se sabía de la vida de la número dos del equipo español sin embargo, anoche pudimos saber quién es.

Natalia Lacunza, nacida en Pamplona -veinte años- es la hija mayor de uno de los empresarios más conocidos de España. Mikel Lacunza es dueño de la mayor bodega del país, vende vino a más de cien países y, muchos consideran sus grandes reservas como los mejores del mundo. Pero lo que no sabíamos es que su "gran reserva", su hija mayor, la que ya no es una promesa sino que está destinada a ser una de las mejores tenistas españolas, no recibe el apoyo familiar que muchos podríamos imaginar. Al parecer, y según ella misma manifestó, a su padre "no le hace gracia", pero ya sí que parece que sigue lo partidos de su hija. No extraña el cambio de parecer, pues Natalia en solo ocho meses ha logrado varios trofeos que muchos tenistas profesionales aún sueñan con conseguir.

La navarra reconoció que tiene el apoyo de sus amigos, sus dos hermanos menores y sus abuelos, pero asombró a todo el país cuando admitió la mala relación que mantiene con la mujer de su padre, María Sanabdón, la que según reveló no es su madre biológica. No sabemos cómo habrán sentado estas palabras a la mujer del empresario, imaginamos que, por el tono de la tenista al contar su historia, nada bien.

Admitió, entre otras cosas, que su verdadera madre la abandonó y que hace realmente poco que conoce estos hechos. Así como, no ser la única que disponía de esta información, lo que nos hace sospechar que el motivo de su entrevista ha sido el temor a que todos estos datos saliesen a la luz de manera errónea.

Al hablar de su mala relación con su compañera de equipo, Alba Reche, reconoció su mal comportamiento con ella y afirmó que ya todo estaba bien entre ellas: "Me da algo de vergüenza hablar de ello, no me comporté bien con ella y hace tiempo que aceptó mis disculpas", expresó sobre el tema y terminó agradeciendo al equipo de la Fed Cup: "Agradezco mucho a Anabel Medina por la oportunidad que me dio, y al resto de mis compañeras, Alba, María y Lara, con las que he aprendido mucho".

Desde aquí nos alegramos de esta sincera entrevista y le deseamos muy buena suerte en el inicio de año, que comenzará con el OPEN de Australia.

¿Veremos la buena relación que dice mantener con Alba Reche?

¿Aparecerá su madre biológica, ahora que la navarra ha contado su historia?

¿Su familia contestará de alguna forma a estas declaraciones?

No podemos esperar para saberlo."

NATALIA POV

-Lo has leído, ¿no?- preguntó Ici dejándose caer a mi lado en el banquillo.

Llevaba tres horas entrenando sin parar, y era hora de mi descanso. El día era especialmente frío, acorde al mes de diciembre. Las Navidades estaban a la vuelta de la esquina y, por una vez, deseaba que llegaran.

Para entonces debía estar en Australia, adaptándome al clima y ultimando los entrenamientos para el comienzo del primer torneo del año.

No voy a mentir, también tenia muchas ganas de ver a Alba, que también estaría allí. Según ella misma me había contado en nuestras innumerables charlas nocturnas desde que se había marchado a Elche, normalmente no asistía a los pequeños torneos de preparación de los Grand Slam. No necesitaba el puntaje para tener un mejor cuadrante en el torneo, al ser número uno se libraba de jugar los dos primeros partidos.