Two in me - Jashlem (Terminada)

Capítulo 30

Narra Bella: 

Abrí los ojos en aquel momento para asegurar que no era un sueño. Pero no, hay seguíamos en aquella cama y nuestra ropa estaba esparcida, tuve ganas de levantarme y tomar la camiseta de Jean para olerla y sentir su perfume. Cuando me di cuenta que no lo necesitaba pues el dueño de ese perfume estaba acostado abrazando mi cintura con su carita de dormido y su pelo esparcido por su cara, me di vuelta para verlo mejor y no me contuve a acariciar su cabello, sólo me deje llevar.

En un momento pude ver en su cuello las marcas que demostraban lo que habíamos hecho ayer, las marcas de amor.

Jean me amaba y yo a él, perdidamente y alocadamente, ese hombre era mi inicio y mi fin. Si, el es. Mi vicio, mi dueño, mi paraíso en el infierno.

Apenas me levanté un poquito y empecé a besar esas marcas, cuando note que se estaba despertando.

Jean: si cada vez que hacemos el amor me despiertas así, habrá que hacerlo para siempre *dijo con su voz ronca*

Bella: si es una orden, tiene que ser más claro *le susurré a su oído con segundas intenciones*

Segundas intenciones que no pasaron desapercibidas para Jean, este se levantó y me llevo a su regazo, pego su boca en mi oído y dijo:

Jean: no acostumbro a pedir señorita Roberts, claramente si fue una orden *dijo de manera prepotente y arrogante, lo cual me hizo estremecer de pies a cabeza*

Jean comenzó a pasar sus manos por mi espalda mientras besaba mi cuello, y con eso ya me estaba volviendo loca.

Reí en ese momento al acordarme lo que habíamos hecho ayer, y no sólo ayer, si no todo el fin de semana. Entonces Jean paro y me miro confundido.

Jean: le estoy cosquillas señorita Roberts? *Dijo tan lindo que me hizo reír de nuevo*

El me miro con cara de pocos amigos, porque había cortado su momento sexy, entonces decidí provocarlo un poco.

Bella: que señor León, perdió su momento sexy? *Dije sarcásticamente*

Jean: está jugando con fuego señorita Roberts

Bella: no le tengo miedo, vamos, muéstrame lo que sabes *provoque arrastrando cada palabra de la forma más atractiva que pude*

Pude ver el fuego en sus ojos, y en realidad si sabía que iba a salir quemada, pero yo esperaba eso, quería que me toque. Había deseo en sus ojos, que ahora tenían un tono oscuro, oscuro que daba un aire intenso en ese momento. Nos quedamos mirándonos, en una batalla perdida para mi, ya que al instante desvie mi vista a sus labios atractivos y carnosos. Casi no tuve tiempo de cerrar mis ojos porque Jean tomo mi cuello y me arrastró a un beso abrumador.

El me besaba con furia, con excitación, con fuerza, y yo me perdía a cada segundo. Gemi cuando el comenzó a besar mi cuello, acción que claramente me dejaba al límite y el lo sabía, el estaba jugando pero yo también sabía jugar y muy bien.

Pero entonces su teléfono comenzó a sonar.

Jean: mierda! *Dijo demostrando su irritación por la interrupción*

Jean me miro como pidiéndome disculpas yo solo asentí y me baje de sus piernas 

Me levanté para tomar la camiseta de Jean y ponermela, ya que Jean se levantó con la sábana alrededor de su cintura.

La conversación parecía ser triste.

Camine hacia el y sin que lo notara lo abracé por detrás, sintiendo su delicioso perfume invadiendo mis fosas nasales y sentí que su cuerpo se relajo, me quedé allí mirando el jardín de fuera.