Two in me - Jashlem (Terminada)

Capitulo 39

Narra Bella:

¿Porque a la vida le gusta cambiar constantemente? Cuando te empiezas acostumbrar a la situación, cambia por completo cuando menos lo esperamos. Dejando nuestro mundo irremediablemente destrozado. En un día, Jean destilaba odio y rencor, y ahora el estaba acostado en mi cama en un sueño profundo.

Loco...

Negué mentalmente y sonreí mientras miraba su expresión serena mientras dormía. Le acaricié su cabello en un cariño tranquilo, sintiendo al hombre suspirar cómodamente.

Bella: En que estaba pensando cuando me involucré contigo?

Le susurré a Jean que ni siquiera escuchó. Deslice mi pulgar sobre la piel de su cara, observando lo perfecto que se veía dormido. Con certeza Jean Carlo León es una de las obras más bellas jamás hechas.

"Estás siendo demasiado estúpida Bella"

Me dije a mí misma en mis pensamientos. Pero fue en vano, no podía disminuir la intensidad de lo que sentía por este tipo era enloquecedor cada vez el robaba otro pedacito de mí. ¿Esto podría ser normal? Si era normal, no podía decirlo. Yo solamente lo sentía.

Sentía una necesidad de estar cerca, de sentirlo conmigo. De oír su voz, de recibir su mirada penetrante, y sus cariñosos besos. Querer a Jean era como un laberinto sin fin, nunca se sabía cómo parar. Una especie de frenesí en sentimientos. Yo estaba perdida, porque el destino trató de unir a dos personas las que probablemente nunca iban a encajar, o incluso podrían estar. Sonreí y continué con mis caricias cuando el se movió lentamente, acurrucándose en mis brazos en busca de calor. En el instante en que su cuerpo se unió al mío, detuve mis caricias, recibiendo una queja casi inconsciente.

Jean: No pares, no... *susurró el somnoliento haciéndome sonreír*

Bella: Pensé que estabas dormido

Jean sonrió débilmente, con un suspiro fuerte.

Jean: me quede despierto por ti

Me mordí los labios y sonreí. Su embriaguez lo dejaba cariñoso y manso, mostrando a un Jean totalmente rendido. Muy diferente de lo que estaba acostumbrada yo.

Bella: Me detendré

Jean: Entonces ya voy a dormir, Besh. Solo continúa... 

Jean susurró juntando más mi cuerpo con el de el, poniendo su cara en el hueco de mi cuello. No demore mucho para sentir sus labios ir en contra de mi piel en un beso calmado. Cerré los ojos sintiendo su mano deslizarse lentamente sobre mi abdomen con caricias y una pizca de picardía.

Bella: Jean..  

Jean: quieta Besh. Solo son caricias

El susurro subiendo con su mano hasta mi pecho, por encima de la tela de la ropa que llevaba. Dejo la mano inmóvil por un momento, hasta que poco a poco comenzó a masajear.

Bella: Estás borracho. Para.

El sonrió y se mordió el labio.

Jean: Sólo un poquito. Déjame continuar, tu amas mis caricias.

Entrecerré los ojos hacia el y sonreí. Lo que sólo dio más ganas para hacer que continúe con sus caricias. Jean dejó que sus manos se adentraran en la sudadera que llevaba, deslizando sus dedos a través de mi abdomen calmadamente. Sus labios se deslizaron tranquilamente por mi cuello, forzando a mi cuerpo pedir por más.

Bella: Por qué no puedes estar tranquilo?

Jean: No se puede estar quieto con una mujer como tú a mi lado Bella