Una invitación a cenar

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Terminó el desfile y ahora todos se encontraban disfrutando de la música de Mario Duarte. Betty estaba celebrando con sus amigas del cuartel, se sentía tan orgullosa de ellas, la gente presente no hablaba de otra cosa más que de la icónica pasarela protagonizada nada más y nada menos que por el cuartel de las feas. Todos estaban encantados con las chicas y los diseños. Los medios y la prensa no dejaban de entrevistar a las muchachas.

Hugo Lombardi se vio obligado a aceptar que la colección protagonizada por Betty fue un gran éxito.

Betty está muy feliz y tranquila, tomándose una copa de champaña. De pronto siente que alguien le toca el hombro, ella voltea de inmediato y se sobresalta al ver a Daniel.

—Ay doctor, me asustó.

(Daniel se acerca a Betty con una media sonrisa)
—No quería asustarla. Solo vine a felicitarla por su éxito. Brindemos, ¡salud!. (Daniel levanta su copa y la choca con la de Betty, manteniendo una media sonrisa en su rostro)

—Gracias Doctor, bueno si eso es lo que quería decirme, con permiso. (Betty se empieza a sentir incómoda y trata de alejarse, pero Daniel no la deja)

—Doctora espere un momento. (Se acerca aún más, bloqueando su camino)

—¿Qué pasa doctor?

—Tengo algo importante que decirle, pero no aquí. (La mira fijamente y espera su respuesta)

—¿Sobre qué?.

—Es algo personal.

—¿Personal?, disculpe pero si lo que tiene que hablar conmigo no tiene que ver con ecomoda yo....

Daniel la interrumpe.

—Si, tiene que ver con ecomoda.

—Bien, entonces mañana hablamos eso en la oficina.

—Si me lo permite, quisiera invitarla a cenar conmigo esta noche. Para celebrar su éxito y conocernos mejor, doctora. Además, tengo algo importante que discutir con usted. ¿Acepta mi invitación?

(Betty se sorprende por la invitación de Daniel)
—No iré con usted a ningun lado, si quiere hablar de la empresa, hablamos mañana.

—Mañana no puedo, tengo otros compromisos muy importantes que atender. La espero en el Baluarte. (Dicho esto se aleja lentamente mientras bebe un sorbo de champaña).

Beatriz se queda pensando en la actitud de Daniel, ella ni siquiera le había dado una respuesta y aun así la citó. La verdad le parecia muy raro que la invitara a cenar a un lugar tan lujoso como el Baluarte, era obvio que algo estaba tramando.

Aura María se acerca hacia Betty y la empieza a interrogar, ella estaba observando todo.

—Ay mija. ¿De qué tanto hablaba con el doctor Valencia?

(Betty mira a Aura María con una sonrisa)
—Solo estábamos discutiendo asuntos de la empresa, nada más.

—¿Solo eso?

—Ay lo que pasa es que me invitó a cenar.

—Uy Betty, para mí que usted le gusta al doctor Valencia. (Ríe emocionada porque su amiga pueda tener algo con Daniel Valencia).

—Ay Aura María, no diga bobadas, cómo cree que yo le voy a gustar a un hombre como Don Daniel. El doctor Valencia es un tipo muy dificil de tratar y además no me invitó por gusto, lo hizo porque quiere hablar conmigo sobre la empresa.

—Ay mija, pues es que mírese nomás, desde que usted regresó así de triple mamita, los hombres están que babean por usted y el doctor Valencia no es la excepción.

—¿Qué insinúa?

—No nada... Ay Betty, lo que pasa es que usted solo tiene ojos para el ogro ese de don Armando, qué tal, él ahí bien a gusto con la venezolana esa, mientras que usted aquí sufriendo. Betty, usted tiene que abrirse a la vida, conocer nuevas personas, nuevos hombres, no todo el mundo gira alrededor de don Armando. Y le voy a decir una cosa, a mí el doctor Valencia no se me hace tan malo cómo dicen, tiene lo suyo, es un triple papito, tiene plata, es de buena familia, y yo creo que en el fondo él tiene algo bueno.

—Pero ha de ser muy en el fondo jja jja, porque desde que lo conozco solo se ha dedicado a humillarme. De todas maneras voy a ir a ver que quiere. Aura María.... Por favor si Nicolás, mi papá o Doña Catalina, le llegan a preguntar por mí, usted dígales que me fui a la empresa, pero no les diga para qué, solo dígales que me vió salir. Si mi papá se entera que me fui con el doctor Valencia me mata.... Bueno, hasta mañana. (Se despide de ella de beso en la mejilla). Despídame de las demás chicas.

—Hasta mañana Betty y usted fresca, no se preocupe que de aquí no sale nada. Y recuerde que ahora usted es la jefa, así que no se preocupe si no llega a la oficina jajaja.

—Aura María qué cosas dice, ay bueno chao.

—Chao.

Betty se dirige al Baluarte y entra en el restaurante elegante. Busca a Daniel con la mirada, sintiendo una mezcla de curiosidad y cautela. Daniel Valencia está sentado en una mesa, luciendo impecable con su traje. Al ver a Betty, levanta la mirada y pone su típica sonrisa poco amigable.

—Buenas noches doctor.

—Buenas noches Beatriz, pensé que no vendría, llegó 5 minutos tarde, creí que era más puntual.

(Betty mira a Daniel con una sonrisa falsa)
—Agradezca que no lo dejé esperando toda la noche jja jja jja.

—Tome asiento por favor doctora.

Mientras tanto Armando observa a Betty y Daniel desde lejos, con una mirada desconfiada. Cuando la vió salir, él salió tras ella y se montó a su carro para seguirla, no le importó dejar a la venezolana ahí sola, lo único que quería era averiguar qué se traía Betty con Daniel.

LOVE TO HATE MEWhere stories live. Discover now