CAPÍTULO 4

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Después de ese incidente se pasaron el resto del día juntos comiendo pizza. Noelle por su lado se sentía desanimada, nunca se había sentido tan inútil, aunque en ese momento lo mejor era pasar tiempo con sus amigos, quería tiempo sola. Salió al patio y se tumbó mirando las estrellas, al menos eso la relajaba. En ese momento hubiera deseado tener a Bokuto y Nishinoya a su lado, ellos si sabían cómo animarla, les echaba de menos.

-Todo bien? –una voz la saco de sus pensamientos, a la vez que esa persona se sentaba a su lado.

-Eh? Si... solo que no he podido ser de mucha ayuda hoy –se sinceró la chica.

-Sabes que a veces hay maldiciones contra las que no se puede hacer mucho, no le des más vueltas –la animo el chaman.

-Eso es fácil para ti decirlo, puedes con todo –le recrimino la morena.

--Por muy fuerte que pueda ser alguien, a veces si se piensan bien las cosas te puede ganar alguien más débil. No siempre se trata de fuerza –intento animarla Gojo

-Lo se... pero no puedo evitar sentirme inútil, ni un brazo le he podido quitar a esa maldición mientras Inumaki ha hecho lo imposible por detenerlo... incluso Kamo y Fushiguro lo han dado todo y han salido mal.

-Estoy seguro que también has hecho todo lo posible por ayudar, no te preocupes más y vamos con los otros. Que dirían Bokuto y Nishinoya si te vieran así –la animo el mayor.

-Posiblemente darme un golpe en la cabeza y me obligarían a hacer alguna idiotez con ellos–se rio la morena

-Oye! Que lo hagan ellos no quiere decir que lo tengas que hacer tu! –le recrimino la chica por el golpe en la cabeza que le había dado el mayor.

-Si quieres podemos hacer el idiota –se rio el mayor.

-Mejor vamos con los demás.

[...]

Por la mañana todos los estudiantes se encontraban reunidos en el salón con Gojo quien les había informado de todo lo sucedido y les preguntaba si creían que debían seguir con el intercambio o no. Después de debatir y dar sus puntos de vista ante la competitividad de ambos grupos, decidieron seguir con el intercambio. Poco después aparecieron los dos directores para que se eligiera la última prueba, Yuji fue el encargado de abrir uno de los papeles de sugerencias, siendo esta competición de beisbol, sorprendiendo a todos, aunque era muy obvio adivinar de quien había sido la idea.

Después de haberse cambiado ambas escuelas se encontraban fuera junto a sus dos maestros jugando al beisbol. En ese momento en la banca de Tokyo se encontraban Noelle, Maki y Inumaki observando a sus compañeros jugar.

-Uff –soltó Noelle sin darse cuenta, al ver como Gojo iba con el pelo hacia abajo, sus gafas de sol y con camisa medio desabrochada haciendo de árbitro.

Desde el primer momento en que lo vio se le hizo muy atractivo pero cuando llevaba el pelo hacía abajo, para ella eso era otro nivel. En el fondo, a Maki y Nobara también se les hacía atractivo pero nunca al mismo grado que su senpai, además la de segundo año sabía que a la mayor no solo le parecía atractivo, sino que su forma de ser también la atrapaba, aunque la morena nunca lo admitiría pero sentía algo por su sensei.

-Calor? –se rio Maki por la reacción de su amiga.

-Mostaza? –dijo confuso Inumaki al ver que realmente no hacía tanto calor.

-No la escuches, es idiota.

-Oi! Noelle! Te toca batear –la llamo Yuji, cambiando posiciones con esta.

-No te pongas muy nerviosa –le guiño un ojo Maki a lo que la mayor suspiro.

-Mira y aprende –le respondió la morena mientras se colocaba en su sitio

Ikigai | Satoru Gojo x OCDonde viven las historias. Descúbrelo ahora