50

1K 93 11
                                    

TW⚠️: contiene temas que podrían ser sensibles sobre la salud mental.

『Ahora que me reconozco sin ti, no puedo existir

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Ahora que me reconozco sin ti, no puedo existir. Soy como un muñeco sin alma. Es diferente ahora, compensaré mis muchos errores. Te mostraré cuánto te necesito.

–GOT7, Last Piece

Rozó con las puntas de sus dedos su piel caliente. Estaba siendo demasiado consciente de su alrededor y de sí mismo, otra vez. Hacia mucho que no le ocurría esto tan frecuente, pero desde que se había separado de Seokjin, había regresado.

Tomó su celular y rebuscó, con una honda respiración, entre sus contactos. Si llamaba a alguien quizás se sentiría mejor.

Quizás.

Mejor no. No quería molestar a nadie.

Lo dejó a un lado con las manos temblorosas y se enderezó en la cama, se sentó llevando y abrazando sus piernas al pecho. Esto iba a pasar, siempre lo hacía.

Ahogó un sollozo en cuento el llanto se hizo presente, aún sabiendo que nadie podía escucharlo.

Estaba tan cansado de todo, quería desaparecer del medio y mantener un perfil bajo, quería abrazar a Seokjin y llenarlo de pequeños besos, quería hacer pijamadas con Jungkook, Hoseok y Jimin, quería... disfrutar su vida, dejar las presiones a un lado y vivir siendo dueño de sí mismo, sin contratos de por medio, sin una compañía que le dijera cómo actuar, qué decir, con quien salir.

Quería gritarle al mundo entero que estaba profundamente enamorado de Seokjin.

Con algunos escalofríos salió de la cama y quitándose toda su ropa se metió bajo la ducha, el agua caliente ayudó un poco a relajarse y disminuir sus lágrimas, mientras que el agua fría le ayudó a recordar que había más que sentir aparte del dolor tan familiar.

No supo cuánto tiempo se quedó bajo el agua, ni cuántas veces su mente repasó lo mismo, pero cuando salió y se vistió nuevamente, un sentimiento pesado inundó su pecho.

Aquí vamos otra vez. Pensó.

Pero el golpe nunca llegó, se calmó con respiraciones profundas y se acurrucó en su cama dispuesto a aprovechar lo que quedaba de sus horas de sueño. Sin ambargo, no pudo dormir. Ningún pensamiento salía de su cabeza, y al contrario, nuevos y peores entraban a ella.

¿Y si Seokjin había dicho eso de verdad? ¿Era lo que sentía?

Mandó aquellas dudas muy lejos cuando nuevas llegaron a él y no fue hasta que el sol empezó a salir que pudo cerrar los ojos, solo para despertar unas pocas horas después.

Si ya no hace vibrar a mi corazón, entonces así puede ser como muero en mi primera muerte.
–BTS, Black Swan

Hundred Miles | Jintae AUDonde viven las historias. Descúbrelo ahora