ღ Capítulo 6 ღ

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Tras dudar su siguiente paso, decidió únicamente retirarse el casco, asegurándose de que ni Greco ni Horacio le vieran debido a la lejanía. Tomó un largo respiro y notó como tenía muchos ojos posados sobre su persona, y claro, un ruso de dos metros no pasaría desapercibido, aunque por distintas razones.Para los pequeños allí presentes fue increíble ver a un señor tan gigante. - ¡Apuesto a que puede tocar el cielo con sus manos si se para en las puntas de sus pies!- oyó decir a un chiquito cerca suyo, cosa que le hizo soltar una risita. Por otro lado, las maestras que le quedaron mirando, probablemente tenían otras razones, que, para ser sinceros a Volkov le tenían sin cuidado.

Sintió un pequeño jalón en su pantalón, a la altura de su rodilla. Y al mirar abajo entendió que era llamado por aquel niño, era él, Julián. Volkov recordó su mirada llena de miedo y pena, con ojitos aguados de cuando estuvo en comisaría junto a sus hermanos, y sintió encogerse su frío corazón. Se agachó a la altura del pequeño y le dedicó una sincera y paternal sonrisa. -Hola Julián!-

El chiquillo pareció perder su habla, así como el color de su rostro. - C-Como sabes mi nombre señor?- Viktor se sintió avergonzado, pero no quería perder la oportunidad de acercarse al muchacho.

-Pues, Horacio me contó de tí- A este punto no supo qué agregar, puesto que la información que había recibido del infante no era alentadora y no tenía sentido mencionarla, sería una estupidez!

No obstante, tanta preocupación fue innecesaria debido a que Julián decidió continuar la conversación por sí mismo. -eres tú el comisario? El amigo de mi 'papi' Horacio?- El término usado por el pequeño para referirse al profesor le hizo quedar sin aliento. Comprendiendo lo importantes que eran mutuamente, inundándole de indescriptibles sensaciones y emociones.

- E-eh...sí, eso creo, soy el comisario- le sonrió tiernamente, y escuchó la feliz risa que soltó aquel alumno. -Mi papi Horacio dice que le salvaste, que eres un héroe! Cuando grande quiero ser como usted señor, y salvar a la gente- Viktor se acercó más al chiquillo, y a modo de secreto le comentó -Pues deberías ser también como tu papi Horacio, él es el verdadero héroe-
El pequeño no podía creer lo que oía, ¡Su 'papá' era un héroe! -Entonces cuando grande puedo también ser un héroe como ustedes?- preguntó con un brillo en sus ojos que no dejarían indiferente a nadie. Volkov asintió en silencio sonriendo, y de manera innata su mano se dirigió hacia el cabello del muchacho, dejando en él una caricia que, por simple que pareciera, significó demasiado.

Aquella caricia no sólo les unió por escasos segundos en un halo de cercanía y cariño, sino que dejó al borde de las lágrimas a un emocionado Horacio que observaba toda la situación desde la lejanía, sin dar crédito de lo que veía.

Volkacio AU - Teach me how to loveWhere stories live. Discover now