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El campeón orni siguió con las alas cruzadas levantando una ceja "¿Seguro de mi mismo? Siempre he sido el mejor, el mejor de todos en esta aldea, DE HYRULE" "seguridad en mi mismo..." las ideas se entremezclaban y la mirada paternal del patriarca que recordaba desde su crecimiento como el polluelo de nadie en la aldea le confundía.

Sacudió la cabeza queriendo evadir aquel tema "Recuerda, estás aquí por lo que ofreciste" apartó con cuidado el ala de Tyto.

-Como diga jefe, ¿Podría usar su casa como centro de reunión? Llame a todos los de la competencia de vuelo- decía cambiando el ambiente-Aunque no sean tan rápidos como yo, son lo suficientemente capaces para crear un sistema de mensajería- comentaba.

El patriarca entendía el debate interno del orni así que sólo se limitó a asentir con la cabeza -Lo que necesites muchacho- decía -Y también, necesito un mapa de hyrule, aún tienes aquel que solías mostrarme cuando me daba tutoría?- preguntó a lo que obtuvo de respuesta fue otro asentimiento con la cabeza por parte del viejo.

Media hora más tarde habían varios orni, hembras y machos con las armaduras ligeras de su especie esperando en las escaleras, Revali hizo pasar a unos cuantos.

En la casa del patriarca mientras los ornis se sentaban en pose de flor de loto con las miradas al frente; el campeón extendió aquel viejo mapa de Hyrule y con un carboncillo marcaba la ubicación de las torres como referencias en forma de cuadrado, armó 8 equipos de 14 voladores por cada uno; Dichos líderes de cada equipo cubrirían una región y los que estaban sentados frente a él mientras quienes esperaban afuera o seguían en las escaleras eran los miembros de esos diferentes equipos.

-Necesitamos distintivos para cada región de Hyrule, cada capitán ya sabe qué región cubrir- comentaba -Existen zonas de reconstrucción en estos diferentes puntos- decía señalando con un par de "x" -y se estima una mayoría de refugiados en estos- añadía mientras marcaba aquellos puntos con unas "o" -Necesito que cada equipo memorice o copie las ubicaciones, aunque primero se presentarán ante el rey Rhoam y la princesa Zelda, deben ya estar preparados para cubrir sus respectivas regiones- finalizó

-Gran Revali- levantó el ala uno de los capitanes, un orni de pluma negras, marcas maquilladas color blanco y cuentas aguamarinas en sus trenzas aunque resaltaba que de un lado había una especie de aro dorado bajo de una de las cuentas -¿Qué sucede Nill?- preguntó el campeón orni con su pecho involuntariamente inflado por aquel nuevo apodo - ¿Cómo podremos saber que volaremos seguros ?-

-No tienen certeza de eso- respondió inmediatamente -Los sheikah, soldados hylianos y algunos campeones nos dedicaremos a tratar de limpiar las áreas lo más posible, pero no podemos garantizar la vida o seguridad de cada uno, los elegí porque fueron los primeros lugares, volaron con esmero, valentía; Durante las ordas fueron los más organizados protegiendo a los orni que estaban en peligro, es por eso que les preguntaré una vez más... ¿Serán los capitanes de sus equipos?¿O van a rechazarlo sólo por temer a algo que ya han combatido?- dicho esto señaló a los capitanes con el carboncillo manchando las plumas de su ala.

Hubo un gran silencio, pronto uno a uno se fueron levantando con la mirada solemne -Aceptamos los puestos que el campeón orni nos ha dado- volvió a hablar aquel orni de plumas negras

-Por el pueblo Orni ! Por Hyrule! - exclamó entonces Revali -Por el pueblo Orni ! Por Hyrule!- siguieron a coro el resto de los orni levantando sus alas en puño.

En cuanto los capitanes fueron por sus equipos, Revali empezó a reunir a los refugiados que escucharon toda la conmoción, muchos se estaban quedando en una posada, otros fueron recibidos por familias orni más sociables y cálidas; A pesar del frío habían comprado o confeccionado sus propias ropas para aguantar el clima.

-Sólo será por un tiempo, Isha- escuchó un susurró quien parecía el capitán del equipo que había temido su seguridad, Revali volteó para encontrarlo hablando con una hyliana de cabellos rojizos que tenía trenzados sus mechones frontales con un par de plumas negras al final -Lo sé, pero por favor, ten cuidado Nill- decía la hyliana mientras se ponía de puntillas y posaba sus labios sobre el pico del contrario. El orni de plumas negras posó su frente contra la de su amada.

Las plumas significaban una sóla cosa, que eran compañeros, seguramente el aro era en realidad un anillo hyliano que ella le dió a cambio.

Incluso ella parecía haber recibido la aceptación del pueblo pues se despedían de la pareja con gestos leves de cabeza o palmadas incluido el comentario cariñoso proveniente de otro orni de que eran un par de tórtolos locos.

Revali miró asombrado aquella escena, había oído de distintos tipos de romances descabellados que surgieron durante el más de medio año de guerras incluyendo cuando surgió Ganon, que un soldado zora se enamoró de un arquero orni, que un goron se enamoró de una gerudo, pero presenciarlo fue como un bólido a las separaciones que tenía cada región.

"Al parecer la calamidad trajo más cosas que sólo desastre, eso es bueno" pensó intentando desacreditar el asombro que le había causado aquella interacción ajena; no era quién para juzgar, después de todo él nunca se había sentido atraído hacia las hembras del pueblo o alguna hembra en general.

Aún con esa imagen en mente empezó a reunir a los refugiados hylianos, en la plataforma de despegue -Acérquense, por favor- eran tan sólo un par de decenas, se abrazaban a si mismos, otros parecían ya haberse acostumbrado al clima, recibió un par de comentarios, muchos habían ayudado en la reconstrucción de puentes y accesos en Tabantha e incluso la caza, pasó lo mismo en aquella aldea que en el rancho al pie del lugar.

Sacó de su alforja entonces la carta de la región de Tabantha que ya había leído -Tengo un mensaje oficial de la princesa Zelda- decía mientras extendía la primera hoja del comunicado.

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Después de terminar el discurso, los refugiados empezaron a dispersarse, al fondo estaba la hyliana, compañera de Nill con ambas manos juntas, se acercó tímidamente hacia él -Disculpe, Campeón Orni, Escuché que Linky resultó ser uno de los campeones ¿Podría decirme cómo ha estado? -

Revali hizo todo lo posible por no reírse ante aquel apodo tan infantil -¿Linky?-

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El sol estaba escondiéndose entre las montañas y los árboles. La fortaleza de Hatelia constaba más de tiendas abandonadas que de la propia estructura destruida, Link puso todo el equilibrio en un pie e impulsado con la espada maestra en mano giró centrando toda su fuerza en el arma.

De un grácil giro arremetió a varios bokoblins plateados que le habían rodeado, bloqueó con su escudo un garrote con el que le atacaba el moblin que les lideraba para luego arremeter de vuelta.

Giros, bombas remotas, estoques, esquivar, la hilera de monstruos que fueron atraídos por comida abandonada del campamento estaba siendo reducida a pequeñas ordas, de las pequeñas ordas pasaron a ser unos cuantos y de unos cuantos pasaron a ser ningunos.

Link cayó de rodillas, estaba lleno de tierra, jadeando, el frío del atardecer hacía que se formaran nubes de vaho que salían de sus labios resecos; Después de recuperar su aliento vió como la luna ya estaba a punto de llegar al centro de aquella bóveda celestial, aún quedaba tiempo, llevó dos dedos a sus labios y dio un fuerte silbido, a lo lejos se escuchó el galope de Epona que se dirigía a donde estaba.

(NOVENO CAPÍTULO; WUUUUuuuuuu increíblemente no ha pasado nada, ah no, se incendiaron un par de líneas del metro de una de las ciudades de mi país; A veces me acuesto pensando cómo dirigir la historia pero al momento de escribir puedo sentir cómo la historia sigue adelante gracias a los personajes, este Link me gusta mucho, like, casi no te muestran la historia pero me tuve que echar esa sección del libro del héroe y los diarios de los campeones para concebir más o menos como se portaría, lo mismo pasa con Revali tho, se que me he sacado fan-lore de la manga pero pues, es mi fanfic, x, tamos chavos)

Propósito [COMPLETADO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora