Salvando Un Alma - SuperCorp (traducción)

Capitulo 37

Arturo se sentó solo en su habitación, su desayuno apenas tocado mientras revisaba el plan de defensa de Camelot, no había mentido cuando habló con Morgana el día de ayer, de hecho habían cambiado las cosas desde que ella los había dejado.

Pero si era honesto consigo mismo, no esperaba que el número de Helios fuera tan grande, y eso era de lo que Morgana había aprendido, podría tener otras armas y hombres que no creía que Morgana supiera conocer.

Arturo quería proteger a su gente, pero solo podía trabajar con la cantidad y los recursos que tenía, sus caballeros estaban bien entrenados pero ni siquiera ellos podían enfrentarse a la gran cantidad de personas.

Exhaló y se inclinó hacia adelante, apoyando la cabeza en su mano mientras trataba de pensar en formas de mejorar.

"¿Señor?"

Arturo saltó ligeramente mientras miraba hacia arriba para ver a Gaius de pie en su puerta.

"Gaius" saludó "Adelante"

"Enviaste a buscarme, señor" Gaius se acercó al joven rey "¿Cómo puedo ser de ayuda?"

Arturo suspiró y se frotó la cabeza "He tenido terribles dolores de cabeza y agradecería mucho uno de tus tónicos"

El anciano sonrió amablemente "Pensé que dirías algo así" sacó un pequeño frasco de vidrio de su túnica y se lo entregó a Arturo.

"¿Tu sabiduría y previsión no conocen límites, Gaius?" Él sonrió a cambio, descorchando el pequeño frasco y bebiéndolo todo de una sola vez.

"Me alegro de ser de ayuda, señor" se inclinó, volviéndose para irse.

"Oh Gaius" gritó Arturo.

"¿Señor?"

Arturo se reclinó en su silla, lejos del papel frente a él, necesitando un descanso.

"¿Puedo obtener su opinión honesta?", Preguntó.

"Honesto señor" preguntó Gaius.

Arturo miró al anciano, era plenamente consciente de que, como rey, muchos de sus súbditos solo le decían lo que quería escuchar, pero sabía que le preguntó al anciano que diría la verdad, sin importar cuán duro pueda ser.

"Habla libremente Gaius, sería un cambio bienvenido"

Gaius mantuvo la mirada del rey, levantando una ceja mientras pensaba.

"Supongo que se trata de la ex Lady Morgana"

Arturo se tensó levemente ante su antiguo título, recordando un momento en que era conocida como tal y todo lo que había sucedido desde esos días.

Gaius frunció los labios levemente "Es un tema difícil mi señor, como bien sabe"

"Por favor, Gaius"

El médico mayor podía ver la lucha en los ojos del joven rey.

"Sus crímenes pasados ​​contra este reino son ... severos" eligió cuidadosamente sus palabras "Pero ella también ha regresado por su propia voluntad y ha dado información voluntariamente, ¿ha pedido que la salven?"

Arturo negó con la cabeza "Su única petición fue que ayude a la joven que la acompañaba"

"¿Kara?" Preguntó Gaius, un parpadeo en sus ojos, algo haciendo clic en su mente.

"La alojaste antes de que se fuera, ¿no es así?" preguntó el rey sentándose un poco más recto.

"Lo hice, al igual que Gwen", confirmó.

"¿Qué opinas de ella? ¿Son honestos sus motivos?"

Gaius asintió con la cabeza "Ella, en mi opinión es de corazón puro" hizo una pausa antes de continuar "Ella fue traída a este Reino en contra de su voluntad y ella ha elegido tomar esta carga de otros que no conocía, ella trajo a Morgana de regreso a ella casa"

Arturo bajó la mirada a la mesa, sus dedos tamborilearon una vez más, su mente corriendo, él también tenía muchas cargas sobre él este último día.

"Las intenciones de Kara son claras mi señor, al igual que las de Lady Morgana" se adelantó y apoyó una mano en el hombro de Arturo "Si lo que dice es verdad, entonces ha arriesgado mucho para oponerse a Helios, ambos sabemos que él no es un hombre con quien jugar "

Los ojos de Arturo permanecieron fijos en la mesa.

"Señor, si puedo" Gaius hizo una pausa, sabiendo que sus siguientes palabras pueden sonar duras "Cuando Morgana se dio cuenta por primera vez de que tenía magia, trató de ocultarla, temiendo la furia del difunto rey Uther"

Los ojos de Arturo se lanzaron hacia él, con un ligero enfado en ellos, pero Gaius continuó.

"Ambos sabemos que él tenía medidas extremas sobre la magia y sus usuarios después de que falleciera su querida madre, creo que lo que hizo una vez fue por miedo y el miedo puede hacer cosas peligrosas para la gente"

"¿Qué estás diciendo Gaius" el tono de Arturo era de advertencia.

El hombre mayor exhaló.

"Solo algo para tener en cuenta que encontró consuelo y aceptación en otros usuarios de magia como Morgause y que tuvieron una gran influencia en ella en sus horas más oscuras" Gaius dejó caer su mano y comenzó a caminar hacia la puerta "Ella era joven y estaba viva con miedo"

"¿Que harías tú en mi lugar?" Arturo se puso de pie, necesitando orientación.

"Tengo miedo de decir señor que sólo tú puedes decidir qué hacer, yo sólo puedo decir mi pieza" Abrió la puerta "Te prepararé algunos tónicos más señor, si los necesitas"

Y con eso Arturo se quedó solo otra vez, se apoyó en la mesa, su ira se apoderó de él y arrojó su copa al otro lado de la habitación, antes de exhalar y caer en su asiento.

Una parte de él sabía que lo que Gaius había dicho era cierto, sabía que su padre, aunque un gran rey tenía sus defectos, nunca había considerado lo que podría haber sido para Morgana, ella siempre había parecido feliz hasta el final.

Pero, ¿podría haber sido realmente lo que la llevó a volverse contra su familia y su reino?

Descubrió que ahora tenía más preguntas que respuestas, pero estaba contento por la honestidad de Gaius.

"Guardia" llamó.

Instantáneamente había un hombre parado en la puerta.

"¿Señor?"

"Trae a Morgana aquí"

El guardia vaciló por un momento.

"¿Hay algún problema Brennis?" Arturo preguntó después de sentir la pausa en el caballero más joven.

"No mi rey" y él también desapareció por la puerta.

Arturo volvió a mirar el papeleo, suspirando, este no iba a ser un día más fácil.