❝𝐑𝐎𝐌𝐄𝐎 𝐘 𝐉𝐎𝐎𝐇𝐘𝐔𝐍❞ ─ seulrene [FINALIZADA]

𝙲𝙰𝙿𝙸𝚃𝚄𝙻𝙾 𝙳𝙴𝙲𝙸𝙼𝙾

ㅡBae va con todas, ¿No?

No hace falta que Seulgi voltee a ver a quien se ha sentado a su lado, solo basta con el sonido de su boca al masticar y el olor a pollo frito para saber que es Jisoo lista para ponerle los nervios de punta a la mayor por el simple hecho de existir.

Sin embargo, hoy es diferente, hoy nada puede molestar a Kang Seulgi. No después de la diaria demostración de interés de Joohyun.

ㅡSupongo, ya han sido varios días de su particular cortejo. ㅡla pelinegra falla en suprimir su sonrisa al pensar en la chica de baja estatura y sus ocurrencias. ㅡAunque debo admitir, tiene su encanto.

Jisoo ha conocido a Seulgi desde esa época dónde ambas todavía usaban pañales, la conoce con la misma exactitud con la que conoce la receta KFC para sus drumsticks. Hay algo que está ocultando y Kim Jisoo puede sentirlo.

ㅡMi instinto investigativo me dice algo. ㅡla personalidad algo exuberante de la pelirroja se hace camino en la conversación.

ㅡ¿Que estás demente?

El sonido de la mano de Jisoo contra la nuca de Seulgi repica en el vacío salón.

Mismo salón que hace unos cuantos minutos vio la salida triunfal de Joohyun, avergonzando a Sooyoung y llenando de orgullo a Yerim.

ㅡNo idiota, pero eso no importa, por ahora. ㅡlo último es un susurro lo suficientemente bajo para que Seulgi no pueda escuchar. ㅡ¿Que te dijo unnie hoy?, la ví salir con la sonrisa más grande que se le conoce.

Y es con ese pequeño recuerdo de Joohyun acomodandose las gafas sobre el perfecto puente de su nariz, que esa extraña sensación entre el pecho y abdomen de Seulgi se hace presente.

Tan pequeña y tan adorable, diciendo cosas sin sentido alguno pero que fueron elocuentes solo porque Bae Joohyun las dijo. Eso es lo único que hay en la mente de la morena.

ㅡMe dijo que ni su miopía y astigmatismo podían impedirle ver los hermosa que yo luzco hoy. ㅡSeulgi hace emocionados ademanes en cada palabra. ㅡDespués me guiño fallidamente un ojo e hizo señas de pistolitas y se veía tan...

ㅡ¿Por qué siento que estás muy feliz por tan patético cumplido? ㅡel instinto de Jisoo no se equivoca, y la chica se asegura de saber lo que hay detrás.

ㅡ¿De que estás hablando? yo noㅡ

La infantil riña se ve pausada por la intromisión de Joohyun al salón.

Pasos largos para sus cortas piernas son dados por la castaña hasta su asiento, siendo seguida por los ojos de Seulgi quien detalla con sumo cuidado el aspecto de la mayor. Camiseta negra con manchas por haberse limpiado arcilla sobre ella, jeans ajustados, cabello en un perfectamente hecho moño y esas gafas graduadas de marco delgado que hacen lucir a la siempre elegante Bae Joohyun como el crush de la adolescencia de cualquiera.

El suspiro tan grande que escapa de Seulgi llama la atención de las otras dos quienes lo confunden con un bostezo, siendo Joohyun la que aprovecha el momento.

ㅡComprendo, ser tan hermosa debe ser agotador.

Si fuera posible la mandíbula inferior de Jisoo estaría en el suelo, tanto por la actitud de la castaña como por la repentina y disimulada vergüenza de su amiga.

Pero Seulgi siempre es quien tiene la última palabra y más en un juego donde participan las dos.

ㅡEntonces tú debes estar exhausta, Hyunnie. ㅡcon cabeza ladeada, la pelinegra dice la oración que detiene el funcionamiento de Joohyun.

Tres... Dos... Uno...

ㅡ¡Y-yo solo vine por esto! ㅡJoohyun enseña el cuaderno que había dejado debajo de su escritorio de una forma defensiva. ㅡ¡Taehyung m-me está esperando, a-adios!

Y de una manera un poco más apurada a como entró, Joohyun huye del aula. Pero su fuerte voz todavía puede escucharse por los pasillos.

ㅡ¡Yah, Son Seungwan, se te olvidó enseñarme algo! ¡¿Qué debo hacer cuando me coquetean de regreso?!