Paint Me Like Van Gogh| Kendall Jenner

vino

La semana pasó tranquila, ambas hacían el esfuerzo por actuar de manera profesional. El viernes llegó, acordaron en no verse, ya que Kendall tenía que ir al cumpleaños de una de sus hermanas, pero como era de costumbre, ella solía escaparse de todas las fiestas familiares, se tomaba una cuantas fotos para subirlas a instagram, tomaba algunas bebidas y cuando se daba cuenta que ya no encajaba se retiraba de la manera más sigilosa posible. Porque ya sabía cómo terminan esas fiestas, mandaban a los niños a dormir y ellas terminaban de mala copa para poder sacar algún chismesito y que se hable de ellas por una semana.

Al entrar a su casa, Kendall suspiro y dejó las llaves en la mesa. Se dirigió a la cocina, específicamente al refrigerador en donde encontró una botella de vino que le habían obsequiado hace tiempo. Tomó la botella, pensó en servirse en una copa, pero ¿para qué? Estaba sola y a nadie le importaría si tomaba directamente de la botella.

Miró el reloj que daban las 11pm, "temprano" pensó, se puso cómoda con una sudadera, bragas y calcetines. Subió al estudio, se sentó en la silla donde siempre se sienta Jane y comenzó a imitarla.

-El arte es el medio de expresión más hermoso que existe a lo largo de la historia - trato de imitar su voz, dio otro sorbo a la botella- no tengas miedo de expresarte Jenner- dio otro sorbo.

Se río de lo que estaba haciendo, al final, vivía sola ¿Quién la escucharía?

Bajo a la sala, puso música y el alcohol ya había ello efecto en ella hasta quedó exhausta, ahora estaba sentada en cómo sillón en donde antes estaba brincando. Pensó en marcarle a Gigi, pero ella ya tenía suficiente con su bebé. Tal vez a Bella, pero jamás lograría despertarla. O quizás a Hayley, pero si la despertaba iba despertar a Justin también.

Dejó caer su cabeza en el sillón, "estoy sola y me siento sola" dijo en voz baja, casi en un susurro. Pero en ese instante se le ocurrió que tenía otra opción.

Jane Ferreri.

Estaba nerviosa y tenía el corazón agitado, no sabía si le iba contestar o si realmente quería que le contestara.

- No doy clases a las dos de la madrugada, Jenner.- le contestó la castaña del otro lado de la línea, sonaba más dormida que despierta.

-hola para ti también

- ¿qué ocurre? ¿En qué te puedo ayudar? - a la castaña le parecía muy extraño

-nada, es sólo que no podía dormir y quería escuchar tu voz- se mordió el labio la morena, quizás habló de más.

-entonces ven a mi departamento

-de ninguna manera Ferreri.

A Kendall le llegó un mensaje con la dirección de Jane.

-Pero Jane, estoy en bragas- dijo la morena de manera tierna para probar suerte.

-entonces me quitaré mi pijama para estar a la par, para que te sientas en confianza -le dijo la castaña y la morena no pudo evitar sonreír.

-de ser así, tal vez llegue en quince minutos

-te espero aquí-colgó la castaña.

A Kendall le encantó esa faceta de Jane y quería más de eso, si de algo estaba segura es que debería de marcarle más seguido por la madrugada. Corrió a su habitación, se puso un short deportivo y sus sandalias. Tomó las llaves de su auto y salió de su casa.

Y así fue, autos en que llegar y ganas, le sobraban y llegó en quince minutos.

Tocó la puerta dos veces y está se abrió de inmediato.

-pasa Kendall, toma asiento.

-gracias

La castaña pudo deducir de inmediato que sobria no estaba, ¿Quién en su sano juicio le marcaría a las 2 de la madrugada?

-bebé esto-le entregó un vaso con agua y se sentó a su lado-¿qué tal estuvo la fiesta? Me imagino que la pasaste bomba-dijo la castaña casi segura

-en realidad, me escape - bebió del vaso y después la miró-se puso muy aburrido, para mi gusto.

-ya veo- dijo la castaña sin apartar la mirada

-así que aquí vive la mejor artista de California-aparto la vista examinando el lugar.

-bueno, no sé dónde viva ella, pero puedes estar segura que aquí vivo yo.

Ambas rieron. La morena se acercó más a ella.

-¿te parezco linda, Jane?

-claro-dijo la castaña con máxima seguridad, era obvio lo que le preguntaba, era una verdad absoluta.

-¿qué tanto? - Kendall ya estaba cambiando el tono de su voz.

-mmm, tal vez un 70.- bromeó la castaña, desde el primer instante que sus ojos verdes la vieron le pareció un 1000/1000, pero le gustaba jugar.

Kendall se acercó un poco más, posó su palma en la mejilla de Jane y con su pulgar acarició suavemente sus labios.

- ¿estás segura Ferreri?

Sus respiraciones comenzaron mezclarse.

-igual y te doy un 80- lo dijo en un susurro, pero que la morena pudo escuchar a la perfección

- menos mal-

Kendall cortó la distancia y la besó.

La beso lento, con dulzura y ganas.

La beso como si tuviera miedo a que se fuera, su cariño era inquieto y nervioso.

La besó y ya no quería sentirse sola nunca más.

La beso y su ansiedad se había mudado de su cuerpo.

Se separaron y la castaña estaba segura de que ese fue el mejor beso que le habían dado en su vida.

Jane quería probar más, pero Kendall estaba ebria y no quería sacar provecho de eso.

-tal vez será mejor descansar- la castaña se levantó y dirigió a la morena a su habitación.

-puedes dormir en mi cama Jenner-otra vez la castaña hablándole por su apellido-yo estaré en el sillón-dio la vuelta comenzó a caminar hacia la salida de la habitación, pero Kendall la llamó

-Jane, ¿Podrías dormir conmigo? Considero que hay espacio para las dos y prometo no quitarte la cobija.

La castaña aún estaba desconcertada, pero la convenció.

-está bien, Kendall.

Se acostó a su lado pero reconciliar el sueño le parecía imposible, en cambio Kendall parecía ya estar en su quinto sueño.