Cuando nadie nos ve || NicoMaki

•Capítulo 17•

(POV. Nozomi)

Sí, ahora ya lo tengo claro.

Yo amo a Elicchi.

Mis sentimientos hacia Maki ya terminaron.

Me alegro de que me haya dado cuenta.

Nicocchi...

Ella me ganó, pero no me siento mal. Aunque, la sigo odiando después de todo.

Makicchi...

Ella me hizo tener sentimientos muy enfermos. Aunque hubiese salido con ella, esa relación no sería sana. Aunque, no es su culpa. Yo, simplemente me equivoqué. Espero que pueda perdonarme...

Elicchi...

Gracias a ella me di cuenta de mis verdaderos sentimientos. Es por ella que me liberé de unos sentimientos tóxicos. Yo... Realmente la amo. Ella siempre estuvo a mi lado. Se lo agradezco mucho.

Creo que debería decirles a Nicocchi y Makicchi que ahora amo a Elicchi.

Me gustaría que me perdonaran... Aunque, no se si lo hagan después de todo lo que hice.

Realmente me siento faltan por todo lo que le hice a Nicocchi. Aunque la odie, ella no se merecía nada de lo que le hice.

Me levanté y cogí mi móvil.

Estaba dispuesta a llamar a Nicocchi y Makicchi. Tenía que explicarles todo. Ya entiendo mis sentimientos, ellas deben ser las primeras en saberlo.

Aunque me costó, logré armar el suficiente valor para marcar el número de Nicocchi y darle a "llamar".

(POV. Nico)

Estaba en mi casa con Maki. Estaba muy feliz, al fin teníamos un poco de tiempo a solas.

Estábamos hablando sobre temas variados.

Me alegraba poder estar junto a ella, solo nosotras, sin distracciones... Ese momento era perfecto. No quería que nadie lo interrumpirse...

—¡Onee-chan!—Gritó mi hermana Kokoro abriendo mi puerta de un golpe, sacándome de mis pensamientos.—¡Un aparato está cantando una canción muy fea!

—Kokoro... ¿Se puede saber de qué estás hablando?—Dije mientras me levantaba y me dirigía al lugar donde estaba ese "aparato".

—¡Esa cosa!—Dijo ella señalando mi móvil.

Suspiré y lo agarré para ver quién me estaba llamando.

—¿Pero qué...?—Dije algo aterrorizada al ver el nombre del contacto.

—¿Qué pasa, Nico-chan?—Me preguntó Maki mientras se acercaba a mí.

—Vamos a mi habitación...—Dije mientras la empujaba suavemente hacia allí.

—Pero... ¿Qué es lo que pasa?—Me preguntó ella cuando ya estábamos dentro.