[Capítulo 32]

9.8K 1.1K 511
                                    

CAPÍTULO 32

Después de la interrupción de Gulf. El juez le indicó a la parte acusadora que prosiguiera con el orden de la sesión, lo cual conllevaba a los testimonios de los testigos protegidos.

- El primer testigo en declarar es el joven Katsamonnat Namwirote (Earth) pase al banquillo por favor. El joven así lo hizo – ¿Jura decir la verdad y nada más que la verdad? –

- Sí - respondió el muchacho

- Su testimonio tiene que ser veraz ya que si incurre en un delito de falso testimonio es una causa criminal ¿Lo entiende? –

- Si señor – dijo Katsamonnat con seguridad mirando con detenimiento a Mew. 

- ¿Puede relatarnos cómo fue su relación con el señor Suppasit? –

Tan solo lo que dijera su ex sumiso, al cual solía llamar Earth, el juez pediría no un juicio, lo mandaría directamente a prisión. La declaración de aquel dulce muchacho lo terminaría de hundir sin la necesidad de que escucharan a los demás testigos. 

Había sido un salvaje con ese tierno muchacho, con él había experimentado por primera vez lo que era quemar la piel humana y el dolor ajeno que una quemadura causaba. Mew observó a Earth e internamente le pidió perdón.

- Mi relación con el señor Suppasit fue muy parecida a la su prometido – respondió el muchacho sorprendiendo a todos – solo que él y yo no nos enamoramos – explicó – yo vagaba por las calles y quise robarle, obviamente no pude y él en lugar de entregarme a las autoridades me ofreció trabajo en su empresa y acepté –

- ¿Está seguro que así fue cómo pasó todo? - el abogado que lo había buscado para que declarara en contra de Mew estaba consternado por la respuesta del Earth. 

- Completamente seguro - respondió casi ofendido - trabajé en su empresa como mensajero y gracias a eso pude terminar de estudiar y ahora tengo mi propio negocio, un salón de belleza - 

Solo la parte del salón de belleza era verdad. Por supuesto que Mew y él no se habían conocido como lo había relatado, el empresario lo compró con Max justamente como lo había hecho con Gulf. Pero, después de unos meses en que la pasión de lo nuevo se había apagado en Mew, lo dejó en libertad como solía hacerlos con los sumisos.

- Antes de que emitiera su declaración se le ha advertido de que si mentía estaría cometiendo un delito - el abogado trató de intimidarlo para que cambiara su declaración. 

- Estoy diciendo la verdad - dijo Earth - y no tengo nada más que decir - 

Molestó, el jurista le indicó que abandonara el banquillo y regresará a su lugar. En segundo lugar llamó al joven que se hacía llamar Plan para que emitiera su declaratoria.

- Su testimonio tiene que ser veraz ya que si incurre en un delito de falso testimonio es una causa criminal ¿Lo entiende? - 

- Sí - respondió el muchacho con una sonrisa en su rostro. 

Plan, había sido el primer sumiso de Mew. A penas había cumplido los dieciocho años cuando el empresario pagó por él. Quizás ese chico no había conocido a un Mew tan salvaje y violento, porque era la primera vez que el mayor hacía aquellas practicas sexuales. Sin embargo, no había sido una buena experiencia para el joven muchacho, pero cuando Mew se cansó de él y lo liberó para dejarlo hacer lo que quería y el muchacho se sintió agradecido con él. 

- ¿Cómo fue que conoció al señor Suppasit? - preguntó el abogado mirándolo a los ojos. 

- Mis padres me corrieron de la casa por mi orientación sexual - empezó a relatar - vagué un par de semanas por las calles hasta que un restaurante de comida rápida me dio empleo - sonrió al recordar eso porque era verdad - sin embargo, mi padre fue a buscarme para obligarme a regresar con él casa ya que quería enviarme al colegio militar y cambiar mi condición, yo me negué y empezó a golpearme fuera del local en donde trabajaba, el señor Suppasit pasaba por ahí y me defendió - 

ObedienteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora