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Yoongi se levantó temprano al día siguiente para ir a trabajar. El fin semana pasó volando, sentía que el viernes iba a llegar igual de rápido. Se moría de ganas de subir las canciones, pero tenía que tener paciencia. Especialmente ahora que Jimin tenía que grabar parte de la canción, sabía que él podría ponerse bastante nervioso.

-Yoongi hyung. – lo llamó Jimin cuando estaban desayunando. - ¿Cuándo vamos a ir al estudio a grabar?

-Le tengo que preguntar a Namjoon cuándo está libre. – respondió Yoongi. – Lo mejor es que sea hoy o mañana.

Antes de irse, Yoongi llamó a Namjoon para preguntarle. Él respondió que podrían ir en la tarde, ya que no tenía nada que hacer.

-Namjoon dice que podemos ir en la tarde. – le dijo Yoongi a Jimin cuando colgó la llamada. El peli naranja le sonrió en respuesta y se despidió del mayor antes de que saliera del departamento. En el fondo, estaba realmente emocionado por poder grabar la canción, pero también estaba nervioso.

Jimin se la pasó cantando su parte de la canción todo la mañana. Quería que, al llegar al estudio, todo saliera bien casi a la primera. Sabía que eso podía sonar imposible pero necesitaba convencerse de que saldría bien.

Yoongi regresó después de trabajar, había aprovechado para comprar el almuerzo. Ambos chicos se sentaron a comer. Yoongi notó que Jimin estaba perdido en sus pensamientos. Sabía que estaba nervioso pero intentaba disimularlo. Después de un rato, ambos salieron del departamento y fueron al estudio, donde se encontraron con Namjoon como la otra vez.

-¿Estás listo, Jiminie? – le preguntó Namjoon cuando entraron a la sala.

-SÍ hyung. – respondió Jimin, sonriendo.

Jimin entró a la cabina y se puso los audífonos, justo como la otra vez. Sus nervios se habían calmado un poco, pero al estar parado frente al micrófono sintió como su alma se caía a sus pies. Estaba nervioso, casi al punto de empezar a temblar, pero necesitaba calmarse. Inhaló y exhaló un par de veces, tratando que su corazón dejara de latir tan rápido.

-Jiminie. – lo llamó Yoongi. Jimin volteó a verlo. – Está bien, tú puedes.

A Jimin se le aguaron un poco los ojos, y le sonrió a Yoongi. La confianza que Yoongi le trasmitía lo hacía sentir mucho mejor. Volteó a ver a Namjoon y asintió con la cabeza, avisándole que ya estaba listo. Namjoon asintió también en respuesta y reprodujo la pista.

Está lloviendo fuera de la ventana

Cuando el tiempo está así, siempre vienes a mi cabeza

No puedo dormir

Jimin cantaba libremente, una vez la melodía entró en sus oídos se sintió acogido por ella y se calmó. La música siempre había sido una fuente de confort para él. Siempre que no se sentía muy bien, escuchaba música y se sentía mejor luego de eso. Se rió por dentro, debido a que Yoongi le había puesto a la canción "Song Request".

Jimin, para el coro de la canción, había escrito esto:

Hey, DJ, ponme una canción que me haga sonreír

Una canción que, en una triste noche, sonría por mí y me haga olvidarme de él

Hey, DJ, ponme una canción que me haga llorar

La canción que, en una noche frustrante, llore por mí y me haga olvidarme de él

La música tiene un poder impresionante, pero no todos se dan cuenta de eso. Algunos toman la música muy a la ligera, escuchan canciones simplemente para pasar el rato. Pero hay otras personas que las sienten desde el fondo del alma, que sienten que las canciones los entienden. Canciones que te hacen feliz, que te hacen llorar, que te ayudan a soltar los nudos en tu pecho. Jimin quería, bajo el contexto que le dijo Yoongi, expresar eso.

little cat ♡ yoonminWhere stories live. Discover now