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Habían pasado los días y Namjoon había intentado hablar con Yoonji, pero siempre surgía algo que arruinaba su intención, no la encontraba, después de la escuela quién iba por los niños era un sujeto que no conocía, pero al parecer los niños si, pero no se mostraban contentos con eso.

Era viernes por lo que ese día tenía clases de de deportes y los niños siempre se mostraban contentos en esa hora. Esta ocasión había dos que no lo estaban nada contentos.

Namjoon estaba preocupado, pues no era el único día que lo veía de esa manera, llevaban así toda la semana, ni siquiera querían jugar con sus amigos.

- Adelántense, en un minuto los alcanzo - dio   la indicación y la mayoría salió corriendo directamente a la cancha - ¡Tengan cuidado! - dijo al ver que algunos se estaban tropezando.

Dos niños caminaron a paso lento y sin mucho ánimo pero se detuvieron al escuchar la voz de su maestro favorito.

- ¿está todo bien? - se puso en cuclillas para alcanzar su altura, quedando un poco más abajo.

- Si... - respondió el niño sin mucho ánimo.

- ¿Porqué no han querido jugar con sus amigos?

- Porqué después te van a abandonar, todo el mundo hace eso - habló la niña en un hilo de voz.

Sus ojitos estaba llorosos y sus mejillas sonrosadas.

- ¿Porqué el tío Yoongi cambió? - el niño intentó contener su enojo - volvió a ser cruel y malvado, otra vez nos odia.

Namjoon cerró su mano con fuerza y frunció su ceño por lo mal que lo hacía sentir escuchar eso, pero sabía que no era bueno transmitir esos sentimientos, por lo que se relajó y tomó sus pequeñas manos.

- El los quiere... solo que está en una etapa de amargura - hizo una mueca que hizo reír ligeramente al par - es como un monstruo.

- Pero no está feo ni peludo.

- No, pero aunque los monstruos parecen ser crueles y malvados, les gusta tomar té y cuidar de sus mascotas. Incluso ayudan a las personas, pero prefieren hacerlo en secreto - les sonrió - su tío es un monstruo bueno.

- eso quiere decir que convencerá a mamá de que no nos lleve con ese sujeto.

Namjoon hizo una mueca, pues sabía que el había sido el de la idea, pero claramente no les diría eso.

- El lo hará.

No sabía como le haría para convencer a Yoonji de que no lo hiciera, pero se encargaría de eso.

Después de esa pequeña conversación los niños salieron corriendo pero ahora más contentos y con un Namjoon detrás de ellos cargando una enorme responsabilidad.

[...]

El ambiente en la sala era muy tenso, nadie quería hablar pues apreciaban sus lenguas y su estabilidad emocional.

Habían pasado horas en las que estuvieron eligiendo canciones que formarían el álbum del nuevo grupo a debutar, pero al productor no le gustaba ni una, tan solo con que comenzara la canción gritaba que lo apagaran que era horrible.

El mayor el la sala tomo una bocada de aire, y pensó en lo que debería de decir, pero no salía nada que terminara bien.

- ¿Qué tal tus canciones? - dijo el jefe.

- No, no me gustan - ni siquiera se detuvo a pensar en una canción, solo lo soltó.

- Me enviaste una que era realmente buena, estoy seguro de que se volvería un éxito aun siendo para un grupo nuevo.

Yoongi rodó los ojos con fastidio y dejó caer su espalda en el respaldo de la silla.

No dio una respuesta, solo lo miró mal y el mayor sabía que era un rotundo no.

Todo se puso en silencio una vez más regresando a el ambiente tenso que se había formado desde que vieron entrar al pálido luciendo enojado, irritado y adormilado.

- Salgan unos momentos, quiero hablar con Min - se dirigió a los demás presentes que obedecieron y salieron.

En el estudio solo quedaron ellos dos a lo que Yoongi levantó una ceja confundido.

- ¿Qué es lo que sucede? Hace una semana me diste el nombre de las canciones que te gustaban y ahora resulta que no te gusta ni una.

- Pues no me gustan, es todo, no necesita más explicaciones.

El jefe se quedo callado pensando en que decir pero no venían muchas ideas a su cabeza más que le que se había estado corriendo por el edificio.

- ¿Sucedió algo con un burdel al que ibas?

Yoongi volteo a verlo completamente confundido, pues había sido realmente raro que dijera eso.

- ¿Qué mierda? ¿Porqué un burdel?

- Porque hace unas semanas estabas tan feliz, que no se, parecías que dabas todos los días, o que te daban...

- Mierda ¿qué te sucede?

- ¡Yo no lo insinué! Fueron todos. Es que tuviste un extraño cambio, estabas feliz, alegre, incluso ayudaste a uno de los chicos que están por debutar en una canción.

Ahora que el pálido lo escuchaba si sonaba bastante extraño, no pensó que hubiera cambiado todo ese tiempo que estuvo con Namjoon.

- pero si ese es el problema conseguiré a alguien que te ayude - levantó las cejas con picardía.

- No fui a un burdel.

- Como quiera te lo puedo conseguir.

- ¡No tuve sexo con nadie! - dijo fastidiado.

- Pero si eso te fal...

- Mierda, no quiero tener sexo con nadie.

El jefe se quedó callado pensando en otra razón, pues al parecer el burdel no había sido la causa de tanto enojo.

- ¿Puedes creer que me dijo que era detestable? Maldita sea Park ¿crees que soy detestable?

El mayor lo miró asustado, pues había comenzando a verlo con desesperación, esperando una respuesta.

- ¿qué? No, claro que no - dijo intentando sonar no muy sarcástico.

- Eso mismo creo yo. - dijo con obviedad - ¿sabés quién si lo es? Namjoon.

- Si, el si lo es - le siguió, aunque no tenía idea de quién hablaba.

- Si y además de eso es un soplón, se mete en lo que no le importa solo para ayudar a los demás.

- No le veo lo malo a eso.

- No me interrumpas. - el jefe juntó sus labios en forma de silencio. - además de que se cree muy adorable con ese overol café que lo hace lucir como un osito y luego su maldita sonrisa - golpeó la mesa con frustración.

El mayor no entendía lo que estaba sucediendo, pero si tenía algo que ver con la persona que su hijo, Jimin, le había contado comenzaba a entender un poco.

- Parece ser alguien fatal - le siguió la corriente.

- Lo es, el es tan... lindo, buena persona, adorable, sexy... - sus palabras fueron desapareciendo.

En su mente estaban muchos momentos del chico, pero destacaba el día que lo había besado.

- Lo extraño...

El mayor no podía creer lo que sus ojos veían.

Min Yoongi Yoongi quería llorar. Realmente durante los casi doce años que lleva conociéndolo no lo había visto de esa forma.

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Una disculpa por los errores y muchas gracias por leer💕💕

Eres Detestable |Yoonnam|Wo Geschichten leben. Entdecke jetzt