Capítulo 26: Niñas

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Clarke's pov:

Me despierto arrastrando los pies a mi alrededor, mis ojos se abren y estrechan con la luz brillante que se filtra por la ventana, ruedo a mi lado y casi me caigo de la pequeña cama de repente recordando dónde me desperté.

—Mierda, mierda, mierda. —Pongo mi mano sobre mi corazón y respiro profundo y me giro hacia la ventana para encontrarme con dos pares de ojos mirándome, mis dos novias luciendo sonrisas divertidas en sus rostros. —Cállanse.

Pongo los ojos en blanco antes de envolver mis brazos alrededor del pequeño cuerpo de T/n para acercarla más a mí, respiro su aroma mientras acaricio el hueco de su cuello esperando que el sueño venga a buscarme de nuevo.

—Claaaaaarke. —Tararea mi nombre, una sonrisa se desliza por mis labios mientras escucho el pequeño gemido de T/n, su voz ronca matutina resonando en el aire. —Tenemos que levantarnos, Lexa dijo que tienen una sorpresa para mí.

Vaya, los ojos se abren de golpe inmediatamente, bloqueando mi mirada con Lexa tratando de ponerme al día con sus pensamientos, ella asiente hacia mí, así que respiro y me giro para mirar a T/n, sus ojos marrones brillan en un color caramelo por la mañana ligero.

—Está bien, cachorro.

Me inclino y rápidamente dejo un beso en sus labios rosados ​​y regordetes.

—Mmm...

Mis cejas se elevan y miro a Lexa reaccionando en silencio al suave gemido de T/n, sus ojos aún cerrados por el pequeño beso.

Me deslizo de la cama pequeña y me giro para mirar a las otras dos, me obligo a reprimir mi risa cuando noto que la morena más pequeña está acostada sobre Lexa para que haya espacio para todas en la cama, me muerdo el labio y miro alrededor de la habitación tratando de pensar en cuál es la sorpresa. Vuelvo la cabeza hacia las dos cuando escucho un pequeño gemido, T/n está sentada en el borde de su cama, permitiendo que sus piernas se balanceen debajo de ella mientras me mira con un pequeño puchero.

—Moverse es aburrido.

Me río de sus payasadas y doy los pocos pasos necesarios para poder apoyarme en sus muslos.

—¿Entonces no quieres la sorpresa?

Sus ojos se agrandan y da un gran salto fuera de la cama, tirándome hacia atrás para que Lexa me atrape.

Mi cabeza retrocede y nos miramos a los ojos.

—Gracias, nena. Nuestro cachorro es muy imperativo.

Ella asiente en silencio con una sonrisa en su rostro.

—Entonces, ¿cuál es la sorpresa?

Nuestra pequeña burbuja se rompe con la pregunta de la morena mientras nuestras miradas se desplazan para mirarla, me pongo de pie y me dirijo a la entrada de la tienda antes de darme la vuelta y sonreírle a Lexa. Lexa capta la indirecta.

—Vamos al claro para que podamos hablar de ello.

T/n asiente y se inclina para ponerse los zapatos, mis ojos cambian de inmediato a su trasero, me muerdo el labio mientras la veo moverse y deslizar sus zapatos, miro hacia arriba sorprendida cuando Lexa se aclara la garganta, una mirada burlona en su rostro, pongo los ojos en blanco y doy un paso más hacia la puerta sintiendo que mis mejillas se calientan.

—Está bien, vámonos.

Pongo una palma en el pecho de la morena y cambio mi mirada a sus zapatillas desatadas.

—¿Vas a atar eso?

T/n mira sus pies y me vuelve a mirar encogiéndose de hombros mientras intenta pasar a mi lado de nuevo, la empujo hacia atrás y Lexa la atrapa.

—¡Oye, vamos! ¡Quiero ir a caminar!

Pongo los ojos en blanco y me agacho para atar sus zapatos.

—Siempre odio cuando no te molestas en atarte los zapatos, cachorro.

—No soy un ca-

—¿Quién quiere salir a caminar? —Su boca se cierra inmediatamente, un pequeño puchero adorna sus labios. —Buen cachorro.

Me río ante la manera juguetona de Lexa mientras termino con sus cordones, tomando nota de que ella puede necesitar zapatos nuevos pronto por el aspecto de los cordones deshilachados y los pequeños agujeros en los lados.

—Ahora podemos irnos.

Me muevo hacia un lado mientras T/n sale al exterior, sacándome la lengua cuando pasa, Lexa se acerca a mí y me agarra de la mano, dejando un pequeño beso en mi mejilla antes de sacarme al bosque detrás de T/n.

La pequeña morena se da la vuelta mientras camina para quedar frente a nosotras, con la lengua aún afuera.

—T/n, guarda tu lengua.

Ella niega, aprieto la mano de Lexa antes de soltarla y correr tras la niña más pequeña, ella tropieza con una raíz y casi se cae, pero agarro la parte de atrás de su chaqueta y la tomo en mis brazos.

—¡Déjame iiiiir! —Puedo escuchar la sonrisa en su voz mientras me aferro con fuerza a la parte superior de su torso, Lexa se pone al día y toma sus pies pateando en sus manos. —Puedo caminar.

Ella finge estar molesta, pero sé que tanto Lexa como yo oímos la pequeña risa en su voz.

—¿Tú puedes?

Lexa se burla de T/n, balanceando sus piernas hacia adelante y hacia atrás entre su cuerpo y el mío.

Nos abrimos paso hacia el claro y la dejamos caer en el suelo antes de que las dos corramos para tomar los dos tocones.

—No es justo.

Se sienta en el suelo y hace pucheros mirándonos a las dos.

—Ven y siéntate sobre mí entonces.

Lexa señala su regazo, la morena pone los ojos en blanco y se levanta lentamente y se dirige hacia la chica más alta.

—Juro que haces esto a propósito.

Lexa agarra la mano de T/n y la coloca en su regazo, envolviendo sus brazos alrededor de la cintura de la niña, la morena mayor apoya la barbilla en el hombro de T/n y me saca la lengua, pongo los ojos en blanco y cruzo los brazos ante lo infantiles que son mis novias.

—Ambas son unas niñas.

T/n gira la cabeza para mirar a Lexa y rápidamente se vuelve hacia mí con una gran sonrisa en su rostro.

—¡Mamá Clarke!

Mis ojos se agrandan mientras escucho la voz falsa de bebé de T/n antes de verlas caer al suelo, riendo.

Las miro desde mi muñón, adorando cómo ambas se retuercen en el suelo mientras sus risas llenan el pequeño claro privado, mi corazón se hincha al escuchar que T/n tiene problemas para respirar de alegría en lugar de tristeza. Su cabello se despeinó por rodar por el suelo en lugar de sus manos rastrillándolo, tomo un respiro y me relajo mientras ellas continúan rodando, ambas chicas sonriendo de oreja a oreja, siento una sonrisa deslizarse por mis labios.

Cuando finalmente pueden sentarse y recuperar el aliento, T/n vuelve la cabeza hacia mí, sus ojos brillan con la luz exterior.

—Entonces, ¿cuál es la sorpresa?

Colibrí -Lexa/Tú/Clarke- (Historia Traducida) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora