𝑴𝒊 𝒄𝒉𝒊𝒄𝒐 𝑮𝒓𝒚𝒇𝒇𝒊𝒏𝒅𝒐𝒓 [Harry Potter]

31. 𝐃𝐞 𝐯𝐮𝐞𝐥𝐭𝐚 𝐞𝐧 𝐇𝐨𝐠𝐰𝐚𝐫𝐭𝐬

Seis semanas después

— Bien, ya conseguimos la copa de Helga Hufflepuff, solo necesitamos como destruirla.

— Jaz, sabes que la espada de Gryffindor es la única forma- me dice Mark leyendo un libro del montón- y mira lo que dice aquí , "está reliquia se encuentra desaparecida"

— De hecho, sabes que en realidad hay otra posibilidad...- digo levantándome de mi asiento.

— Ni lo pienses...

— ¡Es la única opción que nos queda!- digo ya alterada- si no haremos esto con Potter, debemos hacerlo por nuestra parte.

— Entonces, ¿Ir a Hogwarts es tu mejor elección? Estas loca si piensas que podremos entrar con Snape como director.

— Para eso existe la poción multijugos tonto, nos haremos pasar como alumnos, robamos un colmillo del basilisco y pan comido.

— Estas consciente del peligro que correremos allí, no? Digo, Hogwarts esta reinada por mortifagos.

— Lo se, pero soy capaz de que me maten por el hecho de terminar con quien tú sabes.

Hace una pausa y me mira.

— Está bien, mañana iremos. Pero ve a dormir un poco, no has descansado desde que nos fuimos del bosque.

— Vale, aguafiestas.

❋ Narra Mark ❋

Cuando finalmente Jaz se durmió, me fui fuera de nuestra carpa.

Para mi no tan remota sorpresa, allí me esperaba la temible proyección de mi padre.

— Supe que eras débil desde el momento en el que naciste. ¿Cuanto tiempo más retrasarás la captura?- me dice Voldemort furioso.

— Se que me estoy tardando, padre. Pero... ¿no habrá forma de que Parker no esté involucrada en esto?- le digo algo nervioso.

Me mira con desconfianza.

— No me digas que ahora te importa la muchacha- dice moviendo la cabeza decepcionado.
-Ella es solo un peón en mi plan, hijo. Lo sabias desde el comienzo. Si conseguimos matarla, Potter será más fácil de aplastar que una mosca.

— Es que no entiendo porque debemos lastimarla... porque no a uno de sus otros amigos?- le digo ansioso tratando de que cambie de opinión- Hermione, la sangre sucia, es un buen objetivo...

— Parker es lo que más le importa a Harry Potter. Ni siquiera el lazo con sus amigos logra superar lo que siente por ella.
Si muere, él no tendrá otra opción que caer ante mis pies. Y podré matarlo de una vez por todas. Debe ser así.

— ¿¿Pero que si ella me importa a mi?? No la dejare morir, mi señor.

Se produce una pausa. Voldemort hace una mueca de disgusto.

— No queda más tiempo, si no me sirves, conseguiré a otro fiel aliado que logre hacer el trabajo correctamente- me dice para luego desvanecerse.

— ¡Espera!- intento decir pero fue en vano.

— Mark, ¿qué fue todo ese ruido?- doy un pequeño salto por la sorpresa. Jaz se encontraba a un lado de la carpa.

— Nada.. nada. Estaba hablando dormido, siento haberte despertado. ¿Te encuentras bien?

— No puedo dormir. No dejo de escuchar la voz de Voldemort- me dice con una mano en su frente- ¿Podría quedarme aquí contigo?

— Claro que puedes- le digo y ambos nos acurrucamos con una manta en el suelo-
¿Aún piensas en Potter?