𝑴𝒊 𝒄𝒉𝒊𝒄𝒐 𝑮𝒓𝒚𝒇𝒇𝒊𝒏𝒅𝒐𝒓 [Harry Potter]

34. 𝐀𝐝𝐢𝐨𝐬, 𝐇𝐚𝐫𝐫𝐲

❋ Narra Jaz ❋

Todo ocurrió demasiado rápido.

Hagrid levantó con lentitud el cuerpo sin vida de quién alguna vez fue la persona que más amaba.

Voldemort en un grito de triunfo, dió la señal para que avancemos en camino a Hogwarts.
A medida que avanzábamos, grupos de mortifagos se unían a nosotros.

Noto como uno de ellos se escabulle hasta llegar a un lado mío, era Draco Malfoy.

— Jaz... se que ha pasado mucho tiempo desde la última vez que nos vimos...Pero quería decir que siento mucho que estes pasando por este infierno. Todavía me importas mucho y quería asegurarte que pase lo que pase, puedes contar conmigo...

— Tú obligaste a Mark hacer el juramento inquebrantable, Draco. Se suponía que éramos amigos, ¿no?. Pero eres el calco de tu padre, te has vuelto un asesino.

— La muerte de Mark me dolió tanto como a ti, Jaz. No solo éramos primos... era mi mejor amigo. Y a pesar de la enemistad que tenía con Potter, en el fondo nunca deseé su muerte.

— Hazme el favor de callarte de una vez.
Perdí a las personas más importantes en mi vida, todo por culpa de Riddle. Y teniendo la chance de vencerlo, no pude hacerlo. Todo está perdido para mi.

— No todo está perdido aún. ¿Todavía queda la serpiente, ¿no? Aún tenemos una chance Jaz. Podemos lograrlo, si me dejas ayudarte.

— De acuerdo Malfoy, pero no podemos fallar.

El lugar que alguna vez había llamado mi hogar se encontraba destruido y hecho cenizas.
Al fondo se asomaban algunos de los sobrevivientes a la batalla. Fue un alivio ver que Ron y Hermione seguían vivos.

Voldemort se asomó al frente y comenzó a reírse tétricamente.

— ¡Harry Potter, está muerto!— dice y los mortifagos comienzan a dar carcajadas— Así es mis queridos amigos, Harry Potter murió. Y a partir de hoy, su fe estará mejor conmigo.
Así que únanse a nosotros, o morirán.

Se produce un gran silencio.

Con la ayuda de Draco, logró desatar las cuerdas que me ataban los brazos y el me pasa discretamente su varita.

Haciendo un movimiento rápido, logró alejarme de los mortifagos y a su vez lanzar un confringo a Nagini.

— Siempre tan opresivo ¿No, Tom?- le digo con tono burlón, haciéndole frente-
Hoy nos haz quitado absolutamente todo, familiares, amigos, maestros. Haz arrasado el castillo al que llamamos hogar e intentaste derrotarnos. Pero es hora de darte cuenta que no puedes y nunca podrás. ¿Quieres saber el porque?, porque a pesar de haber perdido todo, tenemos algo que tú jamás podrás entender. Amistad y Amor. Harry entendía eso mejor que nadie, y hoy lo perdimos. Pero su muerte no fue en vano, porque lo vengaré, incluso... aunque sea lo último que haga.

Por Harry, por Mark, por Dumbledore y por mis padres.

Procedo a alzar mi varita lista para atacar, cuando noto que ocurre un milagro.

Harry cae de los brazos de Hagrid y lanza otro hechizo hacia Nagini.

Estaba vivo

Se acerca hacia mi intentando esquivar el contraataque de Voldemort.

— Ame tu discurso, sinceramente estuve aguantando seguir muerto para no interrumpirlo.

— Eres un tonto, Harry Potter- le digo con algunas lágrimas de felicidad cayendo por mis ojos.