sᴏᴜᴠᴇɴɪʀs [Spartor] -Pausado-

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Meta: 50 Estrellas

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Un sonido abrumador y molesto resonaba por toda la casa, haciendo que quien dormía plácidamente en una cama de color celeste se removiera. "¿Qué fue eso?" se preguntó aquella persona con los ojos aun cerrados, "Hace mucho no soñaba con algo así" dijo en su mente con nostalgia. Se estiro para apagar el molesto ruido y se sentó en la cama con la mirada perdida.

- ¡Andrés!, ¡Baja ya a desayunar! –Sonó una voz femenina desde la planta de debajo de su casa.

Eso lo saco de sus pensamientos, se apresuró a bajar, encontró a toda su familia ya reunida comiendo, todos se dijeron buenos días e hicieron una plática casual.

-¿Emocionados? –Pregunto la mujer mayor de la mesa.

- Yo sí, mamá –Respondió "Emma", la menor de la familia.

Andrés seguía sumergido en sus pensamientos, "¿Qué significaba ese sueño" seguía preguntándose, sintió un golpe en su cabeza y enseguida se quejó, toco aquel lugar lastimado.

- Baja de la nube, no eres un ángel –Respondió su madre.

Volví a analizar lo dicho por su madre, "Un ser de luz" por una extraña razón recordó eso del sueño, sacudió la cabeza, su madre tenía razón, debía despertar de una vez, termino de desayunar y se fue a bañar, poner su uniforme pero mientras se cambiaba encontró algo en su armario, "¿Un anillo?, Lo miro atentamente tenía algo grabado en el pero, escucho a su madre gritarle y se lo puso en su bolsillo, recogió todo y se fue.

Ya en la escuela, Andrés busco a su grupo de amigos, los encontró en la cafetería donde como de costumbre su amigo Mike estaba comiendo.

- Hola, ¿Qué pasa? – Pregunto sentándose al lado de su amigo rius.

- Nada interesante – Respondió Javier, el cual no quito sus ojos del libro que leía.

- ¿Qué lees? –Pregunto Andrés con curiosidad.

- Sobre una antigua leyenda que la maestra dijo que leyéramos –Comento tranquilo.

Andrés se sobresaltó, "Espera, espera, ¿Qué LIBRO? ¿Qué MAESTRA?" pensó en pánico, iba a preguntar pero el sonido del timbre, anuncio el inicio de clases, se maldijo mentalmente.

Llego a su salón, rezado que no tocara la primera clase con aquella maestra de la tarea, "Hola, soy yo otra vez Diosito" rezo en su mente pero, al parecer Dios no lo quería ya que, la maestra llego puntual, Andrés quería llorar, la clase empezó y llego el momento que no deseaba Andrés.

- Bien, sobre el libro leído, ¿quién puede decir de que se trató? –Pregunto esta dando vueltas por la habitación.

- ¡Yo! ¡Yo! –Grito una chica, alzando insistentemente la mano.

La maestra asintió y se dedicó a escuchar a esta.

- Hablaba de Dos amantes de mundos distintos que habían traicionado a sus raíces para estar juntos – Dijo la chica – Sparta y Raptor –