08

644 86 28
                                    

―Ten mucho cuidado ¿Sí?

―Lo tendré... tranquilo. ―Se acerca para dejar un leve beso en los labios de su novio, observando detenidamente el rostro del menor, cada uno de sus rasgos. El rostro que llevaba amando más de cuatro años ya.

"Lo debo lograr..."

Pensó dejando un delicado beso en los labios de su novio, caminando hacia afuera de la casa buscando la ubicación que le había dejado el desconocido.

Las calles nuevamente estaban vacías, totalmente impasibles, estando fuera de la oficina se sentía más... ¿Tranquilo?
No sentía esa presión que lo comenzaba a desesperar días atrás.

Entre sus pasos levanta la mirada observando las calles por las que va pasando, así hasta que encuentra la indicada y bastante cerca de ahí, la entrada de una muy vacía cafetería.

Entró observando todo en su totalidad, sólo habían unas pocas personas en la parte de abajo, todas y cada una de ellas acompañadas y muy centradas en lo suyo.

Decidió comenzar a subir uno por uno los escalones... mirando aún alrededor notando como sólo una persona estaba sentada ahí, y vaya que era bastante joven...

El chico se para a lado de la mesa donde estaba sentado para mirar al contrario.

―¿Usted es Min YoonGi?

―Soy yo.

Como respuesta obtuvo un reverencia de parte del contrario.

―Choi SooBin, encantado de conocerle en persona al fin.

―Puedo decir lo mismo de usted.

YoonGi se quedó a la expectativa, inclusive cuando fueron por el pedido de ambos, sus acciones, su rostro... y a simple vista parecía ser un chico totalmente normal.

―Necesito... su identificación antes que nada, información solamente importante.

―Choi SooBin, veinte años, actualmente soy un maestro de preescolar. Sin embargo antes era aprendiz de criminalística. Pareja de Choi YeonJun. ―YoonGi termina de escribir todo tal cuál, aún observando el rostro del menor, realmente era bastante joven...

―Todo anotado ya.

―Tenía conocimiento del caso, una vez mi pareja me llamó para preguntarme por algo importante para el caso que ustedes tienen. Sin embargo dejé de estar informado desde que él no llega temprano a casa y yo estoy dormido. Le agradecería que me contara a grandes rasgos lo que lleva hasta ahora. ―Dice ladeando ligeramente su cabeza hacia un lado observando al contrario. Agradecen la comida de ambos y siguen con la conversación.

―Perfecto, un hombre de más de cuarenta años, violador, tiene efebofilia, una mente maestra en el ámbito de psicología y psiquiatría, Choi Yeong. En la vez que hemos intentado atraparlo escapó, salió tiempo después del país y dos chicos nos han dado la información de que lo han visto, quisimos tener la lista de todos los vuelos de ese día, más sin embargo una mujer borró todos los registros al ser manipulada con sobornos de parte de nuestro fugitivo.

―¿Se ha perdido en el aeropuerto entonces?

―Está usted en lo correcto.

El chico se queda pensando bebiendo un poco de su café, regresando de inmediato la vista al mayor.

―¿Consiguió evidencias de por donde caminaba el hombre estando por el aeropuerto?

―Los chicos que dieron el reporte han grabado. ―Saca su teléfono colocando el vídeo grabado por el anterior chico.

Detrás de la máscara Où les histoires vivent. Découvrez maintenant