Capítulo 7

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Primer Acto || Parte Siete

"Soy culpable parte-2-"


—Ya deténganse y escúchenme—Cheryl paró el entrenamiento—. Parece que abra una tormenta la noche del show, pero ustedes ya lo echaron a perder. Con Jason presente en nuestra consciencia colectiva, todos van a estar observándome. "¿Acaso esta bella y exótica flor tropical se ahogará bajo el escrutinio o le abrumarán sus emociones?". La respuesta a esto es no y no. Dicho eso, necesito más poder. Quiero a las Pussycats. Quédense todas aquí mientras yo las llamo—Cheryl arrastro a Hope con ella.

—Después de la práctica, necesitaré una pedicura. ¿Tú, Betty?—Veronica se acerca a la Cooper.

—Tengo tarea—Betty trataba de evitarla. 

—Sé que cada quién vive su duelo, pero Cheryl hará un show para lidiar con su tristeza. Eso es brillante o psicótico, o ambas—opina Veronica. 

—Sí, claro. Solo que la hipocresía no es lo suyo. No pretende ser una mariposa cuando es una avispa—Betty escupe con desagrado.

—Para que sepas, la única razón por la que fui al clóset con Archie fue para que Cheryl no lo hiciera. 

—¿Lo hiciste para protegerme?—Betys se estaba enojando. 

—Claro, Betty. 

—¿Entonces no pasó nada entre tú y Archie en ese clóset?—Veronica se quedó callada.

—Sí, eso pensé. Sabes, Archie y yo estábamos bien antes de tu llegada. 

—Para ti "bien" era sentir su indiferencia mientras lo perseguías con desesperación. 

—Éramos amigos, al menos. 

—Solo construías castillos en el aire, temías decir ... 

—No me conoces, Veronica. 

—No es mi culpa que no le gustes, si eso es lo que crees. No es culpa de nadie, tampoco del tonto de Archie. Así son las cosas, muchas veces la gente que nos gusta no nos corresponde. Romeo y Julieta son la excepción, no la regla. 

Betty suspiro rendida, sabía que la pelinegra tenía razón.

—Mira, no vuelvas a hablarme si eso es lo que quieres, lo aceptaré. ¿Lo que hizo Archie es tan cruel?

—¿En serio te pondrás de su lado?

—No, no estoy del lado de nadie.

Cheryl se acerco a ambas, Hope se mantenía al marguen. 

—Las Pussycats vendrán—la pelirroja menciona feliz—. Perdón, ¿las interrumpí?

—Pues, de hecho ...—trato de decir la pelinegra.

—No, no es así. De hecho, estaba por ir a buscarte, Cheryl. Tengo un certificado de regalo para una manicura y un peinado en el salón de Chez. ¿Vas conmigo?

—No lo hagas—Veronica le ruega. 

—Cállate, monstruo de clóset. Haz perdido tu derecho de ser su mejor amiga. En cuanto a pour moi, Betty, por supuesto—toma a Betty de la mano—. No rechazaría una pedicura y de hecho, te iba a sugerir lo mismo. 

Hope se cruza de brazos mientras mira con una ceja alzada a la pelirroja, esta le guiña un ojo y sale del gimnasio junto a Betty.

Hope se cruza de brazos mientras mira con una ceja alzada a la pelirroja, esta le guiña un ojo y sale del gimnasio junto a Betty

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Eres mi perdición (Jughead y tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora