𝕮𝖆𝖕𝖎𝖙𝖚𝖑𝖔 39

582 72 3
                                    

Draco

—Bien muchacho, baja veo el lago continuaremos a pié — Habla Blake Blackwood mientras yo me encontraba en mí forma de dragón surcando el cielo.

Baje mí cabeza y pude divisar el lago de la doncella, poco a poco fui descendiendo hasta llegar finalmente al suelo. Una vez me encontraba en tierra todos bajaron de mí lomo y yo regresé a mí forma normal, ya en mí forma normal me dispuse a mirar a Blake para qué nos dijera a dónde hay qué ir.

—¿Ahora qué? — Le preguntó.

—Ahora tendremos qué caminar por el bosque hacia el norte — Me responde él mirándome.

—¿Cómo podemos confiar en ti? — Le pregunta Caín a Blake —.Según las historias tú no eres de fiar, intentaste matar al rey y a la reina.

—Niño, mí primo segundo y yo hicimos un trato yo no soy todo lo qué las malditas historias dicen de mí.

—¿A no? — Samantha cruza sus brazos mirando seriamente a Blake —.¿Olvidaste qué por tú culpa fue qué inicio todo esto?, tú y tú madre obligaron a mí hermano a traer de nuevo a Van Helsing y cómo sí no fuera poco apuñalaste a mí mamá.

—Perdona y avanza, el resentimiento pasa de moda.

—Bueno ya basta — Intervengo —.Confío en qué Blake tenga palabras después de todo algún día fue el sucesor al trono vampirico y creo qué para serlo se necesita tener palabra.

—Y la tengo, Draco — Me dice.

—Será mejor darnos prisa, todos ya se debieron de haber dado cuenta qué liberamos a Blake y nos deben de estar buscando — Dije —.Blake tú guías.

Él asintió con la cabeza tras mis palabras y sin más comenzamos a seguir a Blake por el espeso bosque rumano. Caín y Samantha no confían para nada en él y honestamente aún qué ya dije qué confiaba en qué Blake tuviera palabras hay algo en mí qué desconfía en él, tengo qué estar preparado para cualquier juego qué él quiera iniciar.

No quiero ni pensar en lo qué hará papá cuando nos encontremos, con esto de liberar a su enemigo número uno me he ganado estar en mí habitación por un siglo, pero honestamente no me importa, lo único qué me importa en esté momento es encontrar la espada de Sebastián Blackwood para así acabar con Van Helsing y después poderme encargar de el famoso Conde Dracula.

Nos adentramos en la parte más oscura del bosque, apenas y los rayos del sol entraban en el lugar ya qué los árboles les impedían llegar con toda su fuerza, esté escenario se ve cómo el de una película de terror honestamente.

—Samantha — Llamó a mí hermana menor mientras todos nos encontrábamos en nuestra caminata por el oscuro bosque, ella estaba asustada y no la culpo con lo qué hicimos todos nos deben de ver cómo unos traidores o peor —.Toma mí brazo.

Ella no espero ni un solo segundo, se acercó rápidamente a mí y me tomó con mucha fuerza del brazo derecho.

—Trata de estar tranquila, oh te pondrás mal — Le digo.

—Lo intento, solo qué me da mucho miedo esté bosque y aparte me da miedo qué todos piensen qué somos traidores.

—Lo sé — Doy un suspiro —.A mí también me da pavor pensar en eso, pero recuerda qué esto lo estamos haciendo para salvar a todos los vampiros y a los humanos, hay veces Samantha qué para ganar una batalla se tienen qué hacer cosas muy locas, a veces aliarte con un enemigo, lastimar a personas inocentes o peor aún que convertirte en un enemigo.

El Heredero Del VampiroWhere stories live. Discover now